Félix A. Bas's Blog, page 88
September 10, 2018
Crítica: LA MONJA
Los spinoff, por norma general, suelen ser más bien prescindible. Y si se hace de un género como el de terror, puede hablarse ya de afán recaudatorio a costa de su calidad. Esta no será menos, escudándose bajo la saga The Conjuring, será muy taquillera, pero calidad tiene más bien poca. Sustos, monjas, religión y más de lo mismo. Esta semana hemos visto: LA MONJA.
The nun está dirigida por Corin Hardy, con una breve aparición de Taissa Farmiga para que el espectador sepa que tiene conexión con las anteriores películas de la saga y con Demian Bichir, Charlotte Hope y Jonas Bloquet interpretando personajes planos y estereotipados. Todo ocurre cuando una monja se cuelga en la abadía de clausura en Rumanía y estos tres van a inspeccionar qué sucede. Al llegar, comprobarán que el mal se ha afincado en la abadía, y para ello tendrán que investigar lo que sucede. Poco más que contar en una historia que no se preocupa en exceso de explicar nada, primero porque no es necesario, y segundo porque a nadie le interesa.
LA MONJA abusa de CGI's, de sustos (que la mayoría se ven venir) y, en definitiva, sabe que vive de las rentas de The Conjuring. No se toma en serio a sí misma y parece más una película de serie B que, sin embargo, es entretenida. Tendréis monjas pululando, sombras tenebrosas, crucifijos que se dan la vuelta solos y se ponen a arder solos, un escuadrón de monjas rezando y hasta a un francés insoportable que va de gracioso. La película no sabe cómo contarse, así que ni siquiera sabemos por qué el mar se afinca en la abadía, por qué quiere salir y qué quiere hacer por allí. El caso es que los protagonistas toman decisiones absurdas, como la de separarse en infinidad de ocasiones, y todo tipo de clichés del género. La película pierde todo el misterio cuando el mal se revela y todo se hace excesivamente explícito. La sutilidad siempre es mejor.
En definitiva, LA NOVIA es una buena película para verla en el cine, en sala llena, para reírse de los que gritan asustados y partirse de risa con la cantidad de cosas absurdas que suceden. En mi caso ha sido una de las películas con las que más me he reído del año, así que al menos ha valido la pena el desembolso. Por lo demás, tenéis sustos decentes y una atmósfera interesante. Poco más. Si os gusta la saga la veréis, pero es la peor.
The nun está dirigida por Corin Hardy, con una breve aparición de Taissa Farmiga para que el espectador sepa que tiene conexión con las anteriores películas de la saga y con Demian Bichir, Charlotte Hope y Jonas Bloquet interpretando personajes planos y estereotipados. Todo ocurre cuando una monja se cuelga en la abadía de clausura en Rumanía y estos tres van a inspeccionar qué sucede. Al llegar, comprobarán que el mal se ha afincado en la abadía, y para ello tendrán que investigar lo que sucede. Poco más que contar en una historia que no se preocupa en exceso de explicar nada, primero porque no es necesario, y segundo porque a nadie le interesa.
LA MONJA abusa de CGI's, de sustos (que la mayoría se ven venir) y, en definitiva, sabe que vive de las rentas de The Conjuring. No se toma en serio a sí misma y parece más una película de serie B que, sin embargo, es entretenida. Tendréis monjas pululando, sombras tenebrosas, crucifijos que se dan la vuelta solos y se ponen a arder solos, un escuadrón de monjas rezando y hasta a un francés insoportable que va de gracioso. La película no sabe cómo contarse, así que ni siquiera sabemos por qué el mar se afinca en la abadía, por qué quiere salir y qué quiere hacer por allí. El caso es que los protagonistas toman decisiones absurdas, como la de separarse en infinidad de ocasiones, y todo tipo de clichés del género. La película pierde todo el misterio cuando el mal se revela y todo se hace excesivamente explícito. La sutilidad siempre es mejor.
En definitiva, LA NOVIA es una buena película para verla en el cine, en sala llena, para reírse de los que gritan asustados y partirse de risa con la cantidad de cosas absurdas que suceden. En mi caso ha sido una de las películas con las que más me he reído del año, así que al menos ha valido la pena el desembolso. Por lo demás, tenéis sustos decentes y una atmósfera interesante. Poco más. Si os gusta la saga la veréis, pero es la peor.
September 3, 2018
Crítica: YUCATÁN
Las comedias españolas últimamente no dan con la tecla. Esta tampoco lo consigue y se ampara en unos estafadores y un millonario para hacernos pasar un rato entretenido, sin más, pero que no quedará en la retina del espectador durante más de cinco minutos. Esta semana hemos visto: YUCATÁN.
Daniel Monzón dirigió Celda 211 y El niño, pero ha optado por realizar una comedia con Luis Tosar y Rodrigo de la Serna como cabezas de cartel, acompañándoles también Joan Pera y Stephanie Cayo. El resultado es discutible, aunque los recursos son altos, tanto económicos como en secundarios como Toni Acosta y compañía, que están bastante desaprovechados. Un placentero y divertido crucero se convertirá en un nido de estafadores al acecho de un millonario (Joan Pera) que pasa las vacaciones con su familia.
Lucas (Luis Tosar) y Clayderman (Rodrigo de la Serna) se habían separado hace años, pero vuelven a encontrarse junto con Verónica (Stephanie Cayo) para dar el golpe de sus vidas. Nada menos que 160 millones de euros andantes por un barco a la espera de ser cazados por unos trepas que entre ellos mismos tratarán de boicotearse para sacar tajada. Es una buena idea, no es que sea demasiado original, pero sin ser una película lenta o pesada, sí que es excesivamente larga y poco divertida. Y que una comedia sea poco divertida no habla demasiado bien de ella.
En definitiva, una comedia española más, justita, con chistes más o menos acertados, personajes estereotipados y algo buenrollista que ni aburre ni divierte en exceso. Se queda en tierra de nadie y se olvidará enseguida, así que tampoco os perdéis mucho si no la veis.
Daniel Monzón dirigió Celda 211 y El niño, pero ha optado por realizar una comedia con Luis Tosar y Rodrigo de la Serna como cabezas de cartel, acompañándoles también Joan Pera y Stephanie Cayo. El resultado es discutible, aunque los recursos son altos, tanto económicos como en secundarios como Toni Acosta y compañía, que están bastante desaprovechados. Un placentero y divertido crucero se convertirá en un nido de estafadores al acecho de un millonario (Joan Pera) que pasa las vacaciones con su familia.
Lucas (Luis Tosar) y Clayderman (Rodrigo de la Serna) se habían separado hace años, pero vuelven a encontrarse junto con Verónica (Stephanie Cayo) para dar el golpe de sus vidas. Nada menos que 160 millones de euros andantes por un barco a la espera de ser cazados por unos trepas que entre ellos mismos tratarán de boicotearse para sacar tajada. Es una buena idea, no es que sea demasiado original, pero sin ser una película lenta o pesada, sí que es excesivamente larga y poco divertida. Y que una comedia sea poco divertida no habla demasiado bien de ella.
En definitiva, una comedia española más, justita, con chistes más o menos acertados, personajes estereotipados y algo buenrollista que ni aburre ni divierte en exceso. Se queda en tierra de nadie y se olvidará enseguida, así que tampoco os perdéis mucho si no la veis.
August 29, 2018
Crítica: EL VIAJE DE NISHA
Vivimos en la multiculturalidad, pero a veces no somos conscientes de la suerte que tenemos los occidentales. Os traigo una película muy dura, imprescindible para educadores y que, además, es autobiográfica. El choque cultural narrado con la mayor crudeza. Esta semana hemos visto: EL VIAJE DE NISHA.
Hva vil folk si, o What people will say (qué dirá la gente), es un nombre mucho más adecuado para una película noruega dirigida por Iram Haq, la directora que nos cuenta su propia historia, algo que nos pondrá los pelos de punta cuando la veamos. Porque EL VIAJE DE NISHA es tan cruda que te acaba indignando progresivamente conforme avanza el metraje. Nisha (Maria Mozdah) es una chica de 16 años que vive con su familia en Noruega. De puertas hacia adentro es la hija perfecta para sus padres pakistanís, pero en sociedad está completamente occidentalizada. Un día, sin embargo, su padre (Adil Hussain) la pilla en su habitación con un chico. Ahí comenzará un viaje que la llevará a Pakistán con la familia de su padre y que será una verdadera tortura.
EL VIAJE DE NISHA es una película imprescindible para educadores. El choque multicultural que se produce en la película es impactante. Indigna darse cuenta el atraso y sometimiento que existe en otros países hacia la mujer y el mercadeo que se produce. Es una película que revuelve las entrañas y que nos sacude con fuerza. Hay bastantes escenas que harán que el espectador apriete los puños con rabia y frustración, que cabecee una y otra vez, negando que algo así pueda suceder todavía. Pues sucede y sucedió, porque cuando te enteras de que es una autobiografía de la propia directora la cosa no mejora.
Iram Haq utiliza la película como denuncia para algo que todavía existe. Los padres envían a sus hijas europeizadas a Pakistán y allí son sometidas a una cultura involucionada. La propia directora afirma que la película está "suavizada", pero podemos hacernos una idea de lo que sucede. El machismo lacerante de una sociedad que no entiende de libertades choca con la europeización, desencadenando guetos y nula integración por parte del inmigrante, en este caso pakistaní. en EL VIAJE DE NISHA asistimos a multitud de choques culturales y, de paso, nos ayuda a darnos cuenta de cuánto hemos avanzado, y lo que queda.
En definitiva, EL VIAJE DE NISHA es una película imprescindible para educadores y para adolescentes. Saber lo que nos aporta nuestra educación, el rol de la mujer en distintas culturas y el sometimiento que sufre gracias a la religión y a la inseguridad del hombre. No os la podéis perder, pero id preparados para encontraros con algo que no os gustará ver pero que, desgraciadamente, se seguirá dando.
Hva vil folk si, o What people will say (qué dirá la gente), es un nombre mucho más adecuado para una película noruega dirigida por Iram Haq, la directora que nos cuenta su propia historia, algo que nos pondrá los pelos de punta cuando la veamos. Porque EL VIAJE DE NISHA es tan cruda que te acaba indignando progresivamente conforme avanza el metraje. Nisha (Maria Mozdah) es una chica de 16 años que vive con su familia en Noruega. De puertas hacia adentro es la hija perfecta para sus padres pakistanís, pero en sociedad está completamente occidentalizada. Un día, sin embargo, su padre (Adil Hussain) la pilla en su habitación con un chico. Ahí comenzará un viaje que la llevará a Pakistán con la familia de su padre y que será una verdadera tortura.
EL VIAJE DE NISHA es una película imprescindible para educadores. El choque multicultural que se produce en la película es impactante. Indigna darse cuenta el atraso y sometimiento que existe en otros países hacia la mujer y el mercadeo que se produce. Es una película que revuelve las entrañas y que nos sacude con fuerza. Hay bastantes escenas que harán que el espectador apriete los puños con rabia y frustración, que cabecee una y otra vez, negando que algo así pueda suceder todavía. Pues sucede y sucedió, porque cuando te enteras de que es una autobiografía de la propia directora la cosa no mejora.
Iram Haq utiliza la película como denuncia para algo que todavía existe. Los padres envían a sus hijas europeizadas a Pakistán y allí son sometidas a una cultura involucionada. La propia directora afirma que la película está "suavizada", pero podemos hacernos una idea de lo que sucede. El machismo lacerante de una sociedad que no entiende de libertades choca con la europeización, desencadenando guetos y nula integración por parte del inmigrante, en este caso pakistaní. en EL VIAJE DE NISHA asistimos a multitud de choques culturales y, de paso, nos ayuda a darnos cuenta de cuánto hemos avanzado, y lo que queda.
En definitiva, EL VIAJE DE NISHA es una película imprescindible para educadores y para adolescentes. Saber lo que nos aporta nuestra educación, el rol de la mujer en distintas culturas y el sometimiento que sufre gracias a la religión y a la inseguridad del hombre. No os la podéis perder, pero id preparados para encontraros con algo que no os gustará ver pero que, desgraciadamente, se seguirá dando.
August 27, 2018
Crítica: ALPHA
Una historia que ya conocemos, pero visualmente potente. Una aventura de supervivencia de hace 20.000 años donde el espectador aprenderá alguna cosa sobre su propio pasado mientras acontecen hechos, como mínimo, inverosímiles. Esta semana hemos visto. ALPHA.
Albert Hughes dirige un film frío de principio a fin, donde el espectador no acaba de empatizar nunca con el protagonista (Kodi Smit-McPhee). Este va de caza por primera vez junto a su padre, jefe de la tribu, y recorrerá medio mundo para ir a buscar bisontes. Pasan cerca de mamuts y cientos de animales, pero se ve que por aquel entonces ya eran de morro fino. Algunas cosa que suceden en ALPHA, como la relación del chaval con el lobo, y demás, son pura fantasía, pero en ningún momento se hace larga y es vistosa.
Precisamente el mayor acierto de ALPHA son sus planos, preciosistas, con imágenes que buscan la épica y el impacto. A veces lo consigue, pero muchas otras se quedan en una frialdad amparada tras efectos especiales evidentes. Ni siquiera que el protagonista se quede solo, y le den por muerto, hace que el espectador sienta un ápice de empatía por él. Quizás algo más por el lobo salvaje que adopta y al que doma en cuestión de días, como si hubiera nacido para ello.
En definitiva, ALPHA es una película en ocasiones educativa, ayuda a comprender ciertos hechos sociales de la época tribal y algo de supervivencia, por el fuego y demás, pero nada que no hayamos visto en otros filmes. Lo mejor, sin duda, la potencia visual y los planos naturistas, aunque rezuma frialdad en su conjunto por el abuso de CGI. En todo caso, una propuesta interesante que os hará pasar un buen rato. Echadle un vistazo.
Albert Hughes dirige un film frío de principio a fin, donde el espectador no acaba de empatizar nunca con el protagonista (Kodi Smit-McPhee). Este va de caza por primera vez junto a su padre, jefe de la tribu, y recorrerá medio mundo para ir a buscar bisontes. Pasan cerca de mamuts y cientos de animales, pero se ve que por aquel entonces ya eran de morro fino. Algunas cosa que suceden en ALPHA, como la relación del chaval con el lobo, y demás, son pura fantasía, pero en ningún momento se hace larga y es vistosa.
Precisamente el mayor acierto de ALPHA son sus planos, preciosistas, con imágenes que buscan la épica y el impacto. A veces lo consigue, pero muchas otras se quedan en una frialdad amparada tras efectos especiales evidentes. Ni siquiera que el protagonista se quede solo, y le den por muerto, hace que el espectador sienta un ápice de empatía por él. Quizás algo más por el lobo salvaje que adopta y al que doma en cuestión de días, como si hubiera nacido para ello.
En definitiva, ALPHA es una película en ocasiones educativa, ayuda a comprender ciertos hechos sociales de la época tribal y algo de supervivencia, por el fuego y demás, pero nada que no hayamos visto en otros filmes. Lo mejor, sin duda, la potencia visual y los planos naturistas, aunque rezuma frialdad en su conjunto por el abuso de CGI. En todo caso, una propuesta interesante que os hará pasar un buen rato. Echadle un vistazo.
August 22, 2018
Crítica: EL PACTO
Que Belén Rueda es la imagen visible del terror psicológico español es algo ya que no se nos escapa. Vuelve, sin embargo, con algo elegante, y aunque no es del todo original sí que nos atrapa en su atmósfera. Esta semana hemos visto: EL PACTO.
David Victori, bien tras las cámaras, se encarga de realizar una película solvente. Una niña entra en coma y su situación no mejorará, según los médicos. Su madre (Belén Rueda) pacta con un desconocido, sin nada que perder, para salvar a su hija. Ante todo pronóstico, su hija se salva y ella, a cambio, deberá pagar un alto precio: otra vida a cambio. ¿Quién no salvaría la vida de una persona querida a cambio de otra cualquiera?, pensaréis. Muchos, sí, pero hay estar moralmente preparado para hacerlo.
EL PACTO es una idea interesante que logra captar la atención del espectador con una atmósfera interesante y ciertos toques de terror psicológico. Está alejada, sin embargo, del terror más convencional y es casi más un thriller de tensión que cualquier otra cosa. El caso es que Belén Rueda está solvente en un papel que ha hecho mil veces. Acompañada por Mireia Orio y Darío Grandinetti, forman una familia que tendrá que luchar contra la vida y lo sobrenatural. Sin embargo, David Victori no nos muestra la parte demoníaca del asunto, sino la sinrazón de la esperanza cuando todo está perdido.
En definitiva, EL PACTO es un pasatiempo interesante para amantes de lo paranormal y de las buenas ideas. Nos habla de lo moral, de los límites éticos y de los efectos colaterales de nuestras decisiones. Elegante y sobria, bien dirigida y con un reparto decente. Echadle un vistazo.
David Victori, bien tras las cámaras, se encarga de realizar una película solvente. Una niña entra en coma y su situación no mejorará, según los médicos. Su madre (Belén Rueda) pacta con un desconocido, sin nada que perder, para salvar a su hija. Ante todo pronóstico, su hija se salva y ella, a cambio, deberá pagar un alto precio: otra vida a cambio. ¿Quién no salvaría la vida de una persona querida a cambio de otra cualquiera?, pensaréis. Muchos, sí, pero hay estar moralmente preparado para hacerlo.
EL PACTO es una idea interesante que logra captar la atención del espectador con una atmósfera interesante y ciertos toques de terror psicológico. Está alejada, sin embargo, del terror más convencional y es casi más un thriller de tensión que cualquier otra cosa. El caso es que Belén Rueda está solvente en un papel que ha hecho mil veces. Acompañada por Mireia Orio y Darío Grandinetti, forman una familia que tendrá que luchar contra la vida y lo sobrenatural. Sin embargo, David Victori no nos muestra la parte demoníaca del asunto, sino la sinrazón de la esperanza cuando todo está perdido.
En definitiva, EL PACTO es un pasatiempo interesante para amantes de lo paranormal y de las buenas ideas. Nos habla de lo moral, de los límites éticos y de los efectos colaterales de nuestras decisiones. Elegante y sobria, bien dirigida y con un reparto decente. Echadle un vistazo.
August 20, 2018
Crítica: THE EQUALIZER 2
Segundas partes nunca fueron buenas. En este caso, ni es buena y, siendo de acción, es soporífera. Así que podrá ser un éxito en taquilla, pero esta segunda entrega apenas tiene acción y lo que no es acción es profundamente anodino. Por lo tanto, es una película prescindible. Esta semana hemos visto: THE EQUALIZER 2.
Dirigida por Antoine Fuqua, con Denzel Washington, de nuevo a sus órdenes, la segunda entrega de la saga no es ni remotamente parecida a la primera. Si además tenemos en cuenta que la nueva de Misión Imposible la acompaña en cartelera, se queda en la miseria. Poca chica, disparos a bocajarro, lucimiento de un Denzel Washington en modo Dios y un guion tan de chiste que da la impresión de saberse un blockbuster, por lo que ni siquiera se han molestado en pensar. Las escenas de acción están bien rodadas, solo faltaría, pero son tan pocas que mientras llega a ellas, el espectador abre la boca, y no para comer palomitas, sino para bostezar solemnemente.
THE EQUALIZER 2 es un pastel influmable, conservadora de principio a fin, un tostón que no tiene por dónde cogerse y solo es sostenida por un Denzel Washington omnipotente al que, por otra parte, no nos podemos creer demasiado ya. El hombre tiene ya una edad, pero es poco menos que Dios. En la primera, al menos, el hombre era inteligente y se servía de lo que encontraba a su paso, una especie de McGyver, para enfrentarse a los demás. Ahora es más bien una especie de militar imbatible, y trabaja encima en UBER, que nunca corre peligro, más bien sigue una senda moral cuestionable aderezada por un guion vergonzante.
En definitiva, y sin querer extenderme más, THE EQUALIZER 2 es prescindible de principio a fin. Ni siquiera que Denzel Washington esté presente salva el conjunto. Una linealidad y poca originalidad que asusta para una película de acción. Y eso de acción es un decir, puesto que es soporífera y sus combates son más bien escasos. Antoine Fuqua ha pensado en hacer dinero fácil, y lo conseguirá, lo que no sé es si la tercera parte, si se hace, tendrá la misma popularidad visto lo visto. Ni se os ocurra verla.
Dirigida por Antoine Fuqua, con Denzel Washington, de nuevo a sus órdenes, la segunda entrega de la saga no es ni remotamente parecida a la primera. Si además tenemos en cuenta que la nueva de Misión Imposible la acompaña en cartelera, se queda en la miseria. Poca chica, disparos a bocajarro, lucimiento de un Denzel Washington en modo Dios y un guion tan de chiste que da la impresión de saberse un blockbuster, por lo que ni siquiera se han molestado en pensar. Las escenas de acción están bien rodadas, solo faltaría, pero son tan pocas que mientras llega a ellas, el espectador abre la boca, y no para comer palomitas, sino para bostezar solemnemente.
THE EQUALIZER 2 es un pastel influmable, conservadora de principio a fin, un tostón que no tiene por dónde cogerse y solo es sostenida por un Denzel Washington omnipotente al que, por otra parte, no nos podemos creer demasiado ya. El hombre tiene ya una edad, pero es poco menos que Dios. En la primera, al menos, el hombre era inteligente y se servía de lo que encontraba a su paso, una especie de McGyver, para enfrentarse a los demás. Ahora es más bien una especie de militar imbatible, y trabaja encima en UBER, que nunca corre peligro, más bien sigue una senda moral cuestionable aderezada por un guion vergonzante.
En definitiva, y sin querer extenderme más, THE EQUALIZER 2 es prescindible de principio a fin. Ni siquiera que Denzel Washington esté presente salva el conjunto. Una linealidad y poca originalidad que asusta para una película de acción. Y eso de acción es un decir, puesto que es soporífera y sus combates son más bien escasos. Antoine Fuqua ha pensado en hacer dinero fácil, y lo conseguirá, lo que no sé es si la tercera parte, si se hace, tendrá la misma popularidad visto lo visto. Ni se os ocurra verla.
August 16, 2018
Crítica: EL REHÉN
Años 70, en Beirut, todo va bien hasta que un trágico accidente hará que un diplomático estadounidense abandone El Líbano para, diez años después, volver en plena guerra para salvar a un antiguo compañero. Un thriller profundo, bien dirigido, sobrio y muy real. Un homenaje a cómo se hacían las cosas antaño. Esta semana hemos visto: EL REHÉN.
En realidad el filme se llama Beirut, que es mucho más importante que el rehén, tal y como se le ha nombrado en España. Todo gira entorno a la multiculturalidad libanesa, donde se afincan palestinos, israelíes y un sinfín de pensamientos y creencias que hicieron estallar una guerra que parece no tener fin. En la época de los 70 todo era calma tensa hasta que comienzan los primeros enfrentamientos. Skiles (Jon Hamm) daba una fiesta en su casa y ve cómo todo se viene abajo, marcando su vida y haciéndole volver a su patria. Alcohólico y desaprovechado, pasará diez años hasta que vuelva a viajar a Beirut, esta vez reclamado por los EEUU.
A su amigo lo han secuestrado, y la información que maneja es tan importante y devastadora para EEUU si llega a malas manos que necesitan de un buen negociador. Skiles vagará por las calles de Beirut junto a una agente de la CIA (Rosamund Pike), para intentar salvar a su amigo y cubrirse de aquellos que parecen estar junto a él. Es una película a la antigua usanza; sobria, realista, intrigante e inteligente que atrapará al espectador y se dejará llevar por la ruina y la devastación en que se ha convertido Beirut. Brad Anderson dirige EL REHÉN con buen pulso, y Jon Hamm aporta a su personaje de una humanidad y resquebrajamiento muy realista. El guion no tiene fisuras y el desarrollo es hipnótico.
En definitiva, EL REHÉN es una buena película de intriga. Un thriller que gustará a los que piensan que a las películas actuales les falta algo de antaño. Se toma su tiempo, construye un buen protagonista y los giros de guion se producen sin fisuras. Es creíble, real y con dosis políticas e intereses de por medio que darán que pensar. No es mal plan, en absoluto. No os la perdáis.
En realidad el filme se llama Beirut, que es mucho más importante que el rehén, tal y como se le ha nombrado en España. Todo gira entorno a la multiculturalidad libanesa, donde se afincan palestinos, israelíes y un sinfín de pensamientos y creencias que hicieron estallar una guerra que parece no tener fin. En la época de los 70 todo era calma tensa hasta que comienzan los primeros enfrentamientos. Skiles (Jon Hamm) daba una fiesta en su casa y ve cómo todo se viene abajo, marcando su vida y haciéndole volver a su patria. Alcohólico y desaprovechado, pasará diez años hasta que vuelva a viajar a Beirut, esta vez reclamado por los EEUU.
A su amigo lo han secuestrado, y la información que maneja es tan importante y devastadora para EEUU si llega a malas manos que necesitan de un buen negociador. Skiles vagará por las calles de Beirut junto a una agente de la CIA (Rosamund Pike), para intentar salvar a su amigo y cubrirse de aquellos que parecen estar junto a él. Es una película a la antigua usanza; sobria, realista, intrigante e inteligente que atrapará al espectador y se dejará llevar por la ruina y la devastación en que se ha convertido Beirut. Brad Anderson dirige EL REHÉN con buen pulso, y Jon Hamm aporta a su personaje de una humanidad y resquebrajamiento muy realista. El guion no tiene fisuras y el desarrollo es hipnótico.
En definitiva, EL REHÉN es una buena película de intriga. Un thriller que gustará a los que piensan que a las películas actuales les falta algo de antaño. Se toma su tiempo, construye un buen protagonista y los giros de guion se producen sin fisuras. Es creíble, real y con dosis políticas e intereses de por medio que darán que pensar. No es mal plan, en absoluto. No os la perdáis.
August 13, 2018
Crítica: DOS MUJERES
El pasado siempre vuelve. Esta película francesa narra, con buen pulso, el encuentro entre dos mujeres de carácter. La película de Martin Provost no habría sido lo mismo sin estas dos pedazo de artistas como son Catherine Frot y Catherine Deneuve. La contención y la rigidez contra la despreocupación y la anarquía. Esta semana hemos visto: DOS MUJERES.
Sage Femme, dirigida por Martin Provost, es la propuesta francesa que se centra en la vida de Claire (Catherine Frot), una comadrona que ve cómo la sección de maternidad en la que trabaja cerrará dentro de poco. Una experta en la materia y tan tradicional que no desea marcharse a un hospital mayor, con más recursos pero impersonal y poco cercano con uno de los momentos más importantes de la vida de unos padres. En esas está cuando aparece en su vida Béatrice (Catherine Deneuve), antigua amante de su padre, que aparece sola y desamparada, buscando su ayuda y volver a establecer relaciones.
DOS MUJERES nos explica cómo la mochila del pasado se carga y pesa sobre nuestras espaldas. Cómo las heridas abiertas nos persiguen y trauman. Es un filme humanista, que no cae en el melodrama, aunque la última parte de la película cae en cierto sentimentalismo. Sin embargo, la primera parte es reveladora, un duelo entre ambas Catherine, que son el alma del largometraje y, sin ellas, el conjunto se resentiría. Martin Provost hace algo auténtico, francés, visceral y humano, y ellas se encargan de llevarlo a cabo. Fuertes caracteres, con una Catherine Deneuve arrolladora y Catherine Frot rígida y templada hasta casi el final.
En definitiva, DOS MUJERES no es una película para todos los públicos, lógicamente. Es para aficionados de ese toque francés tan clásico, de un ritmo pausado y tintes humanistas y dramáticos que nos ayudan a profundizar sobre quiénes somos y cómo queremos ser. Ayuda a pensar y a reencontrarnos con nosotros mismos, así que si os va el género, os la recomiendo.
Sage Femme, dirigida por Martin Provost, es la propuesta francesa que se centra en la vida de Claire (Catherine Frot), una comadrona que ve cómo la sección de maternidad en la que trabaja cerrará dentro de poco. Una experta en la materia y tan tradicional que no desea marcharse a un hospital mayor, con más recursos pero impersonal y poco cercano con uno de los momentos más importantes de la vida de unos padres. En esas está cuando aparece en su vida Béatrice (Catherine Deneuve), antigua amante de su padre, que aparece sola y desamparada, buscando su ayuda y volver a establecer relaciones.
DOS MUJERES nos explica cómo la mochila del pasado se carga y pesa sobre nuestras espaldas. Cómo las heridas abiertas nos persiguen y trauman. Es un filme humanista, que no cae en el melodrama, aunque la última parte de la película cae en cierto sentimentalismo. Sin embargo, la primera parte es reveladora, un duelo entre ambas Catherine, que son el alma del largometraje y, sin ellas, el conjunto se resentiría. Martin Provost hace algo auténtico, francés, visceral y humano, y ellas se encargan de llevarlo a cabo. Fuertes caracteres, con una Catherine Deneuve arrolladora y Catherine Frot rígida y templada hasta casi el final.
En definitiva, DOS MUJERES no es una película para todos los públicos, lógicamente. Es para aficionados de ese toque francés tan clásico, de un ritmo pausado y tintes humanistas y dramáticos que nos ayudan a profundizar sobre quiénes somos y cómo queremos ser. Ayuda a pensar y a reencontrarnos con nosotros mismos, así que si os va el género, os la recomiendo.
August 10, 2018
Crítica: LOS INCREÍBLES 2
Pixar sabe hacer bien las cosas y sus películas son una delicia visual. Pero, además, cuentan historias interesantes, apasionantes, con acción, mucho que aprender y más que sonreír. Divertidas como pocas y con secuencias que a más de uno les sorprenderán, muy original. Llega una de las mejores propuesta de animación del año. Esta semana hemos visto: LOS INCREÍBLES 2.
The Incredibles 2, dirigida por Brad Bird, del estudio Disney-Pixar, cuenta con el gran apoyo de crítica y de público porque se lo ha ganado. Si la primera era buena, esta segunda entrega la mejora. Una de las mejores propuestas de animación, con permiso de Isla de Perros (que me ha robado el corazón). Los superhéroes están ilegalizados, no deben actuar, y la familia: Helen, Bob, Violet, Dash y el bebé Jack-Jack, deberán aprender a vivir con ello. Sin embargo, la llegada de un magnate fan de los superhéroes comenzará la carrera para la legalización de estos, convirtiendo a Helen en la punta de lanza. Esto provocará que Bob deba encargarse de las tareas de casa mientras su esposa trabaja. Con todo lo que eso significa para un hombre de acción como él.
LOS INCREÍBLES 2 supone un entretenimiento de principio a fin. Acción a raudales y mucha imaginación en combates que quitan el sentido de lo bien hechos que están. De la animación no vamos a hablar, pues Disney-Pixar son los mejores y la calidad es incuestionable. Pero no es una película que se centre en los pequeños, sino que también abarca a todo el mundo, uno de los grandes aciertos de la compañía. Es una película marcadamente feminista, con un protagonismo absoluto casi para Helen, aunque quien nos robará el corazón será Jack-Jack, que despertará sus poderes y traerá de cabeza a su familia. Él es, sin duda, el que más carcajadas despertará en los espectadores.
En definitiva, LOS INCREÍBLES 2 tiene buen gusto en todo lo que hace. El espectador juzgará si es mejor que la primera, aunque para mí lo es. Supone la consagración de un trabajo hecho con mimo, con un guion solvente, con secuencias de acción impactantes, con mucho que enseñar y un sentido del humor muy marcado que encantará al público. Es para niños y para los adultos, candidata a llevarse el Oscar y a una tercera entrega que se merece. Si las hacen todas así, bienvenidas sean.
The Incredibles 2, dirigida por Brad Bird, del estudio Disney-Pixar, cuenta con el gran apoyo de crítica y de público porque se lo ha ganado. Si la primera era buena, esta segunda entrega la mejora. Una de las mejores propuestas de animación, con permiso de Isla de Perros (que me ha robado el corazón). Los superhéroes están ilegalizados, no deben actuar, y la familia: Helen, Bob, Violet, Dash y el bebé Jack-Jack, deberán aprender a vivir con ello. Sin embargo, la llegada de un magnate fan de los superhéroes comenzará la carrera para la legalización de estos, convirtiendo a Helen en la punta de lanza. Esto provocará que Bob deba encargarse de las tareas de casa mientras su esposa trabaja. Con todo lo que eso significa para un hombre de acción como él.
LOS INCREÍBLES 2 supone un entretenimiento de principio a fin. Acción a raudales y mucha imaginación en combates que quitan el sentido de lo bien hechos que están. De la animación no vamos a hablar, pues Disney-Pixar son los mejores y la calidad es incuestionable. Pero no es una película que se centre en los pequeños, sino que también abarca a todo el mundo, uno de los grandes aciertos de la compañía. Es una película marcadamente feminista, con un protagonismo absoluto casi para Helen, aunque quien nos robará el corazón será Jack-Jack, que despertará sus poderes y traerá de cabeza a su familia. Él es, sin duda, el que más carcajadas despertará en los espectadores.
En definitiva, LOS INCREÍBLES 2 tiene buen gusto en todo lo que hace. El espectador juzgará si es mejor que la primera, aunque para mí lo es. Supone la consagración de un trabajo hecho con mimo, con un guion solvente, con secuencias de acción impactantes, con mucho que enseñar y un sentido del humor muy marcado que encantará al público. Es para niños y para los adultos, candidata a llevarse el Oscar y a una tercera entrega que se merece. Si las hacen todas así, bienvenidas sean.
August 8, 2018
Crítica: HOTEL TRANSILVANIA 3: UNAS VACACIONES MONSTRUOSAS
Llega el verano y las propuestas de animación para los más pequeños de la casa llenan la cartelera de nuestros cines para ofrecernos algo de diversión y un rato entre familia. La tercera entrega de estos monstruos, a la que le pesa tanta secuela y que no es santo de mi devoción, se traslada a un barco para tomarse unas vacaciones. Esta semana hemos visto: HOTEL TRANSILVANIA 3: UNAS VACACIONES MONSTRUOSAS.
Demasiado largo el título para la película dirigida por Genndy Tartakovsky, con viejos conocidos y donde Drac se ve obligado a tomarse unas vacaciones familiares en un gran ferry lleno de diversión. Se va con toda la pandilla y durante el viaje se sucederán aventuras submarinas que harán las delicias de los más pequeños. Con un sentido del humor muy de estar por casa, y con escaso impacto para los más grandes, la película podría ser la más floja de las tres. No es una saga tan interesante como otras, ni tan siquiera sus personajes están a la altura del carisma de otros protagonistas, pero ahí está, que ya es mucho.
Tiene guiños interesantes, alguna broma o situación divertida, baile, música, acción... En fin, todo lo que un niño necesita para pasárselo genial y echar un buen rato en el cine comiendo palomitas. Sin embargo, para los padres y demás acompañantes es una película infantil sin más. La animación durante estos años ha aumentado el nivel significativamente, pero HOTEL TRANSILVANIA 3 es un simple entretenimiento que no pretende ir más allá. Amistad, amor y familia. Para qué más.
En definitiva, HOTEL TRANSILVANIA 3: UNAS VACACIONES MONSTRUOSAS será borrada de la mente de cualquier niño, no digamos ya adulto, a los dos días de verla. Es simpática, divertida a rato y tiene acción, pero le falta carisma y punch. Una tercera entrega muy light, cargada de buenrollismo y con una animación que tampoco sorprende. Eso sí, los peques se lo pasarán bien. Algo es algo.
Demasiado largo el título para la película dirigida por Genndy Tartakovsky, con viejos conocidos y donde Drac se ve obligado a tomarse unas vacaciones familiares en un gran ferry lleno de diversión. Se va con toda la pandilla y durante el viaje se sucederán aventuras submarinas que harán las delicias de los más pequeños. Con un sentido del humor muy de estar por casa, y con escaso impacto para los más grandes, la película podría ser la más floja de las tres. No es una saga tan interesante como otras, ni tan siquiera sus personajes están a la altura del carisma de otros protagonistas, pero ahí está, que ya es mucho.
Tiene guiños interesantes, alguna broma o situación divertida, baile, música, acción... En fin, todo lo que un niño necesita para pasárselo genial y echar un buen rato en el cine comiendo palomitas. Sin embargo, para los padres y demás acompañantes es una película infantil sin más. La animación durante estos años ha aumentado el nivel significativamente, pero HOTEL TRANSILVANIA 3 es un simple entretenimiento que no pretende ir más allá. Amistad, amor y familia. Para qué más.
En definitiva, HOTEL TRANSILVANIA 3: UNAS VACACIONES MONSTRUOSAS será borrada de la mente de cualquier niño, no digamos ya adulto, a los dos días de verla. Es simpática, divertida a rato y tiene acción, pero le falta carisma y punch. Una tercera entrega muy light, cargada de buenrollismo y con una animación que tampoco sorprende. Eso sí, los peques se lo pasarán bien. Algo es algo.
