Alejandro Soifer's Blog, page 16
March 25, 2015
Microcuentos: un arte breve y duradero
Nunca fui particularmente afecto a los cuentos. Ni a escribirlos ni a leerlos. Las razones son múltiples pero creo que se resumen en que me cuesta encontrar una idea para una narración y una vez que la tengo siento la necesidad de expandirla, desarrollarla, amasarla y dejar que crezca. Eso en cuanto a escribirlos. En cuanto a leer cuentos, la razón por la que no me seducen es que los olvido muy fácilmente: siempre me sucedió de estar leyendo un libro de cuentos, llegar al último y no recordar en absoluto de qué trataba o qué contaba el primer, el segundo, el tercer cuento de ese volumen.
Pero dentro de este rechazo que siento por los cuentos la excepción la constituyen los microcuentos: a veces una línea o dos, esos relatos ínfimos suelen poseer una fuerza narrativa tan grande que desencadenan una especie de Big Bang de sentidos. Además, son fáciles de recordar para contar en cualquier ocasión.
Ayer leía una interesante nota donde desmienten que un famoso microcuento atribuido a Ernest Hemingway haya sido escrito por el Premio Nobel (pueden leer la nota, en inglés, aquí). Y si bien parece que no perteneció al genio literario del buen Ernest, el relato no deja de ser sumamente impactante. Aquí va una traducción posible:
En venta: zapatos de bebé, nunca usados.
Es lógico que se haya atribuido esta oración de siete palabras (seis en inglés) a Hemingway: el mecanismo de mostrar sólo la punta de un iceberg narrativo que oculta un trozo enorme de historia no dicha detrás parece llevar su marca.
¿Qué emociona de esa oración? ¿por qué decimos que es un cuento?
Lógicamente lo que está no-dicho es la posibilidad de que esos zapatos de bebé los esté vendiendo una madre que acaba de perder a su recién nacido. El cuento funciona en nuestro cerebro: reconstruimos una situación trágica, un conflicto indecible en nuestra cabeza.
También podríamos pensar que se tratan de unos zapatos de bebé nunca usados, nuevos, recién salidos de la fábrica y que el que los vende es nada más que un vendedor de zapatos.
Sucede algo curioso: la primera tendencia que tenemos al leer el cuento es hacia la catástrofe, lo terrible, el conflicto.
Lo mismo sucede con otro clásico de los microcuentos, El dinosaurio de Augusto Monterroso:
Cuando despertó, el dinosaurio todavía estaba allí.
¿Por qué nuestra primera impresión es que el que despertó fue un ser humano? Esta impresión nos trae el conflicto porque sabemos que los dinosaurios y los humanos nunca convivimos.
Otro de mis preferidos está recopilado en la Antología de literatura fantástica de Adolfo Bioy Casares, Silvina Ocampo y Jorge Luis Borges; fue escrito por George Loring Frost y se llama Un creyente. Dice:
Al caer la tarde, dos desconocidos se encuentran en los oscuros corredores de una galería de cuadros. Con un ligero escalofrío, uno de ellos dijo:
-Este lugar es siniestro. ¿Usted cree en fantasmas?
-Yo no -respondió el otro-. ¿Y usted?
-Yo sí -dijo el primero, y desapareció.
Por supuesto la primera impresión que tenemos es que el que desaparece es un fantasma. ¿Por qué? ¿Por qué no razonar primero que acaso sea un ilusionista que aprovechó la oscuridad de la galería de cuadros para gastarle una broma al otro?
Claro que es una posibilidad y la podemos tomar, aceptar y desarrollar. En última instancia de eso se trata el género fantástico: del movimiento pendular que hace nuestra cabeza entre aceptar lo imposible de una explicación maravillosa y lo que esperamos que es una explicación realista.
De la misma antología, me recuerda una lectora, es este otro microcuento:
Sola y su alma de Thomas Bailey Aldrich
Una mujer está sentada sola en su casa. Sabe que no hay más en el mundo: todos los seres han muerto. Golpean a la puerta.
Desde luego, muchísimo más perturbador por obvias razones.
Este tipo de escritura haiku, microcuento, sentencia zen o como quieran decirles funcionan porque exprimen al máximo la función de ocultarnos información que es la esencia de un buen cuento. Como ejercicio literario son imprescindibles. Prueben ustedes mismos: describan su biografía en seis o siete palabras. Dominar el estilo es a la vez un desafío y una aventura.
Para despedirme quisiera recordar la primera de las tésis de Ricardo Piglia sobre el cuento.
Dice así:
1
En uno de sus cuadernos de notas, Chejov registró esta anécdota: “Un hombre, en Montecarlo, va al casino, gana un millón, vuelve a casa, se suicida”. La forma clásica del cuento está condensada en el núcleo de ese relato futuro y no escrito.
Contra lo previsible y convencional (jugar-perder-suicidarse), la intriga se plantea como una paradoja. La anécdota tiende a desvincular la historia del juego y la historia del suicidio. Esa escisión es clave para definir el carácter doble de la forma del cuento.
Primera tesis: un cuento siempre cuenta dos historias.
Casi mágico ¿no?

March 16, 2015
El triunfo de la literatura de género
Hace unos días (el 11 de marzo para ser precisos) la revista Esquire publicó un breve ensayo donde señala que la ficción de género le ganó la batalla a la “Literatura” escrita así, con mayúsculas.
Lejos de escandalizarse por la novedad la nota firmada por Stephen Marche, en la que releva una discusión entre Kazuo Ishiguro y Ursula K. LeGuin a raíz de unas declaraciones del primero (en una entrevista, respecto de su nueva novela: “¿Van a seguirme los lectores en esto? ¿Entenderán lo que estoy tratando de hacer o van a quedarse en el prejuicio contra los elementos de la superficie? ¿Van a decir “Esto es fantasy”?“), diagnostica con total tranquilidad lo que está sucediendo: la literatura de género ya no es una literatura menor.
Esto es para celebrarse. Claro que sí. Durante el largo siglo XX la irrupción de las vanguardias artísticas se interpuso en el proceso de autonomización de la literatura introduciendo una forma de entender el arte literario que, superada su instancia repulsiva, era el objeto ideal para que la Academia se lo apropiara y lo colocara en un lindo estante de Museo.
Y como sucede con todo lo que va a los museos: puede ser más o menos bonito pero lo cierto es que son pocos los que van a ir a verlo.
Inmóvil, inerte, inaccesible excepto para los expertos, la literatura había encontrado su nicho de arte elitista a la vez que perdía todo su propósito “revolucionario”.
Si lo pensamos un solo segundo esto es una de las mayores estupideces que le pudieron haber pasado a la literatura.
Desde el comienzo de la civilización los hombres y mujeres han necesitado relatos, narraciones, historias para construirse un sentido, para vivir, para ordenar el mundo, para construir héroes que representaran la esencia de su pueblo y también, claro está, para entretenerse.
Pero en determinado momento la función de entretenimiento de la literatura pasó a ser, para ciertos ojos, la peor de sus funciones y se creó un cerco alrededor de la palabra impresa.
¿Acaso la gente dejó de necesitar historias por este motivo? Claro que no. La televisión y el cine reemplazaron rápidamente a los que quisieron, voluntariamente, abandonar toda pretensión de hacer de su arte autónomo algo que la gente común y corriente quisiera leer.
Y los que no olvidaron esa función de entretenimiento de la literatura, sin embargo, siguieron vendiendo libros y en muchos casos lograron ser best-sellers.
Como señala Marche en su artículo, hoy en día: “Sólo los idiotas o los snobs realmente creen que los libros de género son un arte menor.”
La mejor literatura que se escribe hoy en día parte de elementos de género: ya sea policial, ciencia ficción, aventura, terror, romántica, no importa exactamente cual. Existen hoy en día novelas muy buenas con temática zombie (Feed de Mira Grant), para jóvenes (la saga de Los juegos del hambre de Suzanne Collins), de fantasy (obviamente la saga de Canción de fuego y hielo de George R.R. Martin pero también la Saga de los confines de Liliana Bodoc), policiales (las novelas de Gillian Flynn son excelentes novelas que hablan más acerca de la construcción del tejido social contemporáneo que de los crímenes que narra) y así podría seguir un buen rato.
Hay libros buenos y hay libros malos, como en todo, pero el género es la plataforma que está permitiendo algunas de las experiencias literarias más valiosas de nuestra época y al mismo tiempo hace respirar a una literatura que por lo demás, parece estancada entre el intento de la neo-vanguardia y el realismo sucio costumbrista y acabado que ya no le interesa a nadie.
Lo paradójico de esta situación es que ese realismo sucio que tuvo sus mayores exponentes en Carver o Cheever parece haberse vuelto en sí mismo un género: miles de novelas prácticamente idénticas cuyos autores se confunden entre sí porque no son capaces de escribir una novela que realmente se diferencie y destaque. El artículo de Marche dice que este género se trata siempre acerca de las miserias espirituales de graduados de universidades de la Ivy League (es decir, la elite de la elite blanca estadounidense). Acá podríamos pensar que el realismo sucio se volcó más hacia una un costumbrismo revulsivo de drogas, alcohol, noche y miseria material, acorde con el fina catastrófico de la década de los 90s, pero más allá de esa diferencia central, se trata siempre del mismo tipo de relato repetido hasta el cansancio.
El problema de este tipo de realismo genérico es que tiene unos márgenes muy estrechos: tiene correas de amarre todavía más fuertes que una novela policial o de terror o de cualquier otro género. Es mucho más estricto y asfixiante en sus reglas aunque de apariencia más simple de producir: basta con relatar con mínimo apego a las reglas gramaticales y ortográficas algún evento esencialmente vacío, extenderlo durante varias páginas hasta tener el diámetro de un libro, y salir a venderlo a editoriales chicas. La anécdota que se narre, la trama son lo de menos.
La ficción de género es casi todo lo contrario: lo que importa es la trama, el conflicto, la narración de hechos que emocionen al lector.
Tanto las vanguardias como el realismo sucio tienen en su esencia la búsqueda de la destrucción de todo el sistema literario: ridiculizar lo que consideramos literatura o hacerlo tan exclusivo y críptico que el mercado no lo pueda consumir y así destruirlo desde adentro. Algunos no son conscientes de esto y tan sólo escriben en ese registro porque les parecerá más sencillo o que se ajusta mejor a su falta de ideas y/o trabajo para escribir una trama.
La ficción de género parece entonces, ahora, nuevamente como la capacitada para llevar tanto grandes ideas en sus páginas como mero entretenimiento y darle así un poco de aire a un mercado literario saturado de mercaderías que parecen no despertar interés en su público consumidor: los lectores.
Celebro que por fin la ficción de género esté comenzando a recuperar un espacio central en el sistema literario, que se estén produciendo novelas policiales, de terror, eróticas, o lo que sea, con calidad literaria.
Como dicen en el fútbol: ganar, gustar y golear. Se puede hacer en literatura también.
Una literatura que le guste a los lectores y que a la vez permita una expresión artística elevada, que ponga su atención en construir tramas, es posible nuevamente.
Ya era hora.

March 9, 2015
Diario de un novelista 05: comienzo de año
“Marzo es el lunes de los meses” dice un chiste que leí hace poco. Es cierto: sabemos que es el comienzo de un año nuevo en el que habrá que trabajar duro. Y el trabajo trae recompensas. El comienzo del año a la vez representa desafíos, retos y perspectiva de ir viendo cómo ese esfuerzo termina capitalizándose.
Particularmente este es un buen comienzo de año: terminé de escribir Rituales de lágrimas (la segunda parte de la saga Rituales que comencé en Rituales de sangre) y estoy en tratativas para poder llevarla a los lectores este mismo año. A la vez está la perspectiva concreta de también poder publicar Sangre por la herida que es un spin-off, una historia complementaria, de la misma saga.
Esta es la parte linda. Pero al mismo tiempo, el otro día, cuando puse el punto final a la novela sentí que una parte importante de mí se cerraba. Los últimos ocho meses los pasé escribiendo esa novela y a eso hay que sumarle unos cuantos meses más de pensarla, escribir diagramas, bocetos de capítulos, tenerla presente en la cabeza todo el tiempo en todo momento.
Dicen que uno realmente está escribiendo una novela cuando no puede dejar de pensar en ella en todo momento, en todo lugar. En la ducha, en la cama antes de dormir, en sueños, en el trabajo diario, en todo momento los personajes viven y siguen su existencia como si fueran los protagonistas de Toy Story que tienen su propio movimiento cuando nadie los ve.
Me queda el desafío: empezar a escribir y terminar este año Rituales de muerte (título provisorio de la novela final de la saga Rituales).
Por el momento estuve pensando algunas ideas para la novela y además tengo el desenlace que escribí para Rituales de lágrimas que obviamente me condicionan en la dirección que tomará esta última novela de la saga.
Se me juntan varias sensaciones: por una parte la expectativa y el asomarse al abismo que representa siempre empezar una nueva novela desde cero. Por otra parte la excitación de poder volver una vez más a meterme en la vida de Sheila, Sebastián, Quiroz y los nuevos que aparecen en Rituales de lágrimas para terminar de contar su historia.
Por otra parte siento un cosquilleo en la cabeza que me dice que para poder empezar a escribir la finalización de la saga, antes debería probar escribiendo otra novela, con otros personajes y temas para poder volver así con energías renovadas al desenlace.
Tengo ya varias ideas dándome vueltas en la cabeza que siento serían excelentes novelas. Novelas que me gustaría leer. Pero todavía están en un estado demasiado embrionario como para poder verlas en el plano, o mejor dicho, en el papel, en la trama.
Veremos. El año recién empieza. Desafíos y recompensas por lo trabajado. De eso se trata.

March 5, 2015
Primer trailer para Dark Places de Gillian Flynn
Hoy salió el primer trailer para Dark Places, la adaptación de la novela del mismo nombre de Gillian Flynn (autora del best-seller Perdida).
La novela de Flynn es muy buena (en español se llamó La llamada del Kill Club) y cuenta la historia de Libby Day la sobreviviente de un brutal ataque con características rituales en su casa donde perdieron la vida su madre y dos de sus hermanas y del cual, el principal sospechoso es su hermano contra el que ella testificó y ayudó a condenar a cadena perpetua.
Varios años más tarde Libby se las rebusca para sobrevivir como puede en la Kansas rural donde transcurre la acción hasta que recibe la llamada de un club de fanáticos de los casos policiales resonantes que la quieren invitar a una de sus reuniones para conocerla y exponerles sus teorías acerca de la inocencia de su hermano.
El resto es la historia de cómo Libby vuelve a sumergirse en la oscuridad de su pasado y busca determinar si realmente fue o no su hermano el responsable de la masacre.
Como decía, la novela es muy buena y acorde al tono sombrío de la narrativa de Flynn. La película, por lo que se ve en el trailer, parece respetar a la perfección el argumento original (aunque habría que objetarle que Charlize Theron aparece hermosa mientras que la descripción que se nos hace en la novela de Libby es la de una mujer totalmente dejada).
Pueden disfrutar del video aquí, viene con subtítulos en francés porque la película es coproducida por un estudio de dicho origen.

March 3, 2015
Los mejores manuales de escritura
Estamos empezando el año y por lo tanto florecen en nuestras casillas de e-mail, muros de Facebook, timelines de Twitter avisos de talleres literarios y de lectura literaria. Esto representa una excelente oportunidad para todos aquellos que quieran tener una instancia de escritura y desarrollo creativo por fuera de las obligaciones cotidianas, en particular en un país como el nuestro que no considera la materia “escritura creativa” como algo razonable a nivel institucional. La oferta es amplia y hay un tipo de taller para cada persona: los que quieren terminar una novela, los que nunca escribieron una palabra sobre la hoja, los que quieren una experiencia literaria lúdica, los que quieren que una voz autorizada los guíe para poder crecer como escritores, y así. Por eso mismo es recomendable que cada uno se tome el tiempo de averiguar bien qué características tiene el taller al que se va a anotar para que pueda sacarle el mayor provecho dependiendo de sus gustos y búsquedas. Pero más allá de los innumerables talleres literarios que componen una oferta amplia y acorde a cada necesidad, existen también una innumerable fuente de sabiduría de enseñanza literaria en forma escrita. Durante el proceso de edición de Rituales de sangre recibí comentarios de los profesionales que se encargaron de editarlo y corregirlo acerca de con quién había realizado yo taller literario para lograr terminar la novela. La respuesta es simple: con nadie. La última vez que hice taller literario fue hace por lo menos siete años y desde entonces no volví a esa instancia. Lo que sí, leí algunos libros o manuales de escritura que me resultaron sumamente útiles y quiero compartir aquí mis recomendaciones en un mercado que también está saturado de este tipo de oferta. Aquí van los libros que considero cualquier escritor que pretenda escribir una ficción narrativa clásica (me refiero a las que poseen lo que Robert McKee denomina “arquitrama” que podríamos definir en términos estrictamente básicos: introducción – nudo – desenlace) es decir que no se busca una literatura vanguardista, ni minimalista, ni reflexiva. Hablo de una literatura de género (acción, aventura, drama, romance, policial, ciencia ficción, etc.) o donde al menos, los personajes sufran transformaciones profundas a nivel externo luego de atravesar una serie de “pruebas”.
Listado personal de libros que más me han ayudado a desarrollarme como narrador de ficción de género:
1. El guión (Story) de Robert McKee
Lo mencioné antes de comenzar el listado al hablar de lo que McKee define como “arquitrama” pero creo que él lo hace mucho mejor. Dice el maestro: “EL DISEÑO CLÁSICO implica una historia construida alrededor de un protagonista activo que lucha principalmente contra fuerzas externas antagonistas en la persecusión de su deseo, a través de un tiempo continuo, dentro de una realidad ficticia coherente y causalmente relacionada, hasta un final cerrado de cambio absoluto e irreversible.” (p. 67)
No encontrarán una mejor definición de lo que implica la escritura de una estructura narrativa clásica y además todos los manuales de escritura intentan definir esto, por lo que ir a la fuente de quién mejor lo hizo nos ahorra trabajo y tiempo. McKee luego desarrolla con lujo de detalles este concepto y todos los componentes que deben estar presentes en un libro escrito con intenciones de ser leído. Además, es sumamente didáctico sin por eso subestimar a sus lectores. Si bien el libro está orientado a la escritura de guiones para TV y Cine los lineamientos básicos de lo que es la estructura de una ficción literaria que pretenda sostenerse en la estructura clásica están aquí y muy bien desarrollados. Es un libro absolutamente imprescindible y recomiendo que sea el primero que se lea cuando el interés sea escribir historias clásicas.
Link en Amazon: aquí.
Link en MercadoLibre (Argentina): aquí.
2. Plot & Structure: Techniques and Exercises for Crafting a Plot That Grips Readers from Start to Finish de James Scott Bell
En mi caso particular la escritura de Rituales estuvo atravesada por la lectura de este manual que leí antes que el de McKee. Es un libro esencial porque contiene una explicación clara y eficiente de los modos de plantear una estructura narrativa coherente e interesante a la vez que enseña varios trucos para lograr que nuestra novela sea interesante y el lector quiera seguir leyéndola. Desde la forma de lograr comienzos intensos que atrapen al lector a finales explosivos que los dejen con ganas de más pasando por lo fundamental: cómo retenerlos durante el “medio” de la narración. Contiene además ejercicios para practicar lo que se va explicando, ejemplos extraídos de novelas y películas exitosas (hay toda un apartado explicando Die Hard que es impecable). Reitero mi impresión acerca de su imprescindibilidad.
Link en Amazon: aquí.
3. Characters, Emotion & Viewpoint: Techniques and Exercises for Crafting Dynamic Characters and Effective Viewpoints de Nancy Kress
En la misma colección que el de Scott Bell encontramos este muy buen manual que desarrolla en la construcción de personajes (lo que es junto con la estructura fundamental para tener una buena novela). El libro está escrito y estructurado del mismo modo que Plot and Structure… por lo que van a encontrar también ejercicios, resúmenes de lo principal que se explica en cada capítulo y varios tips interesantes para lograr construir personajes interesantes.
Link en Amazon: aquí.
4. Howdunit Forensics de D. P. Lyle y Police Procedure & Investigation: A Guide for Writers de Lee Lofland
Para los que quieran, como yo, escribir género policial/negro/thriller un buen manual de ciencia forense y otro de procedimientos policiales son indispensables. Estos dos son bastante buenos aunque están pensados específicamente para un público estadounidense, por lo que puede que los procedimientos policiales allí difieran un tanto respecto de los que hay en otros países. De todos modos contienen información interesante como material de referencia y consulta.
5. Book Marketing Guide y Secrets to Ebook Publishing Success de Mark Coker
Estos dos libros de Mark Coker, el fundador de la plataforma de autopublicación Smashwords, son imprescindibles para los que deseen introducirse en la aventura de publicar sus propios eBooks de forma independiente. Los dos manuales contienen información rica y variada a la vez que sumamente interesante y productiva y cuentan con una ventaja fundamental respecto de los cientos de otros títulos que andan circulando: son completamente gratis.
He leído varios manuales de márketing para libros y de autopublicación y en ninguno encontré nada que no hubiera leído de antemano en estos dos.
Creo que con estas recomendaciones ya tienen material suficiente para sumergirse en el estudio de las mejores técnicas y prácticas de escritura de ficción narrativa. Si bien en el bosque hay muchísimos otros árboles (manuales) creo que estos aquí señalados contienen todo lo que se va a necesitar para lograr buenas y atrapantes novelas.
¡Ahora a escribir!

February 25, 2015
Sherlock Holmes: el cuento perdido
Hace pocos días nos enteramos de una asombrosa noticia: un historiador escocés de ochenta años (Walter Elliot) había encontrado de casualidad un cuento perdido y nunca reeditado de Sherlock Holmes en una revista que descansaba en su ático.
El librillo en el que fue encontrado se llama “The Book o´ the Brig” y fue editado en 1904 para asistir en la tarea de reconstrucción de un puente roto; varios autores de la época colaboraron con sus creaciones y escritos.
Si bien ya hay algunos estudiosos que sostienen que el cuento no habría sido escrito por Arthur Conan Doyle, lo cierto es que sí se trata de un relato que llevó como mínimo su autorización y que hasta el día de hoy permanecía inédito más allá de ese folleto inhallable y olvidado.
Es un placer poder presentar el cuento perdido de Sherlock Holmes por primera vez en castellano gracias al trabajo de la traductora Mariela Dominguez Leandro
¡Que lo disfruten!
SHERLOCK HOLMES: EL DESCUBRIMIENTO DE BORDER BURGHS Y, POR DEDUCCIÓN, LA VENTA BENÉFICA
(traducido por Mariela Dominguez Leandro)
“Hemos tenido suficientes romancistas antiguos y viajeros”, dijo el editor mientras corregía su copia y preparaba la gran edición sabatina del Bazaar Book. “Queremos algo moderno. ¿Por qué no publicamos unas palabras de Sherlock Holmes?”
Solo basta una palabra del editor para que se haga lo que ordena, al menos es lo que ellos creen. “¡Sherlock Holmes!” Bien podría entrevistar al Hombre de la Luna. Pero no tiene sentido decirles a los editores lo que uno piensa. No tenía ninguna objeción, le aseguré al editor, de perseguir a Sherlock Holmes, pero para ello debería tener que viajar a Londres.
“¡Londres!”, anunció con desdén el Gran Hombre. “¿Y dices ser periodista? ¿Acaso no conoces el telégrafo, el teléfono o el fonógrafo? ¡Ir a Londres! ¿Y no sabes que todos los periodistas deben ser miembros calificados del Instituto de Ficción, y estar cualificados para hacer uso de la Facultad de la Imaginación? Gracias al uso de la última, se han entrevistado a hombres a cientos de kilómetros de distancia; algunos fueron “entrevistados” sin su conocimiento o consentimiento. Ten listo un artículo de actualidad para la imprenta para el sábado. Que tengas un buen día”.
Fui invitado a retirarme y tenía que escribir lo que fuere. Bueno, podría valer la pena probar la Facultad de la Imaginación.
Con desconcierto observé la casa familiar de la calle Sloan. La puerta estaba cerrada, las persianas corridas. Ingresé; las puertas no detienen a aquellos que utilizan la Facultad de la Imaginación. La luz tenue de una bombilla eléctrica inundaba la habitación. Sherlock Holmes estaba sentado a un lado de la mesa; el Dr. Watson estaba de pie, a punto de retirarse. Sherlock Holmes, como ha publicado un destacado periódico, es un notable librecambista. El Dr. Watson es un proteccionista tibio, quien recibiría sus penas detrás de una torre Martello, como dijo ingeniosamente Lord Goschen, pero no “¡en el suelo!” El dúo acababa de concluir una fuerte discusión sobre la política fiscal. Holmes dice:
“¿Y cuándo volveré a verlo, Watson? La investigación sobre “Los misterios del armario secreto” continuará en Edimburgo el sábado. ¿Le importara viajar a Escocia? Obtendría información primordial de la cual luego podría sacar buen provecho”.
“Lo siento mucho”, respondió Watson, “Me habría gustado ir con usted, pero un compromiso previo me lo impide. Sin embargo, gozaré de una amable compañía escocesa ese día. Así que yo también voy a Escocia”.
“¡Ah! Entonces ¿irá a la frontera ese día?”
“¿Cómo lo sabe?”
“Mi querido Watson, todo es cuestión de deducción”.
“¿Lo explicaría?”
“Bueno, cuando un hombre se concentra en cierto tema, el crimen surge en algún momento. En muchas discusiones que tenemos usted y yo sobre la cuestión fiscal, de vez en cuando noto que ha tomado una actitud hostil hacia cierta escuela de pensamiento, y en varias ocasiones hizo comentarios sobre la desaparición de supuestas reformas, como usted las describe, las cuales dice que no fueron resultado de un movimiento espontáneo de o impulsado por la gente, sino que exclusivamente se deben a la presión de los políticos de la escuela de Manchester que apelan al pueblo. En una de estas alusiones hizo una referencia peculiar a ‘huz an Mainchester’, quien ‘puso el mundo de cabeza’. La palabra ‘huz’ llamó mi atención, pero luego de consultar muchos autores y sin descubrir nada sobre el origen de la palabra, un día leía el periódico provincial y vi la misma expresión, la cual el escritor decía que describía el modo en que la gente de Hawick veía el progreso de la Reforma. ‘Huz an Mainchester’ marcó el camino. Así que pensé: ‘Watson tiene conocimiento de Hawick’. Y confirmé esta idea al escucharlo en varios momentos de distracción cantar en voz baja una extraña canción del dios noruego Thor. Nuevamente investigué y le escribí a un amigo del sur para pedirle una copia de ‘Teribus’. Así que pensé: ‘¡Hay algo en el aire! ¿Qué puede atraerle a Watson de Hawick?”
“Maravilloso”, dijo Watson. “Y…”
“Sí, y cuando describió las medidas del gobierno alemán que busca obstaculizar el comercio canadiense por medio del aumento de la barrera arancelaria en su contra como para desestimarlo. Y además, en un salón le pidió a una amiga mutua que le cantara esa vieja canción ‘Braw, braw lads’. La curiosidad me llevó a investigar la antigua balada, y al descubrir que tenía una referencia a una pequeña ciudad cerca de Hawick, comencé a ver un rayo de luz. Hawick tenía un lugar en su mente, como Galashiels, lo cual era aparente. La pregunta era por qué”.
“Hasta ahora va bien. Y…”
“Luego, la historia se complica. Vaya, cuando le estaba describiendo los pasos que llevaron al arresto del contratista Norwood por la huella del pulgar, descubrí con gran sorpresa que no estaba escuchando mi razonamiento en absoluto, sino que estaba tarareando una melodía muy, pero muy agradable, Watson, ‘The Flowers of the Forest’. Entonces consulté a una autoridad en el tema y descubrí que la encantadora y trágica canción hacía una referencia especial a Selkirk. Y recuerda, Watson, el entusiasmo que le despertó de repente el tema de Common Riding y cuánto estudió la historia de James IV, con especial referencia a Flodden Field. Todo esto habla, Watson, de la mente metódica de un pensador. Hawick, Galashiels y Selkirk. ¿Qué significaba la combinación? Sentía que debía resolver el problema, Watson. Así que esa noche cuando me dejó, después de que habíamos discutido sobre “La tragedia de una casa dividida”, ordené una gran cantidad de tabaco, me coloqué la capa y pasé la noche reflexionando. Cuando usted regresó en la mañana, el problema estaba resuelto. No pude hacerlo basándome en la evidencia acumulativa, pero llegué a la conclusión de que contemplaba otra contienda parlamentaria. ¡Watson, tiene a Border Burghs en vista!”
“En mi corazón, Holmes”, dijo Watson.
“¿Y adónde viaja el sábado, Watson?”
“Voy a Selkirk. Tengo un compromiso allí para inaugurar una venta benéfica”.
“¿Es en beneficio de un puente, Watson?”
“Sí”, respondió Watson sorprendido. “Pero ¿cómo lo sabe? No le hablé al respecto”.
“No fueron sus palabras, sino sus actos los que me revelaron lo que tenía en mente”.
“¡Imposible!”
“Permítame explicarle. Una semana atrás, vino a mi habitación y me pidió ver ‘Cantos populares de la antigua Roma’ de Macaulay. (Sabe que admiro las obras de Macaulay y tengo un juego completo.) Luego de darle una mirada casual, se llevó ese volumen con usted. Cuando lo regresó uno o dos días después, noté que estaba marcado con un trozo de papel en ‘Horacio’, y detecté una marca de lápiz apenas visible en el papel que decía que la estrofa de cierre era muy apropiada. Como sabe, Watson, los cantos populares describen la defensa de un puente. Permítame recordarle con qué belleza lo recitaba.
El buen hombre repara su armadura
Y recorta la pluma de su casco,
La lanzadera de su esposa alegremente
y con rapidez recorre el telar,
con llanto y con risas.
Y la historia cuenta…
lo bien que Horacio defendió el puente
en los magníficos días de antaño.
¿Podía yo, siendo mortal, evitar pensar que usted estaba inclinado a emprender tal hazaña?”
“¡Muy cierto!”
“Bueno, adiós, Watson; disfrutaré de su compañía luego del sábado. Recuerde las palabras de Horacio cuando llegue a Border Burghs: ‘Qué mejor muerte para un hombre que enfrentar temidos pronósticos’. Pero estas palabras son meros ejemplos. ¡Buen viaje y éxitos con la venta benéfica!”

February 24, 2015
Rituales de lágrimas: estado de situación
Sabrán disculpar mi inactividad en el blog pero sepan que fue debido a una buena causa.
Al día de hoy, martes 24 de febrero este es el estado de situación de mi próxima novela, Rituales de lágrimas:
Como pueden ver en la imagen sólo me resta escribir el Epílogo y estará terminada.
Si todo sale como está planeado llegaría a librerías para el último trimestre del 2015.

February 19, 2015
Rituales de sangre: los archivos perdidos
Hoy escribo específicamente para los que leyeron mi novela Rituales de sangre (y si llegaste aquí y no la leíste ¿qué estás esperando? aquí encontrarás un adelanto).
Como sabrán entonces los que leyeron la novela, buena parte del misterio de los asesinatos rituales se comienza a resolver
************************** SPOILERS **************************
en el capítulo 29.
Lo copio aquí:
Capítulo 29
Sebastián
Sebastián abrió el e-mail que le había mandado Miriam. Lo leyó todo entero de una sola mirada rápida casi sin respirar. Parecía que como decía el asunto del correo, se habían sacado el Bingo o al menos empezaban a llenar las líneas del cartón que los llevaría al gran premio.
Repasó de nuevo algunas líneas del e-mail:
“Cuando mencionaste el sabateísmo algo me hizo click en la cabeza. Desde siempre el jasidismo y sus diversas corrientes han sido acusados de tener relación con las ideas y las prácticas heréticas de Sabbatai Zevi por parte de sus opositores.
Busqué en la Enciclopedia Judaica del 2007 el artículo de Tikvá Zhitomir aunque sabía que ya lo habrías chequeado. Cotejé con el artículo dedicado a Zevi y no había nada que pudiera servirnos. Hasta ese momento pensé que posiblemente la acusación de sabateístas que hizo Goldman no era más que una acusación lanzada al aire. Lo más probable es que lo haya sido, pero sin saberlo el buen rab Saúl puede habernos dado una punta para seguir investigando. Como te dije, estaba convencida de haber visto alguna vez un esquema parecido a tu famosa “estrella que sangra”. Eso y la cuestión del sabateísmo me estuvieron rondando en la cabeza como una hora hasta que se hizo la hora de cerrar la biblioteca. Se había ido ya toda la gente cuando me dije que iba a hacer un intento más buscando en la Enciclopedia Judaica edición de 1972 que tenemos guardada en el altillo. La busqué, revisé la entrada sobre Sabatei y decía prácticamente lo mismo que la más actual. Entonces me acordé de Jacob Frank (te adjunto un link al artículo del YIVO para que veas de qué iba su mística) un continuador de Zevi. Busqué la entrada de Frank y me quedé mirando el retrato que la acompañaba. Había algo raro en el ángulo superior izquierdo, un trazo que no pertenecía al esquema general. Amplifiqué con una lupa y me siguió pareciendo que no pertenecía al dibujo pero tampoco decía nada. Tuve una intuición, saqué el espejito que uso para maquillarme, lo acerqué al dibujo amplificado y ahí sí, encontré, perdida en el trasfondo de la imagen en blanco y negro, unos trazos que conforman la mitad de tu estrella que sangra. Siguiendo el rompecabezas, busqué el retrato de Josef de Lemberg, el primer rebe de Tikvá en esa misma edición de la judaíca, rastree el dibujo con paciencia pero no encontraba nada. Intenté buscar en otras zonas del dibujo con la lupa y por fin encontré la otra mitad de tu Maguen David con gotas de sangre perdida en el medio del talit con el que aparece vestido en el retrato. Parece que alguien puso ese rompecabezas ahí vaya uno a saber para qué iniciado. En el retrato de Frank se lo ve sentado junto a un rollo de la Torá de perfil hacia la derecha de la hoja. Josef de Lemberg también está retratado escribiendo en un pergamino pero su posición muestra el otro perfil, de izquierda. Uniendo los dos trozos del dibujo se forma perfectamente la maguen David con gotas espesas cayendo de sus puntas, casi igual al que me dejaste. Ahora por lo menos sabés que las habladurías de un loco tienen al menos una relación, intrincada, críptica, con Jacob Frank y con Zhitomir.(…)
Miró las fotos que le había adjuntado Miriam, eran de baja calidad, tomadas con el teléfono celular. Había tomado una foto del retrato de Jacob Frank y la del retrato de Josef de Lemberg. A simple vista era imposible distinguir lo que había descubierto.
Los trazos granulares requerían un poco de imaginación para distinguir en el área señalada los trazos de esa Maguen David con sangre, pero haciendo un gran esfuerzo lograba verse algo en las dos fotos ampliadas y pegadas una al lado de la otra de los finísimos e imperceptibles a simple vista, trazos que conformaban el dibujo del símbolo…
¿Recuerdan? Desde que escribí esta escena pensé en los retratos de Josef de Lemberg y Jacob Frank y cómo escondidos en estos retratos podía formarse la Estrella que sangra. Bien, finalmente aquí están dichos retratos, verdaderos “archivos perdidos” que quedaron afuera de la primera edición de la novela.
La estrella que sangra escondida en los retratos.
¿Lograron, al igual que Miriam, encontrar la Estrella que sangra escondida en los retratos?
Agradezco el trabajo de CJ Camba por estas piezas.

February 14, 2015
Cómo conocí a mi esposa por Twitter
Hoy quiero compartir con ustedes, lectores, un texto que publiqué en el diario Clarín de la fecha: cómo conocí a mi esposa por medio de Twitter y nos casamos nueves meses más tarde.
En el Día de los Enamorados creo que no podía ser más oportuna.
La leen siguiendo éste enlace.
Ojalá la disfruten.

February 13, 2015
Solo tempestad
Comparto una muy linda reseña que le hicieron a mi novela Rituales de sangre en la nueva revista de crítica y reseña literaria Solo Tempestad.
Pasen a verla que la web vale la pena siguiendo este enlace.
Aquí la reseñista, Coni Valente, con su ejemplar de la novela.
