Rick Warren's Blog, page 125

La Comparación es la Raíz de la Envidia

“Cada uno debe evaluar sus propios actos y estar satisfecho de sus logros sin compararse con los demás”. Gálatas 6:4 (PDT)

La comparación es la raíz de toda envidia. Si puedes deshacerte de la comparación en tu vida, puedes deshacerte de la envidia en tu vida.

Aquí está el problema: La comparación es nuestro deporte favorito interiormente. Comparamos todo. Comparamos nuestro tamaño, nuestra forma, nuestro color, la forma en que hablamos, nuestra inteligencia. Comparamos nuestras familias, nuestros hijos, nuestros trabajos, nuestros talentos, e incluso el césped.

Dios advierte acerca de la necedad de compararte con alguien: “No nos atrevemos a igualarnos ni a compararnos con algunos que tanto se recomiendan a sí mismos. Al medirse con su propia medida y compararse unos con otros, no saben lo que hacen” 2 Corintios 10:12 (NVI).

Cada vez que comparas, vas a caer en el orgullo o en la envidia. Siempre vas a encontrar a alguien que está haciendo un mejor trabajo que tú, y te llenas de envidia, o vas a encontrar que tú estás haciendo un mejor trabajo que alguien, y te llenas de orgullo. El orgullo o la envidia es siempre el resultado de comparar. Y Dios dice que es tonto. No debes hacerlo. Tú eres único. Eres irrepetible. Eres incomparable.

La Biblia dice en Gálatas 6:4: “Cada uno debe evaluar sus propios actos y estar satisfecho de sus logros sin compararse con los demás” Gálatas 6:4 (PDT).

Cuando llegues al Cielo, Dios no te va a decir: “¿Por qué no fuiste más como esta o aquella persona?”. ¡No! Él va a preguntar, “¿Por qué no fuiste más como tú?” No puedes enfocarte en tu propósito mientras te enfocas en otras personas.

Cuando llegues al Cielo no serás juzgado por el talento que no tuviste. No vas a ser juzgado por las oportunidades que no se te dieron. Vas a ser juzgado por como viviste y lo que hiciste con lo que se te dio.

No hay necesidad de compararse con los demás. Dios te ha llamado a ser lo mejor que puedas ser de acuerdo con tus antecedentes, experiencias y talento que te ha dado.

Reflexiona sobre esto:

En lugar de mirar a los demás para medir tu valor o tus expectativas, ¿dónde tienes que mirar?Cuando alguien que conoces obtiene una victoria, un logro o una recompensa, ¿eres capaz de alegrarte con esa persona? ¿Por qué sí o por qué no?¿Cuáles son los dones y habilidades que Dios te ha dado? ¿Cómo los utilizas para ser la mejor versión de ti mismo?Si todavía no has confiado en Jesús y no te has comprometido a seguirlo, ¿por qué esperar más? Si estás listo para cruzar esa línea y tomar la decisión de creer en Jesucristo y seguirlo; haz esta oración.Más recursos en español y en otros idiomas incluyendo ASL — Lenguaje de Signos Americano RickWarren.org.Síguenos en Instagram & Facebook y comparte Esperanza Diaria con tus amigos y familiares.Recibe durante un mes un versículo de inspiración diario por WhatsAppNota: Desafortunadamente tenemos restricciones para enviar mensajes por WhatsApp a CUBA. .fb-background-color { background: #ffffff !important; } .fb_iframe_widget_fluid_desktop iframe { width: 100% !important; }

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What Happens When You Do What You Know Is Wrong?

“Whoever walks in integrity walks securely, but whoever takes crooked paths will be found out.”

Proverbs 10:9 (NIV)

The test of integrity is that your public life and your private life match—what’s in your heart and what’s in your life are the same thing. You ask yourself, “Would I want everyone to know about this decision that I’m making?”

The Bible says, “Whoever walks in integrity walks securely, but whoever takes crooked paths will be found out” (Proverbs 10:9 NIV).

The truth is, when it comes to integrity, even if you can fool everyone else, you can’t fool yourself and you can’t fool God. And when you violate your biblical values, you’ll pay for it with unwelcome consequences and broken relationships.   

Sometimes we know we’re about to do the wrong thing. We know we shouldn’t do it, but this thought comes to mind: “I know I’m doing the wrong thing, but I’m going to go ahead and do it because I know God will forgive me.”

Do you think you can do something that God says is wrong and not have consequences in your life? God knows there are consequences to every decision—and that’s why he doesn’t want you to make the wrong decision. He knows that every bad decision leaves scars in your life. And he wants better for you.

Does this mean that God does not forgive you for the wrong things you do? Of course, he forgives you. He’s a forgiving and gracious God. But that forgiveness does not free you from the pain and the consequences that come from making decisions that go against his will. You can be forgiven and still have regrets. You can be forgiven and still face pain. You can be forgiven and still have a broken relationship.

God created you, and he knows what’s necessary for you to live a full and purposeful life. Trust God’s Word and watch how he guides your steps.

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Talk It Over

How is your integrity affected when you know the right thing to do but don’t do it?
When have you experienced God’s forgiveness when you haven’t lived with godly integrity?
Why is the comparison game so dangerous when it comes to integrity? Look up Romans 14:14 in the Bible. How does that verse apply?

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La Envidia Perjudica tu Vida

“Donde hay envidias y ambiciones egoístas, también habrá desorden y toda clase de maldad”. Santiago 3:16 (NTV)

Lo que más te detiene del propósito y la misión de Dios para tu vida es un pecado muy sutil. No es la lujuria o el orgullo o la ira; no es la preocupación o el miedo o el desaliento. De hecho, es probable que ni siquiera pienses en esto porque aparenta ser tan inofensivo, que no nos damos cuenta de su efecto perjudicial en nuestras vidas.

Es la envidia.

Cuando envidias a los demás, estás tan obsesionado con lo que no tienes y con lo que no eres que te pierdes totalmente el plan de Dios para ti.

Necesitas entender las cuatro formas en que la envidia daña tu vida para que puedas eliminarla de tu vida.

La envidia niega tu singularidad.

Salmo 139:13-16 dice, “Tú creaste las delicadas partes internas de mi cuerpo y me entretejiste en el vientre de mi madre. ¡Gracias por hacerme tan maravillosamente complejo! Tu fino trabajo es maravilloso, lo sé muy bien. Tú me observabas mientras iba cobrando forma en secreto, mientras se entretejían mis partes en la oscuridad de la matriz. Me viste antes de que naciera. Cada día de mi vida estaba registrado en tu libro. Cada momento fue diseñado antes de que un solo día pasara” (NTV). La envidia te ciega ante tus propios dones y singularidad. Pero Dios no te hizo para que fueras como los demás. Dios te hizo para que fueras tú.

La envidia divide tu atención.

No puedes seguir el propósito de Dios y centrarte en otras personas al mismo tiempo. Tendrás una lealtad dividida, y entonces no conseguirás hacer nada en tu vida. Jesús dice en Mateo 6:24, “Nadie puede servir a dos patrones al mismo tiempo. Odiará a uno y amará al otro, o se dedicará a uno y despreciará al otro. Ustedes no pueden servir al mismo tiempo a Dios y a las riquezas” (PDT).

La envidia desperdicia tu tiempo y energía.

Eclesiastés 4:4-8 dice: “Luego observé que a la mayoría de la gente le interesa alcanzar el éxito porque envidia a sus vecinos; pero eso tampoco tiene sentido, es como perseguir el viento… Es el caso de un hombre que está totalmente solo, sin hijos ni hermanos, no obstante, trabaja mucho para acumular toda la riqueza posible. Sin embargo, luego se pregunta: «¿Para quién trabajo? ¿Por qué me privo de tantos placeres?». Nada tiene sentido, todo es tan deprimente” (NTV).

La envidia conduce a todos los demás pecados. La envidia puede destruir todo y a todos a tu alrededor. La Biblia dice: “Donde hay envidias y ambiciones egoístas, también habrá desorden y toda clase de maldad” Santiago 3:16 (NTV).

En el fondo se trata de un problema del corazón. La envidia es un problema del corazón.

Cada vez que envidias te has equivocado en tu adoración, porque la envidia es una forma de adoración. Dice: “Deseo eso. Quiero eso. Amo eso. Quiero vivir para eso”. Eso se llama adoración. Y cada vez que ese objeto no es Dios, se convierte en un ídolo.

Si quieres eliminar la envidia, tienes que preguntarte: “¿Qué estoy adorando? ¿Adoro a Dios y Su gracia en mi vida? ¿O estoy adorando lo que quiero de otras personas?”.

Reflexiona sobre esto:

¿Qué pequeñas cosas te han hecho sentir envidia? ¿Cuáles han sido los efectos más graves?¿Qué puedes reconocer de ti mismo que te ayude a evitar que la envidia te ciegue y te haga perder de vista tus dones?¿Cómo cambia tu visión de la envidia cuando consideras que es una forma de adoración a ídolos?Si todavía no has confiado en Jesús y no te has comprometido a seguirlo, ¿por qué esperar más? Si estás listo para cruzar esa línea y tomar la decisión de creer en Jesucristo y seguirlo; haz esta oración.Más recursos en español y en otros idiomas incluyendo ASL — Lenguaje de Signos Americano RickWarren.org.Síguenos en Instagram & Facebook y comparte Esperanza Diaria con tus amigos y familiares.Recibe durante un mes un versículo de inspiración diario por WhatsAppNota: Desafortunadamente tenemos restricciones para enviar mensajes por WhatsApp a CUBA. .fb-background-color { background: #ffffff !important; } .fb_iframe_widget_fluid_desktop iframe { width: 100% !important; }

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Good Decisions Always Line-up With God’s Word

“Your word is a lamp for my feet, a light on my path.”

Psalm 119:105 (NIV)

Every day, we make one decision after another, and it can be hard to know how to make those decisions. But here’s a simple principle: If you want to make good decisions, listen to God.

The Bible says, “If you want better insight and discernment . . . learn the importance of reverence for the Lord and of trusting him . . . He shows how to distinguish right from wrong, how to find the right decision every time” (Proverbs 2:3, 5, 9 TLB).

So how do you listen to God? One major way God speaks is through his Word. So when you’re making a decision, ask yourself: “Is my decision in harmony with God’s Word?”

When you’re making a decision, you’re choosing what’s going to be your ultimate authority in life. It really boils down to this choice: God’s Word or the world. Are you going to base your decisions on what God says or what other people say?

If you base your life on popular opinion, you’re always going to be out of date because popular opinion changes every day. What was “in” yesterday is “out” today, and what’s “in” today will be “out” tomorrow. If you base your life on popular culture or opinion polls, you will struggle because you’re building on a shifting foundation!

On the other hand, if you base your life on God’s Word, the truth never changes. Truth is always true. So if God says something was wrong 10,000 years ago, it was also wrong 500 years ago, it’s wrong today, and it will be wrong 1,000 years from today. I don’t care what the culture says or what is popular at the time. If God says it’s wrong, it’s wrong. And if God says it’s right, it will always be right. That is a solid foundation!

God has set up the universe with certain laws—physical, moral, and spiritual. God built the universe around these laws because they’re all for your benefit. When you cooperate with the principles in this universe, you’re more likely to succeed. If you reject, disobey, ignore, and rebel against God’s principles, you may get hurt.

When you keep all this in mind, you can be confident about the decisions you make. If God says it’s okay, then you do it. If God says no, then you don’t do it.

As you learn to make decisions based on God’s Word, you’ll find this to be true: “Your word is a lamp for my feet, a light on my path” (Psalm 119:105 NIV).

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Talk It Over

How does society try to convince you that truth is subjective instead of based on the unchanging truth of God’s Word?
How can you become more familiar with the Bible so you can better base your decisions on it?
How have you experienced freedom when you obeyed God’s laws and direction in your life?

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Antes de que Dios te Hable, Decide Decirle “Sí”

“Y las semillas que cayeron en la buena tierra representan a las personas sinceras, de buen corazón, que oyen la palabra de Dios, se aferran a ella y con paciencia producen una cosecha enorme”. Lucas 8:15 (NTV)

Dios habla a las personas que deciden que van a hacer lo que Él les dice que hagan, incluso antes de que les diga que hacer.

Este tipo de persona dice cosas como: “Dios, si quieres que me mueva, me moveré. Si quieres que me case, me caso. Si quieres que deje este trabajo, lo dejaré. Antes de que me lo digas, mi respuesta será ‘sí’. Lo que sea que quieras que haga, lo haré”.

Lucas 8:15 dice: “Y las semillas que cayeron en la buena tierra representan a las personas sinceras, de buen corazón, que oyen la palabra de Dios, se aferran a ella y con paciencia producen una cosecha enorme” (NTV).

Solía ​​estudiar esta parábola de Jesús y pensaba que se refería a cuatro tipos de personas: los que son resistentes, los que son superficiales, los que están ocupados y los que son buenos.

Pero esta parábola en realidad representa cuatro actitudes. ¡Puedes tener las cuatro actitudes en el mismo día! En un momento piensas: “Dios, no quiero escucharte, porque sé lo que vas a decir”. Y al momento siguiente dices: “Señor, dime rápido”. Luego lo escuchas y piensas que es bueno, pero no haces nada al respecto. En otro momento tal vez la fruta comienza a aparecer en tu vida, pero luego te ocupas de tu trabajo, de la escuela o de tus hijos, y la mala hierba comienza a crecer. Y otras veces dices: “Dios, haz lo que quieras. Estoy totalmente abierto a ti”.

Dios quiere que tengas una actitud de obediencia para que puedas dar fruto, el término bíblico para tener éxito. Dios quiere que seas fructífero en tu negocio, tu familia, tus amistades, tu relación con Él, tus relaciones con los demás y tu salud.

¿Cuál es la mejor y la manera más rápida de dar fruto? Tomando lo que Dios te ha dicho y compartiéndolo con alguien más.

Otra versión de Lucas 8:15 dice: “Las semillas que cayeron en buena tierra representan a los que oyen el mensaje de Dios y lo aceptan con una actitud obediente y sincera. Estos últimos se mantienen firmes, y sus acciones son buenas” (TLA).

Cuando Dios te diga algo, ¡acéptalo con un corazón obediente y luego compártelo con alguien más!

Reflexiona sobre esto:

¿Cómo desarrollar una actitud para decir “sí, Dios”, en la que estés dispuesto a ser obediente, sin importar lo que Dios te diga que hagas?¿En qué áreas de tu vida estás dando fruto?¿Con quién en tu vida puedes compartir lo que Dios te está enseñando?Si todavía no has confiado en Jesús y no te has comprometido a seguirlo, ¿por qué esperar más? Si estás listo para cruzar esa línea y tomar la decisión de creer en Jesucristo y seguirlo; haz esta oración.Más recursos en español y en otros idiomas incluyendo ASL — Lenguaje de Signos Americano RickWarren.org.Síguenos en Instagram & Facebook y comparte Esperanza Diaria con tus amigos y familiares.Recibe durante un mes un versículo de inspiración diario por WhatsAppNota: Desafortunadamente tenemos restricciones para enviar mensajes por WhatsApp a CUBA. .fb-background-color { background: #ffffff !important; } .fb_iframe_widget_fluid_desktop iframe { width: 100% !important; }

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You Can’t Connect If You Don’t Commit

“A man of many companions may come to ruin, but there is a friend who sticks closer than a brother.”

Proverbs 18:24 (ESV)

Good relationships don’t happen by accident. They take cultivation, work, and a lot of time. They take commitment!

I can’t count the number of times my wife Kay and I have felt like walking out of our marriage, particularly in the early years. We often thought, “This is not worth it. We’re so different. This marriage will never work.”

But we didn’t walk out. Why? Because we’d made a commitment. We took a vow—“till death do us part”—not just to each other but also to God. So we said, “We’re going to keep this commitment even if it kills us.” And it nearly did!

There have been times in our marriage when the only thing keeping us together was that commitment—not love or interest but simply the commitment we made to God. I’m so glad we did not give up. Today, my wife is my best friend, and I cannot imagine my life without her.

The Bible says in Proverbs 18:24, “A man of many companions may come to ruin, but there is a friend who sticks closer than a brother” (ESV).

Did you know that your socializing can keep you from having deep relationships? You can be so busy networking and making acquaintances that you never invest the time, energy, and effort it takes to cultivate the deep, satisfying intimacy of a good friend or spouse. It’s not wrong to have a lot of acquaintances, but they can keep you so busy that you don’t develop any vital, close relationships.

You don’t need a lot of friends to make it in this world, but you do need a few good ones. So focus on quality, not quantity. Your acquaintances—your hundreds of “friends” on social media—aren’t necessarily going to be there when you need them. But the friends you are truly connected and committed to will be there.

Every important, close connection begins with a commitment. If you want to get beyond shallow, superficial relationships, you’ve got to be willing to stick with it.

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Talk It Over

Who are the people you’re committed to? In what ways do you show your commitment to each other?
How does your social networking affect the depth of your connections with your friends, family members, and spouse?
What is one practical step you can take to move a specific relationship forward and go deeper?

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Tres Cosas que Pueden Impedir que Escuches a Dios

“La parte que cayó entre espinos son los que oyen, pero, con el correr del tiempo, los ahogan las preocupaciones, las riquezas y los placeres de esta vida, y no maduran”. Lucas 8:14 (NTV)

No puedes escuchar a Dios si tu mente está ocupada con otros pensamientos o asuntos, especialmente preocupaciones, planes y actividades. Si siempre estás escuchando la radio o viendo la televisión, es difícil escuchar a Dios cuando te llama. Para escuchar a Dios, tienes que eliminar las distracciones.

Jesús dice en Lucas 8:7, “Otra parte cayó entre espinos que, al crecer junto con la semilla, la ahogaron” (NVI).

En esta historia que Jesús nos describe, las semillas se plantan y comienzan a crecer, pero las semillas están en un suelo infestado de malas hierbas. Entonces, a medida que la planta crece, la maleza crece a su alrededor. La cizaña ahoga la vida de la planta, y nunca da fruto.

Esto es lo que Jesús dice que es el significado de Lucas 8:7: “La parte que cayó entre espinos son los que oyen, pero, con el correr del tiempo, los ahogan las preocupaciones, las riquezas y los placeres de esta vida, y no maduran” Lucas 8:14 (NVI).

Aquí te presento tres cosas que pueden ahogar el crecimiento espiritual en tu vida y evitar que escuches a Dios:

Preocupación. Las preocupaciones son malas hierbas. Cuando estás preocupado por los problemas y las presiones de la vida diaria, es más difícil escuchar a Dios.

Riqueza. ¿Estás tan ocupado ganándote la vida que no haces una vida? Trabajar para pagar facturas por cosas que no necesitas, para salir de deudas innecesarias o para ganar más dinero del que realmente necesitas puede impedir tu crecimiento espiritual.

Placer. No hay nada malo con el placer, pero ten cuidado de no estar tan ocupado persiguiendo la diversión que pierdas a Dios y sus planes para tu vida.

¿Sabes lo que siempre es cierto de las malas hierbas? No tienes que cultivarlas. Crecen automáticamente. De hecho, las malas hierbas son un signo de abandono. Si ves malas hierbas en tu patio o jardín, significa que no lo estás cuidando.

Es lo mismo con tu vida espiritual. La mala hierba en tu vida espiritual muestra que estás descuidando el tiempo con Dios.

Pasa tiempo cada día cuidando tu jardín espiritual. Arranca la cizaña tan pronto como aparezca para que no se apodere de la buena obra que Dios quiere hacer en ti.

Reflexiona sobre esto:

¿Cómo luchas con la “mala hierba” de la preocupación, las riquezas y el placer?¿Cómo puedes eliminar esas malas hierbas de tu vida?¿Tienes un tiempo a diario a solas con Dios? Si no lo tienes aún, ¿Qué puedes cambiar en tu vida para dedicar un tiempo a diario a solas con Dios?Si todavía no has confiado en Jesús y no te has comprometido a seguirlo, ¿por qué esperar más? Si estás listo para cruzar esa línea y tomar la decisión de creer en Jesucristo y seguirlo; haz esta oración.Más recursos en español y en otros idiomas incluyendo ASL — Lenguaje de Signos Americano RickWarren.org.Síguenos en Instagram & Facebook y comparte Esperanza Diaria con tus amigos y familiares.Recibe durante un mes un versículo de inspiración diario por WhatsAppNota: Desafortunadamente tenemos restricciones para enviar mensajes por WhatsApp a CUBA. .fb-background-color { background: #ffffff !important; } .fb_iframe_widget_fluid_desktop iframe { width: 100% !important; }

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Is Gossip Destroying Your Relationships?

“A gossip betrays a confidence, but a trustworthy person keeps a secret.”

Proverbs 11:13 (NIV)

We tend to think of gossip as one of those “little” sins. But when God talks about gossip, he puts it on the list with things like sexual immorality and murder. Why? Because it is so destructive to relationships. Gossip can tear apart friendships, families, and churches.

When you gossip, you talk about a situation with somebody who is neither a part of the problem nor a part of the solution. If we’re honest, gossiping often makes us feel a little more important at somebody else’s expense. We’re talking about their hurts and their problems to make us feel like we’re morally superior to them. That’s the danger and the hurt of gossip. 

There’s a story in the Old Testament about a family that struggled with gossip. Moses had siblings named Miriam and Aaron who got caught up gossiping about him. So God called all three of them to come see him. He spoke to Miriam and Aaron, telling them that Moses was his prophet and that what they’d done was wrong—and right there on the spot, God gave Miriam leprosy because she had instigated the gossip and then talked her younger brother, Aaron, into joining her.

You may be thinking, “That sounds terrible, but I’d like something to happen to the person who gossiped about me. Certainly not leprosy—but maybe a bad stomach flu, so that person knows how much it hurt me.”

Do you know what happened next? Aaron acknowledged their sin against Moses, and he asked Moses to pray for Miriam’s healing. And so Moses asked God to heal her. He prayed for the person who had gossiped against him. And after seven days, God healed Miriam.

Maybe you’ve been deeply hurt by gossip—by things that have been said around the office or by the broken confidence of a friend or family member. Here’s what God says to you: “Pray for the person who gossiped against you so that you can be released from the hurt in your life.”

Or maybe you’ve been the one gossiping. This story of Miriam, Aaron, and Moses in the Old Testament reminds us how serious gossip is and how hurtful it can be to people, whatever side of it you’re on.

But on the other hand, keeping confidences enables you to connect to others in productive, healthy, and genuine ways.

Proverbs 11:13 says, “A gossip betrays a confidence, but a trustworthy person keeps a secret” (NIV).

How would you measure yourself against this verse? Are you a gossip who betrays a confidence? Or are you someone who can be trusted to keep a confidence?

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Talk It Over

Think of someone who has gossiped about you. How do you think God wants you to pray specifically for that person?
What do you normally do when people around you start to gossip? How closely does that align with the way God might want you to react?
Why does being a trustworthy person help deepen your relationships?

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¿Cómo Puedes Desarrollar Raíces Espirituales?

“Las semillas sobre la tierra rocosa representan a los que oyen el mensaje y lo reciben con alegría; pero como no tienen raíces profundas, creen por un tiempo y luego se apartan cuando enfrentan la tentación”. Lucas 8:13 (NTV)

Durante la primavera, toda la hierba del sur de California se vuelve verde, las flores silvestres florecen, y es hermoso. Pero en el momento en que cesan las lluvias, las colinas vuelven a ponerse marrones. ¿Por qué? Porque la hierba tiene raíces poco profundas. Las raíces no pueden profundizar lo suficiente como para obtener agua de los manantiales que se encuentran muy por debajo de la tierra.

Cuando una planta tiene raíces poco profundas, inicialmente puede brotar y verse bien, pero se marchita rápidamente y no dura. Es lo mismo para tu vida espiritual. Para crecer en cualquier estación de la vida, necesitas raíces profundas.

Lucas 8:13 dice: “Las semillas sobre la tierra rocosa representan a los que oyen el mensaje y lo reciben con alegría; pero como no tienen raíces profundas, creen por un tiempo y luego se apartan cuando enfrentan la tentación” (NTV).

Algunas veces puedes escuchar la Palabra de Dios y emocionarte sin permitir que te cambie. Actúas superficialmente. Reaccionas emocionalmente. Te mueves impulsivamente. Pero no te tomas el tiempo para dejar que se profundice.

¿De verdad quieres ser así? ¡No! Quieres ser una persona profunda, no superficial. Quieres ser una persona con raíces espirituales profundas para que cuando llegue la recesión y dure varios años, puedas seguir dando frutos. Cuando vienen los vientos fuertes y alguien de tu familia se enferma o muere un amigo cercano, la prueba no te derriba, porque tienes raíces profundas.

¿Cómo desarrollas raíces espirituales? Lo haces teniendo un tiempo diario con Dios y un tiempo semanal en un grupo pequeño con otros creyentes. Tienes que pasar tiempo a solas con Dios, y tienes que pasar tiempo con otros creyentes.

Si no pasas tiempo con Dios todos los días, te secarás y volarás cuando haya presión. No podrás manejarlo. Necesitas hacer tiempo para poder escuchar durante un tiempo diario con Dios. Siéntate y quédate quieto. Lee la Biblia y habla con Dios. Pon algo de música de adoración. Si te gusta escribir un diario, hazlo. Haz lo que sea necesario para mantener tu enfoque en Dios.

También necesitas un grupo pequeño que se reúnan semanalmente. Nadie tiene una perspectiva completa de la vida. Todo el mundo tiene puntos ciegos. Las personas de tu pequeño grupo pueden ver cosas en tu vida que tú no puedes ver. ¡Por eso nos necesitamos unos a otros! Aprendes de las personas de tu grupo pequeño a medida que se animan unos a otros y tus raíces se harán más profundas.

Tarde o temprano, la vida te arrojará cosas difíciles. La pregunta es si tendrás las raíces profundas que necesitas para sobrevivir e incluso prosperar en esos tiempos.

Reflexiona sobre esto:

¿Son tus raíces espirituales superficiales o profundas? ¿Qué evidencia en tu vida te muestra eso?¿Es más fácil para ti pasar tiempo con Dios o con un grupo pequeño de otros cristianos? ¿Por qué?¿Qué cambio práctico quieres hacer en tu vida para desarrollar raíces espirituales más profundas?Si todavía no has confiado en Jesús y no te has comprometido a seguirlo, ¿por qué esperar más? Si estás listo para cruzar esa línea y tomar la decisión de creer en Jesucristo y seguirlo; haz esta oración.Más recursos en español y en otros idiomas incluyendo ASL — Lenguaje de Signos Americano RickWarren.org.Síguenos en Instagram & Facebook y comparte Esperanza Diaria con tus amigos y familiares.Recibe durante un mes un versículo de inspiración diario por WhatsAppNota: Desafortunadamente tenemos restricciones para enviar mensajes por WhatsApp a CUBA. .fb-background-color { background: #ffffff !important; } .fb_iframe_widget_fluid_desktop iframe { width: 100% !important; }

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Use Your Words to Build Others Up

“Do not let any unwholesome talk come out of your mouths, but only what is helpful for building others up according to their needs, that it may benefit those who listen.”

Ephesians 4:29 (NIV)

Sometimes our words are like a sledgehammer. We swing away without thinking, and suddenly we look around and realize a pile of relational rubble surrounds us. When you thoughtlessly sling your words around and tear people down, your relationships are going to suffer.

But God wants you to use your words to build others up. Ephesians 4:29 says, “Do not let any unwholesome talk come out of your mouths, but only what is helpful for building others up according to their needs, that it may benefit those who listen” (NIV).

One reason we’re not effective with our words is we don’t realize how our mouths and words are powerful, God-given tools. We say things without thinking. And people remember them.

Maybe you can still remember certain things people said to you in a careless way—even as far back as grade school. That’s how powerful words are. So when it comes to the words you say, think of them as a power tool and be extremely careful.

One time I went into my garage and grabbed a manual for a power saw. As I was reading through the directions, I was struck by how the use of a power tool relates to the words we choose to say. The directions said:

1. Know your power tool.

2. Keep guards in place.

3. Be careful around children.

4. Store idle tools when not in use.

5. Don’t overreach.

6. Never use in a volatile atmosphere.

How can you use your mouth more carefully, so you are using it to build relationships and not to tear people down?

1. Stop excusing. Stop saying, “I didn’t really mean to say that” or “That’s just how I am before my first cup of coffee.” Realize that what you say impacts everybody around you. 

2. Talk less. We often get in trouble because we just don’t know when to stop talking. If it’s a power tool, you shouldn’t have to use it as much, right?

3. Listen more. If you listen more, you can better understand people’s needs.

4. Start building. Let your first thoughts be, “What does this person need?” “How can I use a word of encouragement to build him up?” “What can I say to make a difference in her life?”

Consider making this part of your morning prayers: “May the words of my mouth and the meditation of my heart be pleasing in your sight, LORD, my Rock and my Redeemer” (Psalm 19:14 NIV).

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Talk It Over

Why do we need to be especially careful with our words when we’re in an “volatile atmosphere”?
What is something specific you can practice doing in your relationships that will help you talk less and listen more?
What Scripture verses can you memorize that will help you speak truth and encouragement into others’ lives?

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