Hugo García Michel's Blog, page 194

February 28, 2016

Hombre irracional

Al fin pude ver Irrational Man, la película de 2015 de Woody Allen, y debo decir que no me gustó del todo. No diré que es la peor obra de Allen (para mí, Casandra's Dream de 2XXX sigue siendo la dueña de ese dudoso honor), pero sí me pareció floja, lenta y hasta exasperante en ciertos momentos.
  La premisa de la historia es muy buena y recuerda a joyas como Crimes and Misdemeanors de 1989, Manhattan Murder Mistery de 1993 y Match Point de 2005, pero por alguna razón resultó fallida. Un poco en la idea de Patricia Highsmith de que una persona común y corriente (en este caso Abe Lucas, un profesor universitario neurótico y depresivo que no le encuentra sentido a la vida) puede convertirse en cualquier momento en un asesino, el guión echa a perder todo al tender hacia una actitud moralista que termina con el castigo del "malo". No sé si la edad le ha hecho cambiar su visión de las cosas, pero me extraña que el buen Woody caiga en esa moralina y olvide su saludable y distanciado cinismo habitual.
  Muy bien actuada por Joaquin Phoenix (como Abe) y la preciosa Emma Stone (como Jill, la estudiante que se enamora de su maestro y luego se convierte en una irritante piedra en el zapato -irritante no sólo para Abe, sino para el espectador mismo, al menos para mí), además de un excelente cuadro de actores secundarios, entre los que destaca la guapa cuarentona Parker Posey, Irrational Man falla quizá porque no se define entre ser un filme de crímenes o una comedia romántica y no logra fundir ambos géneros. Y es una lástima, porque arranca muy bien y tiene una excelente vuelta de tuerca, pero se derrumba en la segunda mitad, sobre todo en la parte final.
  Como leí que escribió un crítico: es como si se tratara de una cinta filmada por un imitador de Woody Allen que tomara todos sus clichés y no supiera resolverla debidamente. Tant pis.

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Published on February 28, 2016 20:00

February 27, 2016

Por mi raza hablará un patito

¿La educación universitaria debe ser para todos o tiene que ser para una élite con las suficientes aptitudes académicas e intelectuales? Viejo debate que la realidad se ha encargado de responder con su implacable veredicto. Para ingresar a las mejores universidades del orbe, se requiere de altísimas calificaciones. Esto es así hoy día, sobre todo en el primer mundo y lo fue también  cuando existía el llamado bloque socialista. Sólo los más aptos podían estudiar en las universidades de la URSS, China, Alemania Oriental o Cuba. En ningún caso eran instituciones para las masas.
  Pero he aquí que debido a un populismo tan idiota como rampante, en otras latitudes se piensa que todos tienen derecho a convertirse en universitarios, cuenten o no con la capacidad para ello, mientras que se desprecia a las escuelas técnicas, porque “sólo producen mano de obra barata para el capitalismo salvaje”, etcétera.
  Es en ese contexto que nació la muy cuestionada y dudosa Universidad Autónoma de la Ciudad de México,  creada por Andrés Manuel López Obrador, quien ahora se ha aventado la puntada de instituir, por medio de Morena, ocho “escuelas universitarias” (ojo: no se llaman universidades) que no cuentan con el Reconocimiento de Validez Oficial de Estudios de la SEP, por lo que no están en capacidad de otorgar títulos profesionales.
  El proyecto es muy parecido al que Hugo Chávez instituyó en Venezuela, con sus “misiones”, tal como explica Adrián de Garay, investigador de la UAM, en un estupendo artículo (“El chavismo de Morena en la educación superior”) publicado este mes en la revista Nexos, escuelas patito que por cierto no han conseguido crear mejores profesionales sino abundar en la demagógica y absurda idea de que todos podemos tener licenciaturas, maestrías y doctorados, un título pues, aunque sea un título con tanto valor práctico como el de un billete de dos pesos.
  “Por mi raza hablará un patito”, podría ser el lema de las flamantes escuelas universitarias de AMLO, quien ya amenaza conque, de llegar al poder en 2018, las adoptará como modelo educativo generalizado para el país. Oh my duck!

(Publicado hoy en mi columna "Cámara húngara" de Milenio Diario)
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Published on February 27, 2016 13:28

February 26, 2016

40 años del PMT

Hoy hace exactamente 40 años, el 26 de febrero de 1976, me afilié junto con Rosa, mi entonces esposa, al Partido Mexicano de los Trabajadores, el PMT, que lideraba el inolvidable Heberto Castillo. Fue durante una asamblea popular en el "zócalo" de Tlalpan. Ese día conocí ahí a Eduardo Valle, el famoso "Búho". Ambos ya fallecieron. Literalmente, parece que fue ayer (la credencial está fechada el 28 de febrero, porque ese día nos las entregaron).
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Published on February 26, 2016 14:09

February 25, 2016

After the Gold Rush

A mi modo de ver, el mejor disco de Neil Young, una obra maestra del rock folk, uno de los discos fundamentales de la década de los sesenta (porque el año 1970 aún pertenece a ese decenio) y de la historia del rock.
  After the Gold Rush (1970) es un trabajo que conjunta el lado más tierno del canadiense con algunas muestras de su lado más agresivo y salvaje. Se trata de una síntesis perfecta de la música bipolar de Young, un muestrario de sus posibilidades creativas.
  Todos y cada uno de los once temas que recorren el larga duración son espléndidas piezas de joyería musical y letrística, desde la conmovedora canción que abre el disco (“Tell Me Why”, con nada más que su guitarra de madera, la voz solista y las dos voces del coro), hasta la concluyente y divertida “Cripple Creek Ferry” (como para cantarla junto a una fogata nocturna en el campo), pasando por la hermosísima tonada que da tema al disco (acompañamiento de piano por Nils Lofgren –a sus diecisiete años escasos- y solo de corno francés incluidos), la encantadora “Only Love Can Break Your Heart”, la dramática (e hipercrítica y antirracista) “Southern Man”, la breve y curiosa “Till the Mornig Comes” (cierre del lado A en el vinil original), la muy campirana y serena “Oh Lonesome Me”, la majestuosa “Don’t Let It Bring You Down” (una de las más grandes composiciones del músico), la dulcísima “Birds” (melancólica canción de rompimiento amoroso), la pre-grungera “When You Dance You Can Really Love” (con su magnífica y sucia guitarra) y la triste y desesperanzadora “I Believe in You”.
  Pocas veces logró Neil Young crear melodías tan bellas como en este álbum memorable.

(Reseña que escribí originalmente para el "Especial" No. 35 de La Mosca en la Pared, publicado en noviembre de 2006)
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Published on February 25, 2016 17:11

February 24, 2016

Cena con mi gente amada

Espléndida cena con mi gente más querida la de esta noche. Vinieron mis hijos amados, sus dos hermosas novias y mis dos más adoradas amigas. Así lo quise organizar y todo salió a la perfección. Les preparé una pasta y mi ya clásica ensalada "Hugo". Lindo ambiente, sabrosa charla, buena música y al final canciones con guitarra. Todo muy divertido. Diría que una noche maravillosa.
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Published on February 24, 2016 21:30

February 23, 2016

Jack Garratt y el alma resucitada

Desde hace varios años, observo que lo que antes solía llamarse soul y rhythm and blues (R&B) fue sustituido por un extraño híbrido informe y popero al que se denomina con los mismos nombres, pero que poco o nada tiene que ver con lo que se hacía hace algunas décadas.
  Es decir, el soul de Aretha Franklin y Otis Redding, el de Smokey Robinson y Marvin Gaye, el de Wilson Pickett y Etta James, el de las disqueras Motown y, sobre todo, Stax, parece haberse ido en aras de un sonido edulcorado, pasteurizado. Rihanna, Beyoncé, Nicki Minaj y demás sucedáneos llegaron para extirpar el alma de la música negra y convertirla en un género poco apto para diabéticos debido al exceso de azúcar. Salvo grandes excepciones como Janelle Monáe, Erykah Badu, Lauryn Hill, Meshell Ndegeocello, TV on The Radio y los primeros discos de Alicia Keys, no encuentro ánima y sustancia en eso que persisten en llamar soul y R&B.
  Por eso, no deja de ser una muy grata sorpresa toparse de pronto con alguien como Jack Garratt (casi me sucedió lo mismo que cuando escuché el primer álbum de Joss Stone, blanca y británica ella, como Garratt).
  Phase (Island /Interscope, 2016) se titula el excelente disco debut de este joven inglés de escasos 24 años, quien ha logrado conjuntar la relativa frialdad mecánica de la electrónica con el cálido latir de la más profunda música soul. Para ello se vale de diversos rompimientos armónicos, de una sabia utilización de los beats del drum’n’bass, de un delicado sentido melódico y de un feelin’ vocal que remite lo mismo a los grandes intérpretes del soul que a algunos de los más destacados cantautores folks del Reino Unido, con el distintivo de su muy particular falseto.
  No hay desperdicio en Phase, las doce canciones que lo conforman (19 en la edición de lujo) mantienen un alto grado de creatividad y calidad artística y si acaso hubiera que destacar algunos cortes me iría por “Wheathered”, “I Know All What I Do”, “Surprise Yourself”, “Water” y la bellísima y final “My House Is Your Home”.
  Una gratísima sorpresa, un disco con alma de un músico con ángel.

(Publicado hoy en mi columna "Gajes del orificio" de la sección ¡hey! de Milenio Diario)
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Published on February 23, 2016 20:00

February 22, 2016

Historia de unas fotos

Las tenía hace muchos años. Quince para ser exactos. Nos las tomó la bellísima y talentosa fotógrafa -grande y adorada amiga- Isadora Hastings. Iban a formar parte de un disco que habríamos de grabar mi querido Adolfo Cantú y yo, proyecto que no se llegó a concretar. Pero quedaron las fotos. En transparencias. En una cajita que guardé quién sabe dónde, hasta que apareció quién sabe cómo. Pensé que en esta época digital sería imposible encontrar quién las revelara. Pero he aquí que di con un local cerca de donde vivo, en el que me las revelaron y hasta digitalizaron. Una docena de fotos que por fin he visto impresas y que al mismo tiempo puedo usar y mostrar por este medio y otros similares. Qué bien.
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Published on February 22, 2016 20:30

February 21, 2016

Un disco de kontroversia

The Kink Kontroversy (1965) es el primer álbum fuerte de los Kinks. Con una producción más pulida pero sobre todo con un Ray Davies más agudo, capaz de crear varios temas de enorme calidad y con ese sarcasmo que jamás lo abandonaría, y con un Dave Davies que se estrenaba como cantante (en el único cover del disco, el corte inicial “Milk Cow Blues”) y como compositor (con la muy digna “I Am Free”).
  Debo contar que The Kink Kontroversy fue el primer vinil de los Kinks -“four young men from England”, según se apunta en la contraportada del LP original- que tuve y que aún conservo, en una versión monoural que me trajo una prima de un viaje a los Estados Unidos por allá de 1969.
  El álbum es una maravilla del rock británico de mediados de los sesenta, con canciones tan soberbias como la rocanrolerísima “Gotta Get the First Plane Home”, la graciosa “When I See That Girl of Mine”, la muy kink y todo un clásico “Till the End of the Day” (con su riff a la “You Really Got Me”), la melancólica “The World Keeps Goin’ Round”, la también clasiquísima “Where Have All the Good Times Gone” y la blueserita “It’s Too Late”.
  Un disco estupendo.

(Reseña que escribí para el Especial de La Mosca en la Pared No. 43, publicado en octubre de 2007)
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Published on February 21, 2016 18:12

February 20, 2016

¡Torero, Torero, Torero!

No sé cómo tomar la noticia, dada el jueves pasado, de que la procuradora Arely Gómez dijo a los padres de los 43 normalistas de Ayotzinapa desaparecidos en Iguala que el especialista peruano José Luis Torero formará parte del nuevo grupo multidisciplinario que, una vez más, se meterá a hacer un peritaje en el basurero más famoso de México, el de Cocula, en Guerrero.
  Exacto: se trata del mismo experto (y que conste que no entrecomillé la palabra) que en septiembre pasado descalificó los peritajes realizados por la UNAM para la PGR, cuando Jesús Murillo Karam era aún su titular, y lo hizo luego de pasearse durante escasos veinte-minutos-veinte por el lugar, diez meses después de los sucesos, sin tomar muestras. Con eso le bastó para presentar un informe que según él desmentía a la famosa “verdad histórica”. Dicho informe, según personal de la propia PGR, carecía de rigor científico y metodología, contenía cálculos “desde la teoría” y pretendía desvirtuar análisis serios (como los de la UNAM). El escrito descalificador de Torero fue a su vez descalificado por ser “subjetivo y especulativo”, aunque eso sí, muy al gusto de la opinión pública de gauche, la cual lo acogió como su propia verdad… histórica.
  Torero es una autoridad en prevención de incendios, mas no en investigación de conflagraciones. Por qué se le eligió y por qué se le otorgó tanta credibilidad parece más una cuestión de tipo político que científico. El inca dijo lo que la progresía quería escuchar y eso bastó para otorgarle infalibilidad, esa misma infalibilidad cuasi papal que se le ha dado también al Equipo Argentino de Antropología Forense y al Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes, el famoso GIEI.
  Lo cierto es que el caso Ayotzinapa cada vez se politiza más y la búsqueda imposible de los estudiantes es más un pretexto para golpear y lograr fines incluso económicos (no olvidemos que todos los expertos son pagados por el propio Gobierno) que la causa noble que debería ser.
  En plena Temporada Grande, los progres pero no tan honrados se disponen a gritar de nuevo, cual villamelones en la México: “¡Torero, Torero, Torero!”.

(Publicado hoy en mi columna "Cámara húngara" de Milenio Diario)
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Published on February 20, 2016 17:51

February 19, 2016

Paulina, el ego y la autoestima

Mediodía espléndido con mi queridísima y preciosa amiga Paulina de la Vega, en un acogedor café de la colonia Nápoles. Siempre me pone de muy buen humor platicar y reír con ella, Una maravilla. De entre las cosas que surgieron en la plática, hubo un comentario suyo para decir que los dos tenemos un ego un tanto cuanto grande y pues ni modo de desmentirla.
  Ya en la tarde, en menos de una hora, me sucedieron tres cosas que elevaron mi autoestima y una que me la bajó (ya que mencioné el ego).

  1. Me mandaron el "Indice de impacto en Twitter de las y los articulistas de medios impresos mexicanos" de febrero de 2016, elaborado por el sitio México Social, y aparezco en el lugar 115 de 151 articulistas. En noviembre pasado aparecía yo con un "nivel de impacto" medio-bajo y esta vez subí a medio-alto.

  2. Poco antes fui a llevar unas viejas transparencias a un lugar que descubrí y donde me las van a revelar. Cuando el señor que me atendió me pidió mi nombre para hacer la nota, se lo di: "Hugo García Michel... Michel, tal como suena", a lo que me respondió: "¿Igual que en Milenio y La Mosca"? Me dio gusto toparme de ese modo con un lector a quien jamás había visto.

  3. De regreso y al entrar al edificio donde vivo, me topé con una vecina que al saludarme agregó: "Ya lo vi en los anuncios de Milenio TV, se ve igualito".

  Sin embargo...

  4. Un amigo de Facebook me escribió al Inbox para decirme que mis artículos siempre le gustan, pero que el que publiqué ayer sobre Kanye West, en "Acordes y desacordes" de la revista Nexos, es por mucho uno de los mejores que me ha leído. Se agradece..., sólo que ese texto no es mío, sino de mi querido amigo Israel Pompa-Alcalá. Como decía José Agustín: ni hablar del Bardotodol.
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Published on February 19, 2016 17:56

Hugo García Michel's Blog

Hugo García Michel
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