Óscar Contardo's Blog, page 158

June 9, 2017

Mon Laferte: cuidar la voz

Demasiada ansiedad con Mon Laferte. De parte de su sello, que debe estar algo intranquilo con el tibio despegue que ha tenido La Trenza, su último disco de estudio; también de sus fans, que reclaman hasta porque no fue incluida en un premio donde no tenía por donde postular como el Pulsar (básicamente porque sus publicaciones estaban fuera de plazo), y de ella misma, que con escasa conciencia sobre aquello de “dosificar”, se lanzó con todo durante un show relativamente menor dentro de su agenda y se quedó sin voz para pasar gran parte de la última semana dando explicaciones en redes sociales y asegurando que era solo una bronquitis y que pronto iba a mejorar para cumplir con todos los compromisos que tiene por delante, incluidos su shows previstos en Chile para fines de junio (dos fechas en el Teatro Caupolicán ya agotadas).


Una señal de alerta que se veía venir con lo sofocada que se le vio en el Festival de Viña del Mar (abajo del escenario, para ser más preciso) y que fue el momento exacto donde la ex chica de Rojo se convirtió con absoluta justicia -hay que decirlo- en la artista de moda, esa que hoy todos quieren ver y escuchar.


Porque lo que se ha instalado en las últimas semanas con la mujer de Tu falta de querer es precisamente eso: una suerte de tensión ambiental respecto de cada uno de sus pasos. Una expectativa desmesurada con una mujer que está aprendiendo a administrar un éxito merecido, pero que aparentemente se le vino como un camión encima.


Volver como la hija pródiga y conquistar Chile, ese país que le dio la espalda y que tuvo que “abandonar” para seguir su sueño en el extranjero, también implica manejar de la mejor manera posible esto de convertirse en la estrella global a la que todos apuestan.


Y quizás eso es más importante que, por ejemplo, el rendimiento comercial que pudo haber tenido Amárrame, su dueto con Juanes: es decir, y como primera cosa en la lista, cuidar la voz. Descifrar qué tan grande quieres ser y qué precio estás dispuesto a pagar por eso. Pensar más en la canción que en la estrategia. Crecer sin perder la esencia y dejar que otros se ocupen de las ventas, las explicaciones y las postulaciones.


En breve, decidir el lugar que quieres ocupar. Sobre todo, cuando dejaste tantas cosas atrás para conseguir lo que siempre buscaste.


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Published on June 09, 2017 23:15

June 8, 2017

¿Terrorismo?

DE TIEMPO en tiempo se vuelve a suscitar entre nosotros -a propósito de ataques incendiarios contra predios o camiones en La Araucanía-, la pregunta acerca de la naturaleza de tales crímenes. Específicamente, se plantea la duda de si ellos tienen (o no) un carácter terrorista.


La pregunta es importante desde el punto de vista penal, dado que, dependiendo de la respuesta, la legislación aplicable será diferente (la ley Antiterrorista o el Código Penal), y los procedimientos y las sanciones más, o menos, severas.


El problema, sin embargo, es que resulta sumamente difícil definir el concepto de “terrorismo”, al punto que una investigación detectó que los especialistas en la materia usan más de cien definiciones diferentes de este flagelo (Schmid y Jongman, 1988).


La expresión “terrorismo” apareció por primera vez en la edición de 1795 del “Oxford English Dictionary”, lo que sugiere que fue tributaria del “reino del terror” introducido en Francia por Robespierre, entre los años 1792 y 1794 (Greene, 2017). Más adelante, a comienzos del siglo XX, el vocablo se asoció a actividades violentas perpetradas por grupos anarquistas (particularmente asesinatos de políticos y empresarios). Luego, promediando el siglo pasado, se utilizó para calificar atentados con elementos explosivos realizados por grupos de ultraizquierda o separatistas en Europa. Finalmente, desde septiembre de 2001 ha sido el término más frecuente para rotular la violentísima acción de grupos fundamentalistas islámicos.


 En este contexto, cabe revisitar la cuestión acerca de si los crímenes que algunos grupos mapuches cometen (como incendios de propiedades y de camiones o, incluso, el asesinato ocasional de agricultores), constituyen actos terroristas.


Como sucede en este tipo de cosas, muchas veces observadores externos suelen tener la cabeza más fría al momento de caracterizar con propiedad la situación en un país determinado. Por ello es útil revisar lo que el Departamento de Estado de los EE.UU. (un país que conoce el terrorismo de primera mano) sostiene respecto de la situación en La Araucanía.


Así, en su último reporte descarta que los crímenes y delitos que se cometen allí sean “terroristas”, caracterizando en cambio la situación de esta forma: “Elementos dentro de algunas comunidades Mapuche están involucrados en un conflicto sobre la tierra y los derechos indígenas en Chile. Individuos violentos y grupos de activistas que buscan reparación por agravios han quemado iglesias, casas y pastizales, y han atacado camiones, autobuses y equipos de cultivo y explotación forestal, causando destrucción de propiedades, lesiones e incluso muertes”.  Coincidiendo con los EE.UU., el Comité de Derechos Humanos de la ONU ha expresado su preocupación por la aplicación de legislación antiterrorista a individuos Mapuche por actos que, aunque violentos (o incluso criminales), no ostentan el carácter de “terroristas”.


En todo caso, las apreciaciones de estos entes extranjeros e internacionales sobre la inexistencia de terrorismo en La Araucanía aparece confirmada por los cientos de miles de turistas (chilenos y extranjeros) que visitan la región cada año, lo cual sería sumamente extraño de ser esta una zona asolada por el terrorismo.


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Published on June 08, 2017 06:00

El Labo B de la Historia

Cada vez que se celebra algún onomástico pareciera que supiéramos perfectamente de qué se trata. El 21 de mayo; el Natalicio de Bernardo O´Higgins; el 18 de septiembre, etc. Lo hemos escuchado tantas veces, pero ¿de qué se trata todo esto? ¿Acaso es realmente la historia oficial la verdadera historia? Sin intentar caer en los oscuros vericuetos de las teorías conspirativas, ¿no les ha sucedido, a veces, que escuchamos versiones distintas sobre los mismos temas? ¿Por qué celebramos el 21 de mayo el Día de las glorias navales, si ese día obtuvimos una profunda derrota? ¿Por qué recordamos año a año el día del nacimiento de O´Higgins si no fue él quien nos liberó del yugo español? ¿Por qué el 18 de septiembre de 1810 es considerado el Día de la independencia si, en realidad, tuvieron que pasar muchos años más para que pudiéramos tener un gobierno realmente autónomo e independiente?


Pareciera que existe un lado B de la historia, una historia oculta que no nos han querido contar. Se trata de verdades a medias. De una verdad escrita por algunos. Por aquellos que fueron los que pudieron imponer sus puntos de vista. Aquellos que fueron los vencedores por sobre otros que aparecen como los vencidos. Pero ¿qué significa realmente esto? Seguramente, hay personas a quienes les interesa mucho que las cosas sean de una determinada manera y no de otra. Pero, ¿por qué? Si pudieran escribir la historia a su amaño, lo harían. Pareciera que se tratara de algo casi personal. Sin embargo, de alguna manera, en mayor o menor medida, la historia verdadera, la que hemos heredado de nuestros padres y abuelos, la completa, con todas sus aristas, las que nos gustan y las que no nos gustan, reaparece cada cierto tiempo en el horizonte cercano de nuestra joven sociedad; o bien siempre ha estado ahí, al alcance de nuestras manos, frente a nuestras narices, para contemplarla directamente, palpable como el aire que respiramos.


Literalmente, cuando caminamos por las calles de una ciudad es posible apreciar esa verdadera historia. Muchas calles conservan el nombre que les fue dado desde los orígenes de la República. Muchos lugares llevan la denominación de algún acontecimiento que fue determinante y que sólo ocurrió en ese lugar y no en otro.  Edificios, casas y parques tienen el nombre del personaje o la familia que eran sus dueños originales. Varios monumentos siguen estando ahí porque es muy difícil hacerlos desaparecer. No obstante, hay estatuas que han sido cambiadas de lugar o que permanecen en un deterioro ostensible, sin que nadie se preocupe de ellas. También hay calles que ya no mantienen sus nombres originales, como un intento de hacer desaparecer a los homenajeados. Algunos parques y plazas importantes han sido rebautizados, olvidándose en el devenir del tiempo su legítimo origen. Es un esfuerzo premeditado de cambiar la historia.


¿Sabía usted que el Parque O´Higgins originalmente se llamaba Parque Cousiño en honor a la familia que lo donó para el dominio público? ¿Sabía usted que O´Higgins nunca llevó el grado militar de capitán general ni menos el apelativo de Libertador? ¿Sabía usted que en el mismo lugar donde está el edificio del Banco Central de Chile se situaba la casa de la familia de Manuel Rodríguez, donde nació y se crió? ¿Sabía usted que en la mayoría de las plazas de todas las ciudades de Chile existen sólo tres bustos sistemáticamente colocados: el de O´Higgins, el de Prat y el de Carrera Pinto? ¿Sabía usted que la hermosa estatua de a pie de José Miguel Carrera, esculpida por el famoso escultor francés Auguste-Alexandre Dumont -autor de la estatua de Napoleón como César, que corona la Columna de la Plaza Vendome y del Génie de la Liberté sobre la columna de Julio, en la Plaza de la Bastilla- estaba emplazada en la ciudad de Santiago exactamente donde hoy se encuentra la del General San Martín?


Pero las cosas parece que han comenzado a cambiar. No se trata solamente del vertiginoso éxito de algunos libros como La Historia Secreta de Chile de Jorge Baradit, ni de Logia, de Francisco Ortega. Tampoco se trata de las apariciones recurrentes de algunos expertos historiadores en programas matinales, hablando en paneles formados al efecto cuando sucede algún acontecimiento que nos exige recordar algo. Ni menos de canales ni programas de televisión especialmente dedicados a la historia, como History Channel, Nat Geo o H2. De lo que se trata es que, de un tiempo a esta parte, la gente ha comenzado a interesarse más sobre conocer la historia de su país, de su generación y de su vida.


Queremos indagar la historia porque queremos comprender mejor los sucesos que nos han afectado directamente. Queremos saber acerca de la historia de Chile y de nuestro continente para no repetir los mismos errores que en el pasado cometieron los que nos antecedieron. Queremos conocer la historia para no olvidar nuestro pasado. Con seguridad, seguirán existiendo aquellos que deseen borrar con el codo la historia que se escribió con pluma sobre un papel, a partir de los grandes hechos que coronan la historia de nuestro continente americano. Y también los que consideren que poseen la capacidad privilegiada para interpretar, mejor que los demás, los acontecimientos históricos de los cuales otros, no ellos, han sido sus legítimos protagonistas.


Pero tendrán que convivir con aquellos otros, que no aceptaremos más que nos impongan una historia oficial por sobre otra que se ha difundido a través de la tradición oral de las familias, de generación en generación, y en la cual nuestros auténticos héroes, los que, como José Miguel Carrera y Manuel Rodríguez, dieron su vida por algo más sublime que la tendenciosa posteridad, cual es la causa de la patria y la libertad; construyeron desde sus cimientos nuestro país y aparecen ante nosotros, como si siempre hubieran estado ahí, enfrentándonos como fantasmas, evitando ser olvidados, como vigilantes eternos de nuestro propio promisorio futuro.


 


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Published on June 08, 2017 05:55

Candidatos vacuos

Actualmente, abundan los candidatos para todos los gustos, hay buenos y malos candidatos en ese sentido, pero la duda es ¿Tenemos buenos políticos actualmente? Creo que no. En general, lo que hemos podido ver en los últimos días es que tenemos candidatos que caminan al filo de ser simples comediantes. Están más preocupados de las impresiones que generan en las diversas audiencias, pero no tienen interés en el sentido y fondo de lo que dicen o proponen mediante una fraseología trivial y muchas veces contradictoria.


El período pre presidencial nos está mostrando con crudeza que nuestro proceso político actual se ha tornado peligrosamente carnavalesco. Muchos de los candidatos parecen más sujetos estérilmente agitados que políticos apasionados y responsables, movidos por una finalidad objetiva. El hacer camino al andar, el pretender iluminar y purificar la política con santidad o juventud, o el decir que en realidad nada se sabe con certeza y que todo se verá en el proceso, responden a esa carencia políticamente peligrosa. Y es que como decía Max Weber en su famosa conferencia Politik als Berufen dictada en la universidad de Berlín un 28 de enero de 1919, no todo se arregla con pura pasión sino con mesura y responsabilidad.


¿Dónde está la razón de tal fenómeno bufonesco? No es solo lo que algunos llaman la oleada populista sino que la lógica política impulsada en los últimos años. En Chile, lo que podemos llamar la política de la vanidad tiene su origen en la concepción miope con respecto a la actividad política que se promovió públicamente bajo la idea de evitar las ideologías, la polarización y la politiquería. Pero sus promotores olvidaron que una política despolitizada, sin convicciones y en extremo tecnificada o cosista, nunca ha sido el mejor remedio contra la polarización y la sobre politización de la sociedad civil. Al contrario, solo propicia la exacerbación del clientelismo partidario, electoral y ciudadano a manos de los cazadores de votos y cargos. No debería extrañarnos entonces que, en Chile, el tamaño de la burocracia estatal y el número de ministerios y organismos se hayan ido acrecentando paulatinamente a medida que el fenómeno clientelar se acentuaba, bajo la excusa de dar más ayuda, seguridad y protección para los desposeídos. Bajo la pomada de Más estado se camufló la estructura de empleos burocráticos estatales con que los partidos políticos pagan las lealtades de sus adeptos. Así, en ese proceso, los cazadores de cargos cooptaron los partidos convirtiéndolos, tal como advertía Max Weber en su conferencia, en órganos totalmente desprovistos de convicciones cuyos «mutables programas son redactados para cada elección sin tener en cuenta otra cosa que la posibilidad de conquistar votos». Bajo este escenario, actualmente el demagogo en su sentido tradicional vuelve a operar bajo el prisma del homo videns. Su misión es atraer adeptos con carisma, buena dicción, simpatía. Nada más. ¿Programas, propuestas? Eso se ve después. Entonces, ahí están los candidatos atrapa todo sin mucho fondo hablando de iluminar la política, de candidaturas conceptuales, de que no son políticos, de que no están de acuerdo con lo que piensan, pero que se vanaglorian de su alta moral, de su pureza y sus buenas intenciones. Hablando a un todo que no es nada en realidad.  


Frente a esto ¿A quién podemos considerar hoy un buen líder político actualmente en Chile? Para Weber, la política se hace con pasión, con vocación, pero no basta con eso, también se requiere responsabilidad. Ambas cosas son esenciales para hacer una buena política y ser un buen político. Y la responsabilidad no es solo cumplir la ley o pretender, retóricamente al fin y al cabo, ir más allá de ella para satisfacer a la masa o la propia vanagloria personal. También se requiere algo esencial, el temple para poder decir: aquí me detengo. Porque, tal como decía Weber en su conferencia, el político tiene que vencer diariamente a un enemigo muy trivial y demasiado humano, la falta de mesura frente a sí mismo.


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Published on June 08, 2017 05:46

Nuevos tiempos, nuevas lecturas

A propósito del último Simce y de la baja en lectura en los hombres de II medio, resulta indispensable  fomentar la lectura desde edad temprana, no importando si es en papel o con la ayuda de los dispositivos digitales. Así pues, evitamos centrarnos en la inconducente discusión de si son buenos o malos  los aparatos electrónicos al momento de impulsar este hábito y más bien nos concentramos en cómo somos capaces de proponer nuevas formas de acercar a los estudiantes a la lectura.


Las nuevas tecnologías son una realidad que llegó para quedarse. En ese sentido, queremos llamar la atención con respecto a la necesidad del sistema escolar de adaptarse a la nueva manera de aprender de los jóvenes, muchos de ellos nativos de internet; estos estudiantes nos ponen en un gran reto que no podemos eludir. Si se entienden las tecnologías como un carril paralelo a la escuela, como un recurso aparte, estamos rehuyendo el desafío de los colegios de incorporar los dispositivos digitales de manera pedagógica, convirtiéndolos en un aporte para impulsar la lectura al interior de las salas de clases.


Leer, sin duda, es una posibilidad de descubrir, de ir más allá con la imaginación, de conocer otras realidades. Por eso, sumado a la asimilación de las nuevas tecnologías, es fundamental hablar del placer de la lectura, para que los estudiantes la perciban como una diversión, no como una imposición; apoyando a cada joven para que tenga un encuentro personal con la lectura, según su edad e inquietudes. De acuerdo con esto, tiene sentido la frase del escritor Jorge Luis Borges en cuanto a que el verbo leer, como el verbo amar y el verbo soñar, no soporta el modo imperativo.


Es un hecho que existe una tendencia a que los niños y jóvenes dejen de leer a medida que van creciendo, debido –entre otros factores– a que cada vez somos menos capaces de estimularlos a leer, por lo que resulta necesario ser más creativos y redoblar los esfuerzos para que crean que la lectura  es algo importante para ellos, para su vida.


A su vez, no debemos desestimar la brecha de género al respecto. Las mujeres tienen mejores hábitos lectores que los hombres, lo cual se transforma en un factor protector para su desempeño en lectura. A partir de los Cuestionarios de Calidad y Contexto de la Educación, por ejemplo, observamos que un 42 % de los hombres de II medio solo lee “si se le obliga”, versus el 26 % de las mujeres; un 51 % de los hombres “no lee para entretenerse”, versus un 32 % de las mujeres; y que el 28 % de los hombres “le gusta que le regalen un libro”, versus el 54 % de las mujeres.


Por eso es fundamental que también los padres, sin estereotipos, se hagan parte del proceso de motivar la lectura en sus hijos, pues además de generar oportunidades de aprendizaje, les permite crear vínculos y desarrollar, adicionalmente, el pensamiento crítico, reflexivo y empático con el mundo.


En resumen, el impulso de la lectura es importante para incorporar nuevos conocimientos y para la transmisión intergeneracional de las bases que sustentan nuestra sociedad. Leer –independiente del formato: libro o dispositivo digital–  no solo puede tocar la emoción misma, las fibras más íntimas de las personas, sino que revela mundos que de otro modo tal vez nunca conoceríamos. El esfuerzo entonces está en entender los nuevos tiempos, las nuevas lecturas. Lo anterior no es ficción, es una historia que estamos reescribiendo, todos.


 


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Published on June 08, 2017 05:45

Saliendo Aprendo: Cuidar la Infancia, Cuidar el Planeta

El Día Mundial del Medio Ambiente fue establecido por la Asamblea General de Naciones Unidas y se celebra desde 1973 el 5 de junio de cada año, conmemorando la Conferencia de Estocolmo que introdujo la temática a nivel mundial.


Sin perjuicio del retiro de Estados Unidos del Acuerdo de París, sellado en 2015 por casi 200 países y en que se establece un calendario de reducción de las emisiones para paliar los efectos del cambio climático, prevalece el consenso mundial en torno a la crisis ambiental y a la necesidad de disponer los mayores esfuerzos para la restauración y conservación de los ecosistemas.


Los últimos años hemos visto que las políticas de los gobiernos han debido dar más espacio a las exigencias ciudadanas. Ellas, empoderadas, han logrado movilizar legislaciones e impulsar iniciativas en distintos ámbitos, pero sin duda el ambiental ha sido uno de los más presentes en el discurso público. Parte de este efecto en la ciudadanía lo tiene el auto reconocerse como responsables de la vida en el planeta, entender cómo funciona la naturaleza y las formas de que resguardemos adecuadamente los equilibrios causando el menor impacto posible.


En todo este proceso es clave la educación ambiental, abrir fronteras de conocimiento a través de la experiencia práctica en etapas tempranas de la formación escolar dónde este aprendizaje va de la mano con el desarrollo de conductas prosociales como la convivencia, el trabajo en equipo y el desarrollo de conductas protectoras y de autocuidado. Para un niño la educación ambiental es también una alegoría de sus relaciones familiares y comunitarias, la restauración ambiental es una  forma de aprender a reparar y conservar su entorno emocional inmediato.


En este contexto, es que se enmarca el Programa “Saliendo Aprendo”, de la Fundación San Carlos de Maipo, el cual está orientado a estudiantes de 5° y 6° de Educación Básica de escuelas con un Índice de Vulnerabilidad Escolar (IVE) superior a un 70%, utilizando una metodología esencialmente participativa y comprometida con los valores de respeto hacia sí mismo, con sus pares y medio ambiente en conjunción con el autocuidado, con un enfoque basado en la Estrategia de Desarrollo Social.


El Programa consiste en doce  sesiones-taller que se desarrollan durante un año académico, en las que se destinan tres  de ellas a salidas pedagógicas: Parque Aguas de Ramón asociada, al “Taller Reciclaje y su importancia para el medio ambiente”; Casona de la Fundación San Carlos de Maipo,  al “Taller de energías sustentable y uso responsable de las aguas”; y Humedal de Batuco, al “Taller cómo comprendemos nuestra naturaleza y cuidados de los humedales”. A su vez, los estudiantes preparan y presentan proyectos asociados a las temáticas tratadas en las salidas pedagógicas  que consideran útiles de ejecutar en sus escuelas.


Más de 700 alumnos han participado de esta iniciativa y con la manualización y sistematización se espera que muchos otros colegios y organizaciones se sumen a evaluar y  replicar este modelo, que propone una teoría de cambio impulsando el desarrollo positivo de los niños a la vez de incentivar el cuidado del medio ambiente.


Tenemos la convicción de que las acciones que busquen trabajar con la infancia e integrar estos conceptos no sólo invertirán en un medio ambiente sano, sino fundamentalmente en una juventud y una adultez que sea cada vez más consciente de que el cuidado del planeta es el resultado del cuidado de nuestros niños, y en ello debemos proponernos hacer los cambios desde nuestro entorno más cercano, en la casa, en la escuela y en nuestra comunidad.


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Published on June 08, 2017 05:41

Sin inventos

Detengamos la imaginación. No es un momento para fantasear. No proyecte a la selección con un solo delantero. No construya mentalmente una formación con un líbero y dos centrales marcados. No pierda el tiempo pensando en que los dos laterales chilenos tengan un precipicio fuera del área. No intente ser un visionario que busque llenar el centro del campo con cinco volantes. A diez días de la Copa Confederaciones no nos encandilemos con métodos innovadores.


No pensemos que en dos semanas se pueda urdir un estilo nuevo, un sistema distinto, una táctica original. Aunque Juan Antonio Pizzi tenga un modelo inédito, en Rusia no se puede inventar. Pensar en fundar otra receta es malgastar el tiempo. Chile no tiene que innovar. La fórmula del éxito debe perdurar. Matices pueden y deben surgir, pero la base es intocable.


No tengo dudas de que para el debut ante Camerún el equipo es el siguiente: Bravo; Isla, Medel, Jara y Beausejour; Marcelo Díaz, Aránguiz y Vidal; Edson Puch (Fuenzalida), Vargas y Alexis Sánchez. Sin lesiones ellos comienzan la batalla. Pueden existir variantes: ubicar otro volante de recuperación, jugar con dos delanteros libres y evitar la utilización de un puntero fijo, agregar un defensor más (en caso de mantener un resultado) y construir una línea de cinco, disponer a Sagal como nueve, adelantar a Beausejour como puntero izquierdo suprimiéndole su posición de lateral o soltar a Vidal como generador ofensivo restándole funciones defensivas. Son movimientos simples que no desfiguran el rostro.


Su espíritu no se puede traicionar. El 1-4-3-3 de Pizzi es dinámico, pero no debe ser infiel. Transitar por un 1-4-2-2-2 no lo va a contaminar. El sector ofensivo por donde presiona, la circulación necesaria del balón, la profundidad de los laterales, el balón largo de Jara, el recorrido extenso de Vidal y Aránguiz, el equilibrio de Díaz, el anticipo de Medel, la amplitud del campo en ataque, el retroceso defensivo de los delanteros y la comprensión absoluta de una línea de juego no se puede desperdiciar. La gran fortaleza de este grupo es la reiteración permanente de su única guía, ésa es la gracia.


Barcelona, Bayern, Real Madrid, Brasil, Uruguay no construyen escenarios para cada enfrentamiento, son ellos mismos. En ese grupo selecto está Chile.


Ni siquiera la aparición de Cristiano te obliga a cambiar el fondo. Atención especial, sí, pero un rojo distinto, jamás. La potencia física de Camerún y la juventud de una generación nueva de Alemania podrían obligar a la Selección a poner barreras opuestas a su personalidad; sin embargo, son ellos los llamados a vestirse distintos frente a Chile. Hoy nuestra selección no se cambia de ropa, no se disfraza, no se engaña. Juega como sabe, sin inventos.


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Published on June 08, 2017 04:11

June 7, 2017

La venta de ilusiones

HAY QUE desconfiar de los candidatos presidenciales que dicen que, si ellos triunfan, el verdadero gobernante serán los ciudadanos. Esa posibilidad no existe: nunca gobiernan directamente los ciudadanos, sino los representantes elegidos a través del sufragio universal. Decir, además, que se hará lo que la gente pida (o sea, un programa de gobierno a la carta) es una expresión de cruda demagogia. Por supuesto que la democracia moderna tiene que considerar el sentir de la población al definir las políticas públicas, pero otra cosa es prometer que el pueblo gobernará.


Esa promesa ha sido un recurso usado por todos los autócratas latinoamericanos, desde Perón a Chávez. Este último les decía a los venezolanos: “Ustedes son Chávez, todos somos Chávez”, para hacerles creer que se había producido la fusión del líder y el pueblo en un solo cuerpo. No era más que una artimaña para imponer el autoritarismo, cuyas criminales consecuencias están a la vista en las calles de Caracas.


En Chile, no parece haber espacio para las aventuras autoritarias, pero por desgracia se ha ensanchado el terreno del ilusionismo, como lo prueban los candidatos que repiten los eslóganes del último desfile y agitan la idea de que existen atajos hacia una sociedad con mayor igualdad. Eso es exactamente el discurso de los derechos sin deberes, que trata a los ciudadanos como si fueran adolescentes a los que hay que ocultarles los límites de la realidad.


Ejemplo de consigna desaprensiva fue la Asamblea Constituyente, brumosa en su composición y alcances, y que se describía como un momento de refundación institucional… ¡en un país que no necesitaba ser refundado! Hubo incluso una alegre bancada de diputados por la Asamblea Constituyente. ¿Adónde habríamos ido a parar si se hubiera impuesto la frivolidad de esos parlamentarios? Y allí siguen, sueltos de cuerpo, sin asomo de autocrítica, solo preocupados de ser reelegidos. El proceso constituyente auspiciado por Bachelet fue un intento de esquivar la fantasiosa asamblea con otra fantasía: la de que redactaríamos una nueva Constitución entre todos. ¡Cuánto tiempo perdido y cuántos recursos malgastados!


El país no puede pasar otros cuatro años discutiendo sobre la Constitución. Eso debería quedar despejado el próximo año mediante un acuerdo entre el nuevo gobierno y el nuevo Congreso.


La mayoría de los chilenos no quiere más experimentos dudosos, sino solución de los problemas de delincuencia, atención de salud, calidad de la educación, oportunidades de empleo digno, mejoramiento de las pensiones, etc.


Esperemos que la campaña ayude a fortalecer la cordura política y la conciencia de que gobernar es un asunto serio. El BC acaba de proyectar que la inversión caerá por cuarto año consecutivo en 2017 y que la economía crecerá solo 1,75%. Esa es la realidad.


Precisamente por ello, el Estado tiene la obligación de establecer prioridades y focalizar los recursos. En los próximos años, será necesario movilizar las energías creativas de toda la sociedad. Y eso exigirá grandes acuerdos.


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Published on June 07, 2017 23:30

Dos rescates

HACE APENAS ocho años, después de casi cuatro décadas de trabajo sostenido pero silencioso, Lydia Davis empezó a ser reconocida a nivel mundial. Fue en 2009 cuando la editorial Farrar, Straus and Giroux publicó sus Cuentos completos, un hito que permitió aquilatar la originalidad de una propuesta que conjuga la experimentación formal con la cercanía con el lector.


En español se encuentran sus Cuentos completos y No puedo ni quiero. Ambos volúmenes confirman el carácter inclasificable de Davis. Porque sus relatos no pretenden enganchar al lector al primer párrafo, los personajes rara vez tienen nombre, prácticamente no hay diálogos y el contenido se ajusta más a una idea que a un hecho. Lo que sí tiene es que escribe corto, aunque quizá sea demasiado breve para un cuento. Los textos de Davis pueden tener menos de una página; incluso un párrafo.


Como en Kafka y Pessoa, en ella la brevedad corre pareja con la intensidad, la inteligencia se entrelaza con las emociones, y el humor va acompañado de la seriedad. Sus preocupaciones abarcan toda la esfera humana y en la mayoría de los casos la narradora es una mujer de clase media, que reflexiona sobre sus vínculos afectivos, adorable a pesar de sus neurosis, que disfruta de la tranquilidad alcanzada aunque no por ello se sienta satisfecha con el cauce que van tomando las cosas: el avance de los achaques, el descenso del erotismo, el triunfo de los defectos.


Fue Davis, en gran medida, la responsable del éxito actual de Lucia Berlin (1936-2004). Manual para mujeres de la limpieza es para muchos uno de los grandes rescates editoriales del último tiempo. Lucia Berlin empatiza con los caídos sin ser políticamente correcta.


La ironía y una noción casi religiosa de la piedad (o la compasión) por sujetos más o menos marginales, ayudan a entender por qué su voz resulta tan envolvente. Algo tiene que ver el hecho de que muchas de sus historias están sacadas de su propia vida, que es de leyenda: múltiples viajes, tres matrimonios, oficios que van de empleada doméstica a profesora universitaria, alcoholismo y, al final, un tanque de oxígeno para respirar.


Aunque ahora se la pinta como una total desconocida, sus primeros relatos fueron publicados en Atlantic Monthly y The Noble Savage, la revista de Saul Bellow, y su libro Homesick recibió en 1990 el American Book Award. Algunos críticos la han comparado con Carver y otros exponentes del minimalismo. Me temo que hay algo desajustado. Cada cierto tiempo la maquinaria editorial estadounidense echa a correr un nuevo rescate que se presenta como La Gran Injusticia de la Literatura Universal. Si además de buenos escritores han tenido una vida intensa, tanto mejor. Pasó con Richard Yates, hace unos años, y seguirá ocurriendo. Lucia Berlin es una cuentista encantadora, incluso una gran exponente de lo que ha sido la tradición del cuento americano: directo, transparente, realista. Leerla como la mujer que remueve el canon, ese que va de Nathaniel Hawthorne a John Cheever, y que posee a Hemingway y O’Connor en la primera línea, sería una desmesura.


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Published on June 07, 2017 23:25

Donación y transplante de órganos: el equilibrio entre generosidad y necesidad

Los avances de la Ciencia Médica han posibilitado, cada vez en mayor medida, que fallas orgánicas considerables y enfermedades graves puedan abordarse con complejas cirugías, incluidas las de trasplante de órganos, los cuales han llegado a desarrollarse con bastante éxito, otorgando a los pacientes más años de vida y de una mejor calidad.


Como todos los avances científicos, la sociedad no sólo requiere que el procedimiento se encuentre disponible, sino además que exista una debida promoción para entender la importancia que este tema implica, concientizando sobre la relevancia de ser donante, y contar con una regulación que asegure criterios de equidad en las prioridades de trasplantes, condiciones que tiendan a evitar el riesgo exagerado del donante, la disponibilidad de órganos con respeto al consentimiento informado y límites que eviten el abuso de estas situaciones por motivaciones económicas o de otro orden.


Establecer un equilibrio entre estos todos estos elementos no ha sido fácil y en el panorama nacional hemos experimentado ciertos vaivenes que no siempre mejoran la situación, sino que además contribuyen a la incertidumbre y desconfianza, barreras que es indispensable superar.


En primer término, es fundamental que las personas –requieran trasplantes o no – cuenten con la debida información sobre qué significa y cómo se realiza la donación de órganos y también sobre las implicancias de la donación entre vivos, como de órganos de personas fallecidas, pues aunque la ley nos haya declarado “donantes universales” – salvo que expresemos nuestra negativa ante notario- ello no significa en realidad un fácil acceso si el potencial donante no deja suficientemente clara su voluntad a su familia y todos entienden que éste no es un acto de disposición de su vida sino de generosidad.


En efecto, los casos dudosos se consultan a la familia y normalmente allí surgen aprehensiones y versiones sobre lo que su deudo hubiera o no querido.  A modo ejemplar, la encuesta efectuada en 2015 por IPSUSS de la U. San Sebastián, indica que un 74% de los encuestados autorizaría la donación de órganos de un familiar cercano; cuatro de cada diez personas no confía en el sistema de trasplante en Chile; del 13% que no donaría sus órganos, un 68% recibiría igualmente órganos de un trasplante (estos encuestados no saben que hay un impacto en declararse no – donante respecto de la prioridad para ser trasplantado) y 43% de quienes no donarían sus órganos, no lo han conversado con su familia.


En ello, se han de considerar también las creencias de las personas, su visión sobre el compromiso social y su confianza en el entorno médico, todo lo cual es tema de hilado fino, que impacta directamente nuestra realidad, explicando desde largas listas de espera para trasplantes hasta deficiencias en los protocolos o su incumplimiento.


Si bien y procurando incentivar la donación entre vivos, en enero de este año se dictó una modificación a la ley de trasplantes que permite la donación cruzada para ampliar el universo de donantes histocompatibles, la reglamentación que hace operar esta importante posibilidad aún no se dicta, por lo cual aún queriéndolo, una persona viva no puede donar un órgano a terceros, sólo a sus parientes, todo lo cual desmoraliza a los que esperan y malogra sus expectativas.


En consecuencia, en momentos en que la interdisciplina es tan necesaria y resulta aventurado abordar temas complejos sólo desde un frente, se requiere para responder decididamente a la problemática de la donación y trasplantes, tanto de campanas de incentivo y comunicacionales, como de información detallada y comprensible. A ello debe agregarse, esencialmente, una normativa legal y reglamentaria eficiente en su objetivo y a la vez protectora de los derechos de todos los incumbentes y criterios médicos cuidadosos no sólo de la operación misma, sino de las condiciones de pacientes y donantes antes de ésta y a posteriori.


La entrada Donación y transplante de órganos: el equilibrio entre generosidad y necesidad aparece primero en La Tercera.

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Published on June 07, 2017 06:46

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Óscar Contardo
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