Félix A. Bas's Blog, page 107

March 6, 2017

Crítica: EL VIAJANTE

Hoy os traigo la ganadora del Oscar a mejor película de habla no inglesa. Es de Irán y cuenta la historia de un par de actores de teatro cuya obra da nombre al film. Una mudanza provoca una situación terrible que ella prefiere pasar de largo y él no quiere olvidar. Venganza en un contexto social complicado. Esta semana hemos visto: EL VIAJANTE. The Salesman es un film de Asghar Farhadi, que con este ya cuenta con dos Oscars en su haber. Además, hay que aplaudir su negación a asistir a la gala, pues las políticas de inmigración de Donald Trump pusieron todas la dificultades y el director prefirió quedarse en casa, aún a pesar de que al final podía entrar. Un filme situado en un contexto sociopolítico difícil ya de entrada, pues los protagonistas Emad (Shahab Hosseini) y Rana (Taraneh Alidoosti) han de mudarse porque su edificio se cae debido a unas obras.
Consiguen la ayuda de un compañero de teatro, pero este no les avisa de la vida alegre de su anterior inquilina, lo que provoca a posteriori una situación dramática que cambiará la vida de la pareja. EL VIAJANTE es una película en la que Farhadi, el mejor cineasta iraní, nos muestra un drama de pareja en el que la venganza y la humillación están muy presentes. La mujer humillada y su pareja poseído por la venganza, ambos situados en obras de teatro paralelas después del suceso. La vida del matrimonio no vuelve a ser la misma y asistimos a la destrucción de un hombre templado que se deja vencer por la ira y la venganza. Una pareja unida embarcada en una mudanza obligada que causará un cisma en sus vidasEL VIAJANTE es una historia emocionante, centrada en las pequeñas cosas de la vida, sin maniqueísmos y con interpretaciones sólidas que han conseguido varios premios europeos. Su principal competidora, que ha arrasado en Europa y que era principal candidata al Oscar, no era otra que la magnífica Toni Erdmann, la alemana, sin embargo, no ha sido entendida por los académicos estadounidenses y personalmente creo que hubiera sido justa vencedora. Aún así, The salesman es una propuesta sólida que nos enseña los valores de la sociedad de Teherán, su moral y ética.
Ashgar Farhadi nos ayuda a pensar sobre qué habríamos hecho en su lugar si tal acto nos sucediera a nosotros o a nuestra pareja. Parece fácil, pero el contexto sociocultural del lugar en el que ocurre es determinante. El miedo, la humillación y el conflicto en la pareja despierta y arrasa con todo; una película que no te hace sentir bien, tiñe de oscuridad el corazón del protagonista y tiene un desenlace muy bien llevado. Es una película que te atrapa desde el primer momento, tensa y emocionante. Cuando la oscuridad se apodera de un corazón roto y la humillación al prójimo no calma la iraEn definitiva, EL VIAJANTE es la mejor película de habla no inglesa para Hollywood. Merecida, desde luego, con una dirección perfecta y sutil de Farhadi y unas interpretaciones brillantes de ambos protagonistas. Una oportunidad para ver una de las películas europeas del año, aunque, como siempre con estos peliculones, solo unos pocos se atreverán a disfrutar. No os la perdáis.
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Published on March 06, 2017 12:45

March 2, 2017

Crítica: T2: TRAINSPOTTING

21 años después, Danny Boyle se pone tras las cámaras junto a Ewan McGregor y compañía para seguir criticando la sociedad de hoy día. No es tan impactante ni transgresora, pero mantiene cierta esencia de la película de culto. Mark Renton, Begbie, Spud y Sick Boy, nuestros heroinómanos favoritos, están de vuelta. Elige vida. Esta semana hemos visto: T2 TRAINSPOTTING.  Mark Renton vuelve a Edimburgo tras nada menos que veinte años en Holanda. Danny Boyle, su director, era plenamente consciente de la dificultad de superar a la primera entrega. Nadie lo cree, de hecho, pero no por ello ha hecho una mala segunda parte, sino todo lo contrario. Ha respetado a sus personajes y sus motivaciones, que no era otra que estar enganchados a las drogas y a conseguir dinero de la forma más caótica posible. Y desde luego que no podemos decir que sea un mala película, sino todo lo contrario. Mediante flashbacks y los típicos movimientos de cámara de la primera entrega, la película nos adentra en una secuela que deja un buen sabor de boca. La novia de Sick Boy, una bella búlgara, tendrá mucho que decir en esta películaT2 TRAINSPOTTING nos devuelve a Renton a Edimburgo, después de una matrimonio fallido, necesita dinero, y qué mejor que reencontrarse con sus amigos Sick Boy y Spud. El primero con una novia búlgara, él es su novio, su chulo y también cocainómano; Spud, por su parte, todavía no se ha desenganchado, pero ha descubierto una pasión que hace que pueda seguir adelante: las letras. Begbie, por su parte, está en la cárcel, pero no tardará demasiado en fugarse y reencontrarse con su panda. Recordemos que Renton los abandonó hace 20 años con el dinero de un golpe, miles de libras de las que todavía se acuerdan. Y Begbie todavía sueña con ajustar cuentas con él.
Los protagonistas pierden punch, ya no son aquellos jóvenes que nos impactaron hace dos décadas. Su vida ya no es tan interesante, tan solo un reflejo de un pasado infernal bañado por las drogas y los problemas. El guión no es brillante, pero desde el inicio te engancha, y desde luego la inmejorable dirección de Danny Boyle nos transporta al Trainspotting original. No mejora la primera parte, pero es una apuesta interesante como secuela, porque crea vínculos y el espectador no tarda en sentirse interesado por la nueva vida de sus protagonistas. Quizás el más interesante sea Spud, quien mantiene el estilo de vida del pasado, pero es el más humano de todos. Ewen Bremmer es Spud, un heroinómano que intenta sacar cabeza gracias a la letrasLo que sí conserva T2 TRAINSPOTTING es la manera en que Danny Boyle sabe manejar los giros de cámara, los flashbacks, los planos cenitales etc. El británico sabe cuándo ha de dar el protagonismo a sus personajes y cuándo ha de acelerar y potenciar el ritmo para que el espectador sienta que la esencia de la primera película está impregnada en esta de principio a fin. Y mucho de esto se debe, como no podía ser de otra manera, a sus protagonistas. Ewan McGregor está bastante más comedido que hace veinte años, los golpes de la vida le han convertido en un conformista, aunque cuando conozca a sus amigos volverá a las andadas. Robert Carlyle es Begbie, y sigue tan desenfrenado como antes y nos brinda algunas de las mejores escenas, igual que Ewen Bremmer, sin duda el más humanizado y un puntazo de hombre. Jonny Lee Miller es quien pone en marcha los negocios y hace que el caos vuelva a ser el modo de vida de todos ellos.
La frase con la que comenzaba Trainspotting, "elige vida", vuelve con fuerza, se actualiza y critica a la sociedad de hoy en día. "Publica en redes sociales y espera que a alguien le importe". T2 TRAINSPOTTING no solo nos muestra el mundo tal y como es, sino también hacia dónde nos llevan nuestras decisiones del pasado. Los fantasmas vuelven, la sociedad evoluciona pero no cambia, se modifican las adicciones pero seguimos enganchados. Las redes sociales son la nueva droga, una nueva forma de seguir todos en la misma dirección potenciar el sentido crítico. Danny Boyle nos enseña cómo es este nuevo mundo y cómo se adaptan a él unos personajes que todavía viven en las gestas del pasado. Begbie sigue siendo un ciclón y no hay nadie que pueda detenerlo. Grande, Robert CarlyleEn definitiva, T2: TRAINSPOTTING es una digna secuela que hará que a los nostálgicos les valga la pena ir a verla. Conserva la inocencia, unos personajes carismáticos y la posibilidad de volver a verlos metidos en problemas. Danny Boyle es un maestro tras las cámaras y no se supera a sí mismo, pero el intento es más que plausible. Buena crítica a la sociedad de hoy. Elegid vida.
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Published on March 02, 2017 12:43

February 28, 2017

Crítica: FENCES

La vida no era fácil para las familias afroamericanas en los años 50. Una película que narra el sinsabor de un sueño truncado que ahora amenaza con romper una familia. Denzel Washington dirige y protagoniza un filme por el que ha optado al Oscar como mejor actor protagonista, con una Viola Davis que se lo ha llevado como mejor actriz secundaria. Con 4 nominaciones al Oscar, esta semana hemos visto: FENCES.

Fences significa vallas, un cerco sobre una casa con jardín en la que transcurre casi la totalidad de un metraje de más de dos horas de duración en la que vemos cómo sobrevive una familia afroamericana. Troy Maxon (Denzel Washington) es un hombre recto que trabaja recogiendo basura y lucha por los derechos de los de su raza. Podría haber sido jugador de béisbol profesional, pero el sistema no estaba preparado para aceptar a negros en la gran liga y su sueño se truncó. Su hijo quiere seguir el camino del deporte, como él en su tiempo, pero no le va a ser fácil pasar por encima de su padre.
FENCES es una película en la que Denzel Washington y Viola Davis se lucen, además de dichas nominaciones como mejor actor y mejor actriz secundaria, también se lleva su tercera nominación a mejor película y la cuarta a guión adaptado. Quizás sea exgerada meterla en la candidatura a mejor película, pero hay que aceptar la manía de los académicos de incluir tantas películas para márketing. Es una película teatral, puesto que ambos protagonistas la han interpretado cientos de veces en Broadway, de ahí sus brillantes actuaciones y complicidad que se muestran. Los momentos felices se notan, pero los amargos rezuman con intensidad.
Esa valla resume la vida de Troy y de su familia, un cerco de grandes responsabilidadesLo más interesante de FENCES, por lo tanto, son sus potentes soliloquios, sobre todo los de Denzel Washington, haciendo que entendamos su personaje a la perfección. Si algo aporta tanta teatralidad, es que las interpretaciones son potentes y con garra, de ahí que ambos hayan conseguido sendas nominaciones al Oscar. Del protagonista extraemos lo amargo de la vida, las frustraciones de la vida, el desarraigo y, en definitiva, un hombre amargado por no haber podido llegar hasta lo más alto en su carrera deportiva. Por extensión, tiene un hijo que toca en un grupo y al que nunca ha ido a ver, y también otro con gran potencial para destacar en el fútbol americano. Tampoco este último conseguirá apoyo alguno por parte de su padre, empecinado en que se centre en los estudios y en el trabajo.
Rose, interpretada por una brillante Viola Davis, es el contrapunto de Troy. Es una mujer fuerte, una esposa servil y administradora del dinero que gana su marido. Sin embargo, no sabe que este, a pesar de tomarse la familia con gran reponsabilidad, provocará una traición que traerá el cisma en el seno de la familia. Ella es pura pasión y desgarro, la ganadora del Oscar a mejor actriz de reparto. En cuanto a la película en sí, cuesta creer que haya sido nominada a a mejor película, puesto que es más una obra de teatro que un largometraje al uso. Este año la academia de cine está compensando con algunas nominaciones más que discutibles a películas en las que han intervenido afroamericanos. En todo caso, merecidas han sido las nominaciones de Washington y Davis. Pese a que esta última es más actriz protagonista que no secundaria. Han sido inteligentes, puesto que se ha llevado el Oscar a casa.
Denzel Washington y Viola Davis están de Oscar. Existe gran compenetración entre ambosEn definitiva, FENCES no es una película amable, pero sí una gran obra de teatro llevada al cine con una potente interpretación por parte de Denzel Washington y Viola Davis. Narra la vida y frustraciones de un hombre responsable y recto que busca la libertad espiritual y vivir más allá de esa valla que limita su existencia. Con 4 nominaciones a los Oscar, se convierte en una de las mejores opciones en cartelera.
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Published on February 28, 2017 12:39

February 26, 2017

Gala Oscars 2017

Llevamos unos años sin clara dominadora para los académico, algo que ha vuelto a suceder y que ha perjudicado claramente a La La Land, que con 6 premios es la más oscarizada pero no la vencedora, puesto que Moonlight le ha arrebatado los premios a mejor guión original y a mejor película en uno de los momentos históricos de la noche. Se equivocan de sobre, leen el de mejor actriz y se lía, pues el equipo del musical sube al escenario para agradecer y ver cómo dos segundos después resulta que el Oscar es para la película de Barry Jenkins. Esto en Hollywood ya es imperdonable, pero demuestran que son humanos.

Llegaba la hora esperada, la 89ª Gala de los Oscar ya estaba aquí, y lo ha hecho pegando a Donald Trump, como era de esperar, pero no tan fuerte como imaginábamos. Hollywood no se ha centrado en él en un acto elegante y de buen gusto, puesto que el dar más publicidad al presidente habría sido incluso positivo para este. El previo a los premios, como siempre, ha sido interesante, todo un despliegue de medios para ver cómo los nominados paseaban y posaban por la alfombra roja, donde hemos podido disfrutar o sufrir de los conjuntos de unos y de otras. Como siempre, los hombres clásicos y los focos se los han llevado ellas al lucir unos vestidos impresionantes. Los focos fueron a parar a nominadas y presentadoras. Emma Stone y Nicole Kidman sinónimos de buen gusto La La Land , con 14 nominaciones, era la rival a batir, la que estaba llamada a hacer historia y claramente por encima del resto en todas las quinielas. Esa condición le ha venido mal, demasiado, puesto que finalmente se ha llevado la nada desdeñable cifra de seis estatuillas, confirmando que los académicos prefieren repartirlas antes de centrarse solo en una. Fue una sorpresa no tan inesperada paro los que ya hemos vivido la gala en estos últimos años. Después del esperpéntico final, Moonlight se corona como vencedora en al llevarse 3 Oscars: mejor película, mejor guión adaptado y Mahershala Ali como actor secundario. En cuanto al resto de premios, más o menos eran precedibles. Mahershala Ali y Viola Davis como mejor actor y actriz secundarios y Casey Affleck y Emma Stone a mejor actor y actriz de reparto. Ninguna novedad y merecidísimos todos. Impagable maestro de ceremoniaEntrando ya en materia, la gala ha comenzado con la actuación de Justin Timberlake con una de las canciones nominadas, "Can't stop the feeling". Después de levantar todos los allí presentes, ha dado comienzo la ceremonia, con Jimmy Kimmel en su primer año como presentador. Ha hecho hincapié en la división del país y en su memorable pique con Matt Damon, en las sobrevaloradas actuaciones de Meryl Streep (público en pie aplaudiéndole y puya para su presidente). Ha sido una gala discreta y elegante, ágil, muy entretenida y con muchas sorpresas, algunas incluso no estaban preparadas. Sin duda, Jimmy Kimmel ha sido un acierto y seguramente le veamos más de ahora en adelante en estos eventos. Y todo eso pese al final de traca histórica que hemos vivido.

El primer premio de la noche lo entrega Alicia Vikander, son los nominados a mejor actor de reparto, cuyos favoritos son Mahershala Ali y Jeff Bridges. Y el Oscar es para, Mahershala Ali por Moonlight . Entraba en todas las quinielas y no sorprende, desde luego. Un papel corto pero brillante como traficante con sentido del deber. Emocionado agradecimiento a sus profesores y compañeros de reparto y que anuncia que ha sido padre hace tan solo cuatro días. Merecido sin duda el galardón.
Un papel pequeño pero de gran importancia en la que se ha convertido en la película de los OscarEl siguiente premio es el de mejor maquillaje y peluquería, que se lleva El Escuadrón Suicida , un blockbuster mediocre, pero con un gran trabajo en ese aspecto. En cuanto al galardón a mejor vestuario, el premio va a parar a Colleen Atwood por Animales fantásticos y dónde encontrarlos .Jimmy Kimmel presenta a una de las nominadas a mejor película: Figuras ocultas y de paso ofrece a sus tres actrices la posibilidad de presentar las candidaturas a mejor documental. Katherine Johnson, una de las heroínas de la NASA se lleva una de las grandes ovaciones de la noche. Los nominados llegan con potentes trabajos, tratando la mayoría de ellos el racismo con gran potencia. Y el vencedor es O.J Made in America de Ezra Edelman, 7 horas y 47 minutos de documental, casi nada. Tras esto, Dwayne Johnson entra en escena tan mazado como siempre y cantando su parte de canción en Vaiana, dando paso a la canción nominada "How far I'll go". Una puesta en escena algo discutible y segunda canción de la noche.
Entra en escena la directora de la Academia, hablando de la comunidad global que es Hollywood, el arte no tiene fronteras y ese poder las trasciende, una conexión irrompible y permanente. Un discurso breve y efectivo. Tras esto, Jimmy Kimmel hace que lluevan dulces sobre el Dolby Theatre para que los nominados coman algo mientras se presentan los premiados a mejor edición de sonido, galardón que se lleva Sylvain Bellemare por La llegada , sorprendente pero no por ello menos merecido. La canditatura a mejor mezcla de sonido se presenta inmediatamente después, siendo Hasta el último hombre la vencedora. Tras 21 nominaciones, Kevin O' Connell por fin se alza con el galardón.

Algo sobreactuada pero emocionadaVince Vaughn nos presenta otra película nominada en la cual trabaja, Hasta el último hombre y a la noche de los Governors, donde se galardonó a Jackie Chan, entre otros, por su valiosa aportación a la industria. Y llega otro de los premios de la noche, la candidatura a mejor actriz de reparto. Mark Rylance nos presenta a las candidatas, Viola Davis y Michelle Williams parten como favoritas con permiso de Octavia Spencer. And the Oscar goes to Viola Davis, como estaba previsto, por Fences. Un papel que podría haber optado a protagonista y no es tan secundario como el resto. Visiblemente emocionada, agradece al fallecido guionista el premio y, por supuesto, a Denzel Washington y a su familia. Una obra de teatro, Fences, que ha interpretado cientos de veces, por cierto.
Charlize Theron y Shirley Maclaine nos presentan los nominados a mejor película extranjera que gana El viajante por delante de Toni Erdmann, que para mí era principal candidata aunque demasiado compleja para el gusto de los académicos. Segundo Oscar para el director iraní, cuya su ausencia se debe a la falta de respeto a la hora de haberles dejado entrar a EEUU. Dev Patel nos presenta después a Sting cantando la tercera canción nominada: The empty chairs, de la película Jim: The James Foley story.

Gael García Bernal nos presenta las candidatas a mejor corto de animación que gana Piper, el corto que se presenta antes de Vaiana y que es una delicia visual de Pixar, por cierto. De inmediato se presentan las candidaturas a mejor película de animación, no sin antes darle el palo a Trump por sus muros. La favorita es Zootrópolis de Disney, que se alza vencedora por delante de Kubo, mi favorita. Dakota Johnson sube al escenario para presentar el premio a mejor diseño de producción, que supone el primer Oscar para La La Land . David Wasco y su mujer suben a recoger la estatuilla. Tras esto, Jimmy Kimmel hace pasar a un grupo de turistas estupefactos que hacían un tour por ahí y que no dudan en pasar de los blancos y asistir a una improvisada boda con Denzel Washington de sacerdote improvisado. Un puntazo para ellos, uno de los gags más brillantes, desde luego.
Hacéis un Tour y aparecéis en directo en la Gala. No es para menos la cara que se os queda al ver a Ryan GoslingFelicity Jones sube al escenario para presentar las candidatas a mejores efectos especiales, que se lleva El libro de la selva contra todo pronóstico, al menos para mí. Después, Michael J. Fox se baja del DeLorean ante la ovación de los presentes, en otro momentazo de la noche, y nos presenta a los nominados a mejor montaje. El vencedor es Hasta el último hombre , que consigue su segundo galardón de la noceh. John Gilbert recoge la estatuilla y agradece a Mel Gibson su confianza.

Salma Hayek presenta los nominados a mejor corto documental, que gana The white helmets (Los cascos blancos), un grupo de personas que salvan vidas y se juegan la suya tras los bombardeos para rescartarles. Y llega el momento español de la gala, Juanjo Giménez se va a jugar el Oscar en la candidatura a mejor cortometraje de ficción, pero no hay suerte y el vencedor es Sing (Canta), una sorpresa que no entraba en las quinielas. Después aparece Jimmy Kimmel enviándole tuits a Donald Trump, que hace horas que no tuitea, algo muy extraño en él.

Javier Bardem y la grandísima Meryl Streep aparecen en el escenario para presentar los nominados a mejor fotografía, segundo Oscar de la noche para La La Land , Linus Sandgren sube a recogerlo y da las gracias a Damien Chazelle, Emma Stone, Ryan Gosling y a todo el equipo de la película. Tras esto, un apartado de tuits contra los actores que ellos mismos leen, otro momentazo. Hay que destacar la agilidad de la gala. Salen a escena Ryan Gosling y Emma Stone para presentar las canciones nominadas de La La Land, compuestas por Justin Hurwitz y cantadas por John Legend. Magnífica puesta en escena, intimista "City of stars" que se mezcla con "Audition" de manera magistral y muy original. Bien por John Legend, aunque no guste a todo el mundo.
Magnífica puesta en escena. John Legend es muy particular cantando, así que nos quedamos algo fríosSamuel L. Jackson y su voz entran a escena para presentar los nominados a mejor banda sonora. Como no podía ser de otra manera, se lo lleva Justin Hurwitz por La La Land . Agradece a su amigo Damien Chazelle y reconoce el esfuerzo de sus competidores. Scarlet Johansson presenta después las nominadas a mejor canción, que como tampoco podía ser de otra manera, es para la bella e inolvidable City of Stars. Segundo Oscar para Justing Hurwitz, y ya van cuatro para La La Land . Una Jennifer Aniston explosiva nos trae un elegante "In memoriam", un reconocimiento al trabajo de todos aquellos que han participado en la historia del cine y nos han abandonado este año, como Carrie Fisher y Bill Paxton.

Entramos en los premios gordos, los de guión. Jimmy Kimmel cachondeándose de nuevo de Matt Damon, hay que reconocer la complicidad de ambos, desde luego. Ben Affleck y Mat Damon presentan los nominados a mejor guión original, que se lleva Kenneth Lonergan por Manchester frente al Mar , una sorpresa merecida, sin duda. Discurso de agradecimiento para sus protagonistas, Casey Affleck y Michelle Williams y emocionado recuerdo a su padre. Amy Adams, olvidada este año incomprensiblemente para los académicos, nos presenta las candidaturas a mejor guión adaptado, estatuilla que gana Barry Jenkins por Moonlight , premio merecido que entraba en las apuestas.
Bravo por Damien Chazelle mejor director con 31 años y una carrera prodigiosa por delanteHalle Berry anuncia los candidatos a mejor director, y el vencedor es Damien Chazelle, el niño prodigio de Hollywood, por la inolvidable La La Land que ya lleva cinco estatuillas. Agradece a sus colegas nominados, a Justin Hurtwitz y a su amor, por supuesto. Era la apuesta segura, un director que con 31 años y en su tercera película logra el Oscar con total merecimiento. Galardón que posiciona a la comedia musical como principal candidata a mejor película, aunque aún quedan nominaciones potentes.

Y es que es el turno de los pesos pesados, las candidaturas a mejor actor son presentadas por la bellísima Brie Larson. ¿Se cumplirán las apuestas o habrá sorpresa? And the Oscar goes to ¡Casey Affleck! Se cumplen, desde luego, merecidísimo premio por su interpretación en Manchester frente al mar . Emocionado hasta el límite, agradece el trabajo de los nominados, a Kenneth Lonergan y a Matt Damon por crearle la oportunidad de interpretra. Un premio que le lleva a lo más alto de su carrera y que justo despega. Bravo por él.
"Te quiero, Ben". Palabras de Casey Affleck hacia su hermano. Merecidísimo Oscar.El gran Leonardo DiCaprio entra en escena para presentarnos las nominadas a mejor actriz. Las apuestas son claras, pero veremos si hay sorpresa finalmente. And the Oscar goes to ¡Emma Stone! Por supuesto, inolvidable Mia en La La Land . Una estrella más que consagrada pese a su juventud, futuro de Hollywood y con un talento inagotable. Emotivo discurso hacia sus compañeras y en especial a Ryan Gosling, protagonista junto a ella. La estatuilla no hará más que empujar todavía más su carrera. Bravo por la magnífica Emma Stone y sexta para la película de Damien Chazelle.
No menos merecido es el papel de una de las mejores actrices del momento. Impresionante Emma StoneY para cerrar una gala bastante ágil y entretenida, final de la 89ª ceremonia de los Oscar, Warren Beauty entra en escena para presentar el último premio y cagarla a base de bien. Antes se pide respeto para la diversidad y vemos las nueve nominadas a mejor película. And the Oscar goes to... ¡LA LA LAND! Eso según Warren Beatty, claro, porque sube todo el elenco, Emma Stone y Ryan Gosling incluidos, el productor agradece el premio y habla de continuar luchando por los sueños, pero... ¡¡¡Esperpento!!! En realidad ha ganado MOONLIGHT , un error brutal, accidente atroz que nos deja con cara de idiotas y hace que todo el equipo de la película de La La Land se baje para que suba el vencedor. Barry Jenkins no tiene palabras y los que hemos vista la gala en directo comprobamos que incluso en Hollywood se puede meter la pata.
El productor de La La Land dando el discurso y Warren Beatty enseñando el galardón hacia MoonlightWarren Beatty explica lo del sobre, pues le habían dado el de mejor actriz y por supuesto era para Emma Stone por La La Land. Sin embargo, deja un mal sabor de boca y el equipo de Moonlight ha de abrazar al de La La Land por el gran golpe. La gran favorita no solo ha sido destronada, sino que ha asistido a un error garrafal que todavía hace que el golpe sea más duro todavía. Jimmy Kimmel al final se echa la culpa a sí mismo y se despide con cierta elegancia y buen humor. Y esto es lo que ha dado de sí la 89ª gala de los Oscar.
Los vencedores a mejor actor y actriz protagonista y de reparto, lo más felices de la nocheEn definitiva, una gala interesante, con una traca final de infarto pero que, de nuevo, pone de manifiesto el cambio de tendencia en los premios Oscar. Una dirección que apuesta por repartir más las estatuillas y en la que difícilmente veamos una nominadora clara. Aún a pesar de que La La Land ha ganado más Oscars que nadie, no se ha llevado mejor película ni mejor guión original, por lo que le deja un sabor agridulce. Aparte de los oscarizados por sus interpretaciones, el más contento de la noche ha de ser Barry Jenkins por Moonlight, que finalmente ha dado la sorpresa.
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Published on February 26, 2017 21:19

February 24, 2017

Crítica: LO QUE DE VERDAD IMPORTA

El director español Paco Arango nos trae una comedia amable, estilo cuento de Disney, de esas que rebosan azúcar por todos lados y que está siendo una sorpresa en taquilla. Como reza su cartel, es 100% positiva y también benéfica, así que si queréis entreteneros es una buena opción. Justita pero funcional. Esta semana hemos visto: LO QUE DE VERDAD IMPORTA.

Hay que destacar la función de solidaridad que ejerce y el mensaje que transmite, pero por otro lado está la calidad de la película, que es más que cuestionable. Su objetivo es recaudar el máximo dinero posible en taquilla para su destino benéfico, y al final, aunque la película en sí no sea nada del otro mundo, hay que entender que quizás no sea un peliculón, que haya demasiado dulce en él, demasiado positivismo, pero ganas y esfuerzo sí que transmite. Alex (Oliver Jackson-Cohen) vive en Inglaterra y su negocio de arreglo de cacharros electrónicos no va precisamente viento en popa. Además, pierde dinero en el juego y los rusos le persiguen. Su vida es difícil hasta que aparece un tío al que no conocía y le plantea irse a vivir a Nueva Escocia (Canadá) durante un año, a cambio él le pagará todas su deudas.
Dos protagonistas guapos y que se esfuerzan, qué mas se le puede pedirLo que no sabe es que sus antepasados poseían poderes de curación que solo se activan en su pueblo, por lo que comenzará a experimentar y a vivir cosas que escaparán a su comprensión. Sin comerlo ni beberlo, se convierte en el Elegido para las personas de su pueblo. En fin, como podéis ver se entremezclan magia, comedia y, lo que es peor, el moralismo y la religión. LO QUE DE VERDAD IMPORTA es más bien una película estilo Disney, de las que echan a la hora de la siesta, muy amable y aleccionadora, lo que no sentará bien a gran parte del público. Lo único salvable es que es benéfica y al ir a verla estamos haciendo un bien. Pero desde luego no está a la altura del resto de películas, y menos en tiempos de Oscars.
LO QUE DE VERDAD IMPORTA va bien hasta que se mete en terrenos celestiales, con la religión de por medio, y acaba convirtiéndose en un panfleto que ni las juventudes cristianas. Algo que rechina y nos hace sentir sermoneados a poco que se tenga cierto espírituo crítico. El que vaya al cine a ver una película amable y cien por cien azucarada aquí tiene su opción. Los protagonistas cumplen con su papel y de paso disfrutamos con la belleza de Camilla Luddington y del protagonista Oliver Jackson-Cohen. Le ponen ganas, algo que es imposible no hacer sabiendo el buen destino de la recaudación en taquilla.
La película es muy positiva, y la niña tiene gran desparpajo y sentido del humorEn definitiva, LO QUE DE VERDAD IMPORTA es una película prescindible, de sobremesa para echarse una siesta y demasiado moralista. Si no fuera benéfica no habría pasado ni por cartelera, pero al menos sabemos que pagando la entrada hacemos un gran bien, aunque podemos contribuir igualmente a nuestra manera mediante donaciones a dichas entidades. En vuestras manos queda.
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Published on February 24, 2017 12:41

February 22, 2017

Crítica: EL NACIMIENTO DE UNA NACIÓN

Nate Turner dirige y protagoniza una película histórica, basada en hechos reales, sobre una revuelta de esclavos en Virginia. Envuelta en la polémica, se ha visto excluida de una carrera a los Oscar en la que entraba en todas las quinielas. Su dureza es quizás excesiva, pero nada más lejos de la realidad. Esta semana hemos visto: EL NACIMIENTO DE UNA NACIÓN.

Nat Turner (Nate Parker) es un esclavo predicador al que su amo (Armie Hammer) se ve obligado a utilizar como tal para intentar levantar a su familia, que tras la muerte de su padre atraviesa una grave crisis económica. EL NACIMIENTO DE UNA NACIÓN narra la lucha de estos esclavos, guiados por un predicador que abre los ojos ante los excesos de los blancos contra los suyos. De aquí surge una revuelta que les llevará a que maten a más de 50 terratenientes. Se sofocó en 48 horas, pero sin duda hicieron daño, pero no solo a los blancos, sino a ellos mismos y a su lucha, puesto que tras esa revuelta las leyes se recrudecieron y miles de negros fueron ajusticiados. A quien hierro mata...
El predicador debía ir de granja en granja para que los esclavos obedecieran a sus amosNate Parker protagoniza y dirige un filme que nos recordará inevitablemente a 12 años de esclavitud y a la más actual Los hombres libres de Jones. Quizás no es tan profunda, pues muestra a blancos corruptos, amorales y, en definitiva, la recreación de la maldad personificada. Ninguno se salva, o a duras penas, lo que hace que la película manipule en cierta manera los sentimientos del espectador. Algo que no sucede tan enérgicamente con las otras dos películas comentadas y que va en contra de EL NACIMIENTO DE UNA NACIÓN. Nate Parker insiste en mostrar la violencia extrema con la que trataban a los esclavos de la época, recordándonos a Raíces y demás películas del género, por lo que no innova en nada.
EL NACIMIENTO DE UNA NACIÓN muestra a un personaje bien interpretado por Nate Parker, aunque su evolución resta credibilidad, pues pasar de un predicador al líder de unos esclavos asesinos es algo que se produce con demasiada rapidez. El espectador asiste a un gran espectáculo, siempre y cuando sepa que lo que va a ver será algo dificilmente digestivo por la dureza de sus imágenes. Bien rodada y con grandes interpretaciones, fuerza visual y, como ya he mencionado, demasiado explícita. Era una película que sonaba para todo en los Oscar, pero a raíz de la sombra de la sospecha sobre un caso de violación ha acabado saliendo de todos los premios, aunque se alzó vencedora en el prestigioso festival Sundance.
48 horas de revuelta, 50 terratenientes muertos y una gran losa para los suyos. ¿Mereció la pena?En definitiva, EL NACIMIENTO DE UNA NACIÓN es una película que narra las atrocidades cometidas a los esclavos negros. Una película historica basada en hechos reales que nunca está de más ver para comprobar hasta dónde es capaz de llegar el ser humano para someter al otro. Sin embargo, no llega a ser lo que se esperaba de ella al intentar manipular los sentimientos del espectador con la crudeza de sus imágenes. Aún así, es una gran película.
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Published on February 22, 2017 13:38

February 20, 2017

Crítica: JACKIE

El 11 de noviembre de 1963 es un fecha histórica, pues asesinaron a John F. Kennedy, el presidente de Estados Unidos. Pablo Larraín nos enseña cómo fueron los días posteriores de Jacqueline Kennedy, que pasó de ser la sumisa mujer del presidente a enfrentrarse a la nueva administración del gobierno. Una película para fans de los biopics y de Natalie Portman, pues está de Oscar. Con 3 nominaciones a los Oscar, esta semana hemos visto: JACKIE.

Jacqueline Kennedy, mujer de JFK, uno de los presidentes más populares de EEUU pese a su corto mandato, apenas dos años y pocos meses, pero protagonista de uno de los incidentes más tristes y recordados. En Dallas, Texas, JFK fue asesinado, junto a él, en ese coche viajaba su mujer, cuya vida cambiaría radicalmente. De inmediato, en el mismo Air Force One y con el cuerpo del presidente presente, Lyndon Johnson toma el poder: El rey ha muerto, viva el rey. La película de Pablo Larraín nos narra con gran sensibilidad y buen gusto los días posteriores a ese suceso, monstrándonos la gran evolución de un personaje con el que Natalie Portman se luce, pues se mimetiza con ella.
Natalie Portman está sublime y dará guerra a Emma Stone en la carrera hacia el OscarJackie Kennedy, la mujer del presidente, tenía fama de fría, derrochadora y sumisa. Por todos es sabido que JFK apenas pasaba las noches con ella, pero siempre volvía a casa junto a sus hijos. En unos primeros momentos del filme, que se van intercalando entre el asesinato y los meses anteriores, se nos presenta a Jacqueline como lo que era: una buena anfitriona que presenta por televisión a todo el pueblo estadounidense la Casa Blanca, su hogar mientras su marido es presidente. Natalie Portman la interpreta tal y como era, una mujer que trataba de caer bien, sumisa, dirigida por unos y otros, y sobreprotegida por Bobby Kennedy (Peter Sarsgaard). Una mujer que vivió un acontecimiento terrible en primera persona y con la que compartimos momentos y conversaciones de gran interés, como con el sacerdote o el periodista al que le narra sus más profundos pensamientos.
Pablo Larraín nos muestra a una Jacqueline Kennedy devastada y ninguneada por la administración Johnson, que antes siquiera de enterrar a JFK se establecían en la Casa Blanca e intentaban cerrar el asunto sin mayor dilación. Ahí es cuando la interpretación de Natalie Portman la transforma en Jackie, la mujer del trigésimo quinto presidente de los EEUU, exigiendo un cortejo fúnebre y no un entierro por la puerta de atrás. JACKIE es un alarde de buen gusto en tanto en cuanto nos muestra vídeos del pasado que no sabemos si son reales o del momento, dejando claro las molestias que se han tomado en que la recreación de cada uno de los momentos fuera real. De ahí la merecida nominación a mejor diseño de vestuario.
El parecido físico de JFK, Bobby y Jackie es increíble. Por todos era conocido su buen gusto por las fiestasJACKIE nos muestra también la entereza de una primera dama que asiste al asesinato de su marido, que sujeta la cabeza del presidente mientras los sesos están esparcidos por el coche, que sufre al nombramiento en el Air Force One de Lyndon B. Johnson como nuevo presidente de los EEUU mientras ella todavía viste con la sangre de su marido. Una Natalie Portman que hace que nos olvidemos de ella y que solo pensemos en Jacqueline Kennedy. La actriz borda todos y cada uno de los estados por los que Jackie pasa, hace que empaticemos con ella y es merecidísimo, como no podía ser de otra manera, su reconocimiento al Oscar como mejor actriz. Como también lo es la tercera nominación a mejor banda sonora. En cualquier caso, JACKIE se contentará con esas nominaciones, pues llevarse el gato al agua va a serle difícil al compartir candidaturas con La La Land.
El chileno Pablo Larraín nos trae un biopic más que solvente, necesario para conocer la vida de una de las personalidad más importantes de EEUU, sobre la que ya se han escrito ríos de tinta. La familia Kennedy, marcada por las desgracias, son un filón televisivo, pero en esta película la protagonista principal es Jacqueline Kennedy, con quien compartimos sufrimiento y dolor, un gran trabajo introspectivo y unos primeros planos que quitan el hipo. Un trabajo magnífico el de Natalie Portman, quien se convierte en su gestualidad, sus pasos, su voz susurrante, en una mujer fuerte y profesional que cumplió con su deber de esposa e hizo que el funeral de su marido fuera un acontecimiento digno de verse, aún con la oposición de la nueva administración.
Un acontecimiento de EEUU nunca olvidará. Un asesinato horrible y una primera dama devastadaEn definitiva, los amantes de los biopics y de Natalie Portman están de enhorabuena. Un trabajo potente, narrado con brillantez que nos muestra un momento histórico en la historia estadounidense y a una de las figuras más importantes del momento. Una mujer mimetizada en Natalie Portman, nominada al Oscar, una esposa que luchó para que reconocieran el trabajo de su marido y a la que toda una nación siempre recordará. No os la perdáis.
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Published on February 20, 2017 12:51

February 15, 2017

Crítica: MOONLIGHT

Nos llega una de las películas más interesantes del año por la visión social estadounidense de la homosexualidad en la raza negra. Seremos testigos del crecimiento de un niño y de cómo la acumulación de experiencias en la mochila que llevamos siempre encima acaba por forjar nuestra personalidad en la etapa adulta. Una de las películas que compite en la carrera por los Oscar con 8 nominaciones y que no os podéis perder. Esta semana hemos visto: MOONLIGHT.

Chiron es un niño que vive en una de los barrios más peligroso de Miami. No tiene padre y su madre (Naomi Harris) es adicta al crack, por lo que desde bien pequeño ha de aprender a valerse por sí mismo en un entorno hostil, lleno de bullying, de persecuciones y violencia por doquier. En esa primera parte de la película podemos ver a un Chiron (Alex R. Hibbert) cerrado en sí mismo, generando rechazo al resto por el hecho de ser diferente. A todo eso hay que agregarle el agravante de ser homosexual, un tabú en el momento para los de su raza. En una segunda fase, Chiron (Ahston Sanders) ve cómo su problema de acoso escolar sigue creciendo, ofreciendo al espectador escenas duras pero sin regodeo; también tendrá su primer encuentro sexual y un clímax que acabará por definir lo que será en la etapa adulta.
Mahershala Ali, nominado por su gran interpretación, mostrando la dualidad moral de un narcotraficanteUn adulto (Trevante Rhodes) que nos muestra la progresión vital de ese Chiron que en las tres etapas levanta un escudo para protegerse a su manera de todo lo que tiene a su alrededor. Una etapa adulta marcada por una infancia y por un nombre, Juan (Mahershala Ali), quien "adopta" a Chiron y le enseña a sobrevivir, una figura de referencia que el joven toma por bandera y que le hace mutar hasta su etapa adulta. MOONLIGHT no es una película para grandes masas, pero sí para aquellos que acuden al cine para ver joyas que permiten reflexionar sin necesidad de grandes artificios, pues la mano de Barry Jenkins enseña sin juzgar, con gran sutilidad, lo que le ha servido al filme para estar nominada entre las mejores para la carrera hacia el Oscar.
Ocho candidaturas, igualando a La llegada, entre ellas a mejor película, mejor director (Barry Jenkins), mejor guión adaptado, mejor fotografía, mejor montaje y mejor banda sonora. Las otras dos recaen en Mahershala Ali, esa figura de referencia que se gana por derecho propio la nominación a mejor actor de reparto por un papel de narcotraficante con sentido del deber, su intervención es corta pero definitiva en la vida de Chiron. Como también es interesante la nominación de Naomi Harris como mejor actriz de reparto, la madre drogadicta a la que vemos en las tres fases de la vida del protagonista, también con una evolución interesante y una interpretación cargada de fuerza. Veremos si MOONLIGHT es capaz de dar batalla y sorprender a La La Land, la gran favorita, o a dramas como Manchester frente al Mar, Hasta el último hombre o Lion.
La dura vida de un adolescente que sufre bullying por el hecho de ser diferente. DemoledorMOONLIGHT nos lleva a recordar a la más que interesante Boyhood, película que Richard Linklater grabó en 11 años, con la misma progresión de la etapa infantil a la adulta. En esta ocasión, la película de Barry Jenkins tiene más pegada y mayores consecuencias sociales que pueden acabar sorprendiendo en la Gala de los Oscar, como ya pasó con Spotlight el año pasado. Chiron es un protagonista vulnerable en un entorno durísimo, algo que se nos muestra en muchas ocasiones ya desde buen principio, aunque el director no cae en la trampa de querer buscar el impacto emocional del espectador, sino que mediante la sutilidad cuenta más cosas de las que muestra, de ahí que MOONLIGHT sea una de las mejores películas que podáis ver.
Tres fases a las que el espectador no les cuesta hilar, por mucho tiempo que pase entre una y otra. Es brillante la manera en la que los tres actores interpretan a un Chiron de pocas palabras cuya mirada habla por sí misma. La escena del reencuentro con su amigo es para enmarcar, profunda y llena de sentimientos encontrados. Personalmente creo que es el drama del año, por algo por delante de Manchester frente al Mar y por supuesto de Lion. ¿Si Spotlight pudo el año pasado, por qué no va a poder Moonlight?. En todo caso, MOONLIGHT es una gran película que sabrá disfrutar todo el mundo. Algunos dirán que es lenta, cosa que no es cierta (es falta de costumbre de no ver buen cine); es un paseo por la vida, una historia de amor y una realidad social que Barry Jenkins plasma con maestría en la que es su segunda película.
La etapa adulta, el reencuentro y una de las escenas más potentes y emocionalmente interesantes de la películaEn definitiva, MOONLIGHT se erige como una de las mejores películas del año con 8 nominaciones en los Oscar. Puede dar la sorpresa y se convierte por derecho propio en aspirante claro a cualquier premio, incluso al más grande en los Oscar. Un drama social, racial, humano y sin grandes artificios, siendo este quizás su mayor acierto. Si además le sumamos las grandes interpretaciones de los tres actores que dan vida a Chiron y los nominados Mahershala Ali y Naomi Harris, se convierte en un filme necesario e imperdible. No os la perdáis si os gusta el buen cine.
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Published on February 15, 2017 12:56

February 13, 2017

Crítica: RESIDENT EVIL: EL CAPÍTULO FINAL

No tengo idea, ni tampoco ganas, de saber cuántas entregas ha habido de la saga dirigida por Paul W. S. Anderson y protagonizada por Milla Jovovich. Algunos dicen que es la mejor, quizás lo digan porque ni siquiera se acuerden de haber visto las anteriores, lo que habla bastante mal de la saga. En todo caso, es la mayor basura que podéis encontrar en el cine ahora mismo. Absteneos sobre todo si no os van los videojuegos ni nada os une a esto. Esta semana hemos visto: RESIDENT EVIL: EL CAPÍTULO FINAL.

Entre paréntesis y detrás de "El capítulo final" deberían versar algo así como: "de verdad, os juramos que es la última", por lo menos para que sepamos que por fin jamás va a volverse a hacer otra bazofia sobre una de las sagas de videojuegos más aclamadas. Que, por cierto, va de zombies y de acción con un buen guión, cosa que en las película ni siquiera se atisba. Simplemente se tira de Milla Jovovich y el resto es historia. En RESIDENT EVIL: EL CAPÍTULO FINAL, todo es malo menos el final, y no me refiero al de la película, que es una mierda también, sino del momento cuando por fin aparecen los créditos y podemos respirar tranquilos para luego salir corriendo de la sala de cine sin mirar atrás.
CGI's a punta de pala, aunque lo mejor son los zombies y aparecen más bien pocoYa desde buen principio vemos a una Milla Jovovich perdida combatiendo contra una bestia alada, que es tan amorfa y mal hecha como la película en sí. Y, por supuesto, ninguna criatura aparte de los zombies representa a la saga de videojuegos; para qué hacerle guiños a los tontos que van al cine a ver lo bien que lo hacemos. En fin. Después se encuentra con una moto BMW, se ve que el apocalipsis está patrocinado, y aparece el malo de turno que había salido en las otras y debía estar muerto. Y no es otro que Iain Glenn o Ser Jorah Mormont de Juego de Tronos. Un villano que acumula lo peor de todos los villanos, es súper malo y tiene una frases demoledoras, de esas que harían llorar hasta a Stallone. Del resto del reparto ni me acuerdo, solo sé que sale Claire Redfield, un guiño a la saga, y que los demás mueren. Y sabemos que lo harán porque la prota aquí es Milla Jovovich.
Protagonista que, al menos, nos ahorra el sufrimiento de tener que escucharla mucho, porque la película apenas tiene tres frases que no sean verborrea típica de tipa dura y película chorra. Pero Paul W. S. Anderson no solo es capaz de hacer una mierda de película y que Milla Jovovich se lo crea, sino que incluso se atreve a darle velocidad al metraje, a tratar de hacerlo trepidante al más puro estilo Mad Max: Fury Road. Y sí, como podéis imaginar, lo hace mal y todo se convierte en una acumulación de imágenes mareantes en las que apenas nos damos cuenta de lo que pasa. A decir verdad, los efectos especiales, sobre todo en las explosiones, son tan pésimos que es mejor que todo pase a la mayor velocidad posible.
La peña del moco dispuestas a acabar con todo lo que se le ponga por delante. Qué duros sonDel guión casi mejor ni hablar, aunque se tiran un buen rato explicando lo que ha pasado en las anteriores películas, por si nos interesa saberlo, aunque al final todo va de clones, de si salvo a la humanidad voy a morir, de si hay una cura para el virus zombie que está en la Colmena (sí, donde la primera película), etc. Lo que sí hay son muchas, muchísimas cuestiones que el espectador cuestionará y le llevará a preguntarse por qué demonios ha pagado para ver esto. En todo caso, hay lagunas insondables tanto en el guión como en las decisiones de los protagonistas. Es tan irrisorio que ya no sabes si estás en una película de acción o en una comedia irónica.
Agotamiento es la palabra adecuada para definir EL CAPÍTULO FINAL, una saga que ni siquiera la entrega de Milla Jovovich puede salvar. Una película que debería haber pasado a dvd, o a vhs para que nadie la viera, o quizás aún mejor haber sido enterrada en el desierto. En todo caso, de zombies se ven las hordas y el manido recursos de hacerlos más veloces que Usain Bolt. Además, teniendo una película de zombies como la increíble y sorprendente Train to Busan tan fresca en la memoria, es inevitable que Resident Evil quede en evidencia, aún siendo películas que apuestan por cosas diferentes.
Milla Jovovich todavía se lo cree, mientras que Claire Redfield es lo único fiel al videojuegoEn definitiva, RESIDENT EVIL: EL CAPÍTULO FINAL, es una película desechable, carne putrefacta, nunca mejor dicho, que debéis evitar a toda costa, incluso más que la nueva de las Sombras de Grey. Eso sí, si queréis pasar un rato incómodo viendo escenas mareantes y un sinsentido de guión y chascarrillos propios de película de serie B, estáis todos invitados. No digáis que no os he avisado.
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Published on February 13, 2017 12:53

February 9, 2017

Crítica: MANCHESTER FRENTE AL MAR

Con 6 nominaciones al Oscar y con Casey Affleck como principal favorito a mejor actor, nos llega una película desgarradora y trágica que narra la existencia de un padre atormentado y arrepentido por una pérdida insuperable. Principal competidora de La La Land en la carrera hacia los Oscar, el drama del año. Esta semana hemos visto: MANCHESTER FRENTE AL MAR.


Kenneth Lonergan, nominado a mejor director, nos enseña la trágica vida de Lee Chandler (Casey Affleck), una existencia de cuyo pasado el espectador descubre poco a poco, a fuego lento. El golpe sufrido fue tan desgarrador y trágico que no consigue levantar cabeza; imposible pasar página, imposible rehacer su vida, tener hobbies, pensar en positivo o cuidar de nadie. Su vida se basa en respirar y trabajar hasta el momento en que otra tragedia se ceba, esta vez con su hermano (Kyle Chandler), quien le deja como tutor de su sobrino (Lucas Hedges). MANCHESTER FRENTE AL MAR no trata del lucimiento de actores o director, sino que todo se enseña como si fuera la propia vida la que pasa frente a nuestros ojos, para que descubramos por nosotros mismos. Un ejercicio de sobriedad que no gustará a todo el público, aunque ni falta que hace.
Casey Affleck no tiene alma, está imponente y es el futuro ganador del Oscar a mejor actorMANCHESTER FRENTE AL MAR será una película lenta para el público menos acostumbrado, puesto que da tiempo para crear la empatía necesaria para entender la forma de llevar la vida de Lee mientras por medio de flashbacks entendemos su actitud. Entre medio de todo esto, se incluye un humor negro que impacta todavía más al conocer todo lo que hay detrás, pero sin embargo funciona a la perfección, pues ni se abusa ni está fuera de lugar. El film de Kenneth Lonergan está creado para crear una atmósfera deprimente, tal y como es la vida de Casey Affleck, un abismo a la nada sin la menor de las motivaciones, ni siquiera cuando se convierte en el tutor legal de su sobrino. La culpa es enorme, y todavía se acrecenta al volver donde todo ocurrió, al encontrarse con su ex-mujer Randi (Michelle Williams).
Dos escenas entre Michelle Williams y Casey Affleck totalmente demoledoras, suficiente para que ella opte a mejor actriz de reparto; dos conversaciones emocionalmente potentes que dejarán al espectador tocado, sobre todo si ha creado ese vínculo empático con el dolor y sufrimiento que arrastra Lee Chandler. En este caso, MANCHESTER FRENTE AL MAR no es una película en la que quepa el lucimiento personal, pero es inevitable por su profunda caga emocional. De manera que a la nominada Michelle Williams se le une el sobrino, Lucas Hedges, también con una merecidísima nominación a actor de reparto. Un adolescente actual con ganas de vivir frente a las adversidades que le suceden, un contraste brutal con el verdadero protagonista, el alma de la película, que no es otro que un Casey Affleck que, para qué vamos a engañarnos, va a ganar el Oscar a mejor actor, por mucho que Ryan Gosling y La La Land se interpongan en el camino.
Lucas Hedges, el contrapunto de su tío, merecida nominación a mejor actor de repartoCasey Affleck, es el hermano de Ben Affleck, y no solo se parecen físicamente, sino que comparten rasgos de inexpresividad, aunque en este caso es dolor contenido, sufrimiento y arrepentimiento puro. Todo lo negativo y deprimente que cualquier ser pueda arrastrar consigo es lo que Casey Affleck transmite en la gran pantalla. Dolor en estado puro, estado de insensibilidad permanente ante todo aquello que pueda aportarle placer. Apagado ante cualquier atisbo de socialización, de relacionarse con el sexo opuesto y, en general, sin atisbo de deseo por vivir, sin aliento para levantarse por las mañanas. Casey Affleck entra por la puerta grande, Globo de Oro en mano, dispuesto a derrotar a Ryan Gosling y Denzel Washington, sus principales competidores en la candidatura. Yo lo tengo muy claro.
MANCHESTER FRENTE AL MAR está nominada a seis candidaturas: Mejor película, director, guión original, actor (Casey Affleck), actriz de reparto (Michelle Williams), y actor de reparto (Lucas Hedges). Sin embargo, y esta es mi apuesta personal, solo Casey Affleck conseguirá alzarse con la preciada estatuilla. Si no lo consigue aquí, jamás podrá hacerlo, puesto que pocas veces se es capaz de transmitir tanto en una interpretación. Es una película sobresaliente, el mejor drama del año por delante de Lion, Figuras ocultas, etc., y el porqué es muy sencillo: no se regodea, no busca emocionar al espectador mediante fuegos artificiales. No lo necesita, MANCHESTER FRENTE AL MAR enseña lo que sucede sin necesidad de buscar nada. Emociona, impacta y sacude como pocas. Por eso es una de las mejores películas del momento.
Las escenas con Michelle Williams encogen el alma. Tiene pocos minutos, pero sabe aprovecharlosEn definitiva, MANCHESTER FRENTE AL MAR es una de las películas del año, una de las que los amantes del buen cine tienen marcadas en el calendario. Un guión demoledor con un reparto excelente y unas interpretaciones arrolladoras. Si creas empatía estás dentro, de lo contrario solo será una película lenta a la que no le habrás podido sacar todo el partido. El drama del año, no os lo perdáis.
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Published on February 09, 2017 12:43