Holiday Heart Quotes

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Holiday Heart Holiday Heart by Margarita García Robayo
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Holiday Heart Quotes Showing 1-10 of 10
“mantener los afectos es cuestión de disciplina.”
Margarita García Robayo, Tiempo muerto
“la patria es eso que se muda contigo.”
Margarita García Robayo, Tiempo muerto
“Abría los ojos en la noche, sentía la turgencia en su barriga, el movimiento interno, y pensaba: mi cuerpo es una casa invadida por aliens.”
Margarita García Robayo, Tiempo muerto
“pero un día te vas a dar cuenta de que un hombre sin raíces es un hombre muerto.”
Margarita García Robayo, Tiempo muerto
“Sus alumnos tenían la facultad de vaciarlo de criterio. De hacerle perder el entusiasmo por absolutamente todo. Y de convertir su mundo en un abismo.”
Margarita García Robayo, Tiempo muerto
“Estaba en crisis, era cierto, pero —pensó Lucía y se llenó de furia—: ¿quién no estaba en crisis?”
Margarita García Robayo, Tiempo muerto
“Eso tienen, aparte de hijos y ollas: asentamientos de tiempo muerto que ninguno se ha dignado a remover.”
Margarita García Robayo, Tiempo muerto
“«El desarraigo te será funcional en términos retóricos», le dijo un día Pablo —intentando imitar ese lenguaje de mujercita clean y sobreeducada que ella, a su vez, también impostaba—, «pero un día te vas a dar cuenta de que un hombre sin raíces es un hombre muerto».”
Margarita García Robayo, Tiempo muerto
“Lucía le dijo: «Yo a veces imagino que Gonzalo se mete a Elisa entera por el culo y ella asciende por su intestino, nadando veloz, y se empasta de mierda y le sale por la boca, disparada, como un hueso atascado en el esófago». Después apoyó la cabeza en la almohada y se puso a mordisquear un chupo viejo de los niños que encontró entre el borde de la cama y la pared.”
Margarita García Robayo, Tiempo muerto
“Abajo está la piscina. El matrimonio ruso toma el sol en una tumbona de mimbre tamaño familiar. Ella: bikini rosado con piedras incrustadas; él: zunga negra con pequeñísimos lunares de espejo. Sus tres hijos rubios están chapoteando en el agua con la que debe ser su abuela materna —es la misma cara de ella, pero caída: un viento la sopló fuerte desde arriba. La playa está limpia. El cielo también. Ningún alga, ninguna nube. Sombrillas y sillas alineadas frente al mar.”
Margarita García Robayo, Tiempo muerto