Sebastian Uribe Díaz > Recent Status Updates

“Puede que no guste mi manera de escribir, el exceso, tal vez, de adjetivos y adverbios en enumeración paralela. Puede preferirse más concisión. Detestar el absurdo, qué sé yo. La verdad es que este estilo es el mío, y a mí me gusta leerme”.

“A pesar de todo, y sin pecar de inmodestia, soy mejor que todos esos tipos. Pero me gustaría leer Paradiso y más escritores sudamericanos que avanzan, realmente, en paralelo a mí. Eso es un hecho. El mismo modo de, ¿verdad?”.

-Lobo Antunes, 1971

“¿Y qué puedo contar? Esto es la completa monotonía dentro de la desesperación. Todo siempre igual, descorazonadoramente igual, empezando por la comida y la cena: patatas y carne, carne y patatas. Carne inmasticable, como supondrás”.

“Balzac es el gran culpable de la cristalización de la novela. Y se siguen escribiendo historias como en su época. En un mundo en el que todo evolu-ciona, la arquitectura, la pintura, la música, etc., nuestros prosistas son las personas más retrógadas que existen. Los diálogos, todo muy bien contado y sobre todo esa cosa horrible que llaman «análisis psicológico».

“Éramos todos jóvenes, estábamos solos, las fiestas duraban la noche entera, teníamos la razón, pero nadie podrá decir que lo pasábamos bien”.

“Escribo para detener la realidad un minuto, porque lo que viene después es el miedo. Y no es un miedo tonto, un ignorante miedo de niño que no sabe cómo es la vida; es verdad, más verdad de la que puedo admitir”.

“No tengo la edad suficiente, ni la madurez, ni la sabiduría, ni el vocabulario para escribir estas memorias, por eso las escribo. La gente normal es tan ególatra que ni siquiera necesita hablar de sí misma. Yo no soy normal. No conozco a nadie que lo sea. Escribo para vengarme”.

“Un lance de dados no puede suspender el azar si se ejecuta para habitarlo en la imaginación”.

“En el bosque de pinos de las máquinas” es🔥

fuego oficial
en las cocinas
en las casas
entre paredes nuevas
desde pantallas que arden y puntualmente arden
para reproducir el orden

-Fogwill

“Un logro. Puedo canjear mi vida por un logro; mi corazón por un efecto nítido sobre mi corazón”.

La alegría es un país grande y accesible
desde donde mirar y flotar
entre los muertos.

-Fogwill

“Ciertas tristezas son tan duras y resecas que son como gemas en bruto que no se dejan pulir por ningún filo”.

“Tenés que cerrar el estadio”

“De toda aquella gente, no quedaba ni siquiera un zapato o una prenda de vestir. Durante la noche la marea había borrado las manchas de sangre del lugar donde los habían fusilado y todo estaba limpio. «Ah, por eso los mataron en la playa», pensé”.

«Mi madre me contó que aquel día aprendió, de una vez y para siempre, que cuando alguien se muere y su cuerpo se enfría la nieve se acumula sobre sus mejillas y la sangre se escarcha».

“No me habituaba a no tener una ocupación ni a nadie a quien cuidar(…) Estas habían sido siempre las tareas más urgentes, por lo que le robaba horas al sueño para poder escribir. Mi mayor anhelo entonces era disponer algún día de todo el tiempo del mundo para la escritura; sin embargo, ahora que por fin lo tenía, el deseo se había esfumado”

«Y si bien la Unión Soviética ya no existía, y el capitalismo había triunfado urbi et orbi, el totalitarismo burocrático subsistía como mito o símbolo representativo».

«Los comentarios distraídos y un tanto incoherentes de Pedro Susano equivalían a una confidencia, de asuntos íntimos y poco honorables, confidencias que no se hacen a nadie pero se pueden hacer a una figura famosa (una figura de la televisión por ejemplo) materializada frente a uno, que se ha hecho real pero conserva un margen de irrealidad».

«Si uno espera demasiado, la ocasión de pensar pasa y no se la recupera más, y como la forma siempre es cuestión de pensamiento, la acción puede resultar amorfa e ininteligible».

« ¡Mierda! ¿Cómo viven las personas felices? ¿Las personas que duermen tranquilas y no saben usar un arma?»

«I had a dream that I removed all my teeth and glued them to the walls».

«Pero la muerte es abstracta, hasta a los adultos les puede costar entenderla. La violencia era algo diferente, más fácil de abarcar, existía en el espacio de la imaginación».

«Transmiten una gran calma, pero no fue un período sin conflictos. El Imperio holandés se expandía rápidamente, hay que interpretar estos cuadros en ese contexto. El persistente carácter doméstico de esos interiores tranquilos adquiere otro sentido desde esa pers-pectiva, dijo. Pretende mirar hacia dentro, dar la espalda a la tormenta que se está gestando fuera».

«Estás viviendo una vida corriente, con sus altibajos, y de pronto todo se desmorona y nunca más vuelves a sentirte seguro. Te pasas los días mirando por encima del hombro, tu percepción del mundo cambia, pasa a ser un lugar precario y lleno de hostilidad».

«Un lugar adquiere un aire intrigante cuando se entiende a medias su idioma, y en esos primeros meses la sensación fue especialmente curiosa».

«No existe ninguna diferencia con los barrios de Londres en los que yo vivía, dijo. Levantó la voz para hacerse oír por encima del ruido. Pero en La Haya te habitúas. Aquí es fácil olvidar que estás viviendo en una ciudad de verdad».

«No era su ciudad de origen lo que echaban tanto de menos, sino algo que allí habían dado por descontado. No sabían lo que era, pero sentían que, aunque aquella carencia aumentaba la intensidad de la vida cotidiana, también aumentaba su coste energético, lo cual la hacía a veces más estimulante, pero en esencia
más dura».

«(…) aunque el verdadero contenido de lo que se decían era una plegaria, una plegaria silenciosa y extrañamente afligida para que todo siguiera siendo tal como era. Siempre se les concedía».