Sergio Gutiérrez Negrón's Blog, page 6
July 26, 2019
Frotarse con la riqueza, dice Flaubert

“Pero acabó por resignarse: guardó en la cómoda devotamente su precioso atavío y los zapatitos de raso cuya suela se había amarilleado al frotarse contra el suelo encerado y resbaladizo. Su corazón era como aquellos zapatos: al frotarse con la riqueza se le había pegado por debajo algo cuya huella jamás desaparecía ya”.
— Tavín Flaubert en “Madame Bovary”.
July 23, 2019
La inmensidad que precede la dicha futura, dixit Flaubert

“Las dichas futuras , como pasa con los ríos tropicales, suelen proyectar sobre la inmensidad que las precede su genuina suavidad, una especie de brisa perfumada, y el alma se limita a adormecerse bajo los efectos de esta ebriedad, sin preocuparse siquiera de se horizonte que aún no se columbra”
Dice Flaubert en Madame Bovary (via Carmen Martin Gaite).
July 21, 2019
Yo pensaba que Fernández Retamar había muerto hacía muchísimos años.

Fernández Retamar en una Casa de las Américas golpeada por el Huracán Irma. A su izquierda está la grandísima Ana Niria. Septiembre del 2017.
Cuando me dijeron que nos juntaríamos con Fernández Retamar en septiembre del 2017, entre un huracán Irma que destruyó la Habana en la que nos encontrábamos y un huracán María que destrozó el Puerto Rico en el que no estábamos, yo pensé que hablaban de otra persona, algún hijo o sobrino. Juraba que Fernández Retamar había muerto muchos años antes. Se lo dije a alguien y se rieron pensando que era un chiste. La verdad que no. Lo pensaba bien muerto, como por alguna razón suelo pensar a la gente que leí en la universidad y que hicieron mella. Leí el "Calibán", sin mucho contexto, en la iupi y fue ahí que me tropecé por primera vez con el llamado de repensar la historia desde otro personaje, desde otra posición. Creo que fue el primer texto que me hizo pensar, de cierta manera, el Caribe. No leería La tempestad aún, ni la de Shakespeare ni la de Cesaire, pero sí vería alguna película del sesenta y me aprendería las famosas líneas de la lengua y la plaga roja.
De ahí en adelante seguiría encontrándome con el Calibán y sus revisiones cada tres o cuatro años, siempre en un contexto diferente, siempre con una lectura distinta, siempre pensando a su autor muerto. Excepto el año pasado cuando, después de finalmente conocerlo (“Alguien llame a Silvio para que de un conciertito”, “No, Retamar, Silvio no está en el país ahora mismo”, “¿Están seguros? Llámenlo a ver”), volví a leerlo con algunos estudiantes. Fue una sensación extrañísima. Uno lleva tantos años invertido en la muerte del autor y de repente te das cuenta que el libro tiene pulso y que respira, y qué cosa rara la vida. El asunto es que desde que me enteré anoche que Fernández Retamar ahora sí está muerto, no he dejado de escuchar el latido de su libro en mi librero, haciendo vibrar el estante.
(By the way, siempre he pensado que un apellido como “Retamar” sólo se puede dar en la vida; en la ficción siempre sonaría como too much).
El ruido es el contexto, dice Gamper

El ruido es el contexto de lo humano.
Daniel Gamper, “Las mejores palabras”
July 12, 2019
Roselló en corillo, una columna
Hoy saqué una columna en El Nuevo Día sobre el leak de los chats de Roselló. Aquí cuelgo una versión levemente editada. Si vives en la luna, acá el meollo de la cuestión .


Roselló en corillo
Seguramente tú no hablas en tu casa como hablas en el trabajo. Tampoco hablas con tu mamá como hablas con tu hermano, o tu pareja. Al leer los leaks de los chats del gobernador Ricardo Roselló, todos sabemos que ese no es el lío. La gente no es boba y nadie querría que lo que dijera entre las colchas, entre familia o entre panas saliera a la luz pública. También dudo que alguien aquí creyera que, cuando no estaba frente a un podio, el gobernador se transformara, por arte de magia, en el modelo de la elocuencia o, como poco, de la gramática.
Nadie espera transparencia. Sabemos que los políticos politiquean, que dicen pero no dicen, que apelan pero no argumentan, que seducen pero no convencen. A pesar de esto, algunos esperamos que los buenos políticos, por lo menos, le den cierta importancia a la palabra pública, que entiendan su alcance. Una de las particularidades del actual gobernador es que, desde su entrada al espacio público, sus palabras nunca han parecido muy cuidadas. Siempre se han sentido torpes, superficiales, mal conjugadas. Pero aun así, sus más fervientes seguidores, o los más bondadosos, insisten que no hay que ser buen orador para ser buen gobernador, o que no hay que tener la metáfora indicada en el momento correcto o tan siquiera hacer buen uso del subjuntivo, si se tiene el corazón en el lugar indicado, si se es un administrador efectivo.
Pero la realidad es que, más allá de la merecida indignación, la lectura del back-and-forth virtual entre el gobernador y sus panas no es sólo ofensiva por su brutal misógina (como ya otras lo han señalado), sino que es incómoda y esclarecedora por lo cotidiana que se revela, por la profunda trivialidad de su torpeza. Ahí no hay complot, no hay crimen (por ahora). Lo que vemos, y ese es uno de los mayores problemas, es un corillo de machos jangueando. Y no son cualquier tipo de machos. Son los que componen la clase política del país. Ahí no podemos decir que son viejos que están “out of touch”. Ahí, entre mensajito y mensajito, lo que se ve es un retrato de la sociabilidad de la clase política del país, del nuevo-pero-siempre-ya-viejísimo old boys’ club. Y aún si dijéramos que, por pura casualidad del universo, fuimos testigos de la primera y única vez que el gobernador intenta jugar a macharrán alfa, la ausencia de reacción del resto de “los nenes” no hace sino confirmar lo normal del asunto, lo habitual del gesto misógino. Un gesto que no se agota en “la mala palabra”, como el gobernador la llamó, sino que también está en el “atiende a esas mujeres” que le escribe el gobernador a otro de los participantes, refiriéndose a un grupo de activistas que querían tratar el asunto de la violencia de género. El gesto se repite, además, en el hecho de que parezca exculpatorio justificarlo, como se hizo en su conferencia de prensa, diciendo que fue una forma de “liberar tensiones”.
Como ha dicho el filósofo Daniel Gamper en un libro reciente, hoy en día, quienes tienen la fuerza para exigirle responsabilidad a los otros por sus palabras, son precisamente quienes se niegan a asumirla. Al fin y al cabo, esta docena de chats son meramente testimonio de una clase política que bien puede hacer gestos de apertura e inclusión, pero que siempre buscará reproducirse a sí misma, a su imagen y semejanza macharrana, sabiéndose, a la larga, intocable.
July 9, 2019
Ser la tercera cerveza, dixit Toni Morrison

She was the third beer. Not the first one, which the throat receives with almost tearful gratitude; nor the second, that confirms and extends the pleasure of the first. But the third, the one you drink because it's there, because it can't hurt, and because what difference does it make?
dixit Morrison en Song of Solomon
July 3, 2019
El hombre nunca sabe para quién padece y espera, dice Carpentier

El hombre nunca sabe para quién padece y espera. Padece y espera y trabaja para gente que nunca conocerá, y que a su vez padecerán y esperarán y trabajarán para otros para otros que tampoco serán felices, pues el hombre ansía siempre una felicidad situada más allá de la porción que le es otorgada. Pero la grandeza del hombre está precisamente en querer mejorar lo que es. En imponerse Tareas. En el Reino de los Cielos no hay grandeza que conquistar, puesto que allá todo es jerarquía establecida, incógnita despejada, existir sin término, imposibilidad de sacrificio, reposo y deleite. Por ello, agobiado de penas y de Tareas, hermoso dentro de su miseria, capaz de amar en medio de las plagas, el hombre sólo puede hallar su grandeza, su máxima medida en el Reino de este Mundo.
El reino de este mundo de Alejo Carpentier
June 24, 2019
Un intento de traducir a Fred Moten

Un intento de traducir a Fred Moten para traducir a Fred Moten y entender a Fred Moten que no alcanza ni la traducción ni el entendimiento de Fred Moten pero sí logra cierta sensación de comprensión de lo que quiere decir Fred MotenThat unending remediation, in passage, as consent, in which the estrangement of natality is maternal operation-in-exhabitation of diffusion and entanglement, marking the displacement of being and singularity, is blackness.
Black and Blur (2017), de donde sale el fragmento
Esa remediación sin fin, de paso, como consentimiento, en la cual la enajenación de la natalidad es la operación-en-exhabitación maternal de la difusión y el embrollo, la marca del desplazamiento del ser y la singularidad, es la negritud.un intento de traducir a fred moten para traducir a fred moten y entender a fred moten que no alcanza ni la traducción ni el entendimiento de fred moten pero sí logra cierta sensación de comprensión de lo que quiere decir fred moten

Fred Moten
That unending remediation, in passage, as consent, in which the estrangement of natality is maternal operation-in-exhabitation of diffusion and entanglement, marking the displacement of being and singularity, is blackness.

Black and Blur (2017),
de donde sale el fragmento
Esa remediación sin fin, de paso, como consentimiento, en la cual la enajenación de la natalidad es la operación-en-exhabitación maternal de la difusión y el enbrollo, la marca del desplazamiento del ser y la singularidad, es la negritud.
June 3, 2019
Método y personalidá, dixit O'hara

“Frank [O'Hara] says: Style at its lowest ebb is method. Style at its highest ebb is personality”.
en "Five Participants in a Hearsay Panel" de Elaine de Kooning, Frank O'Hara, Joan Mitchell, Michael Goldberg, y Norman Bluhm.