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La brillantez escasea, pero el coraje escasea todavía más que el genio.
Las startups operan sobre el principio de que necesitas trabajar con otra gente para que las cosas salgan adelante, pero también necesitas mantener un tamaño lo suficientemente pequeño para poder llevarlas a cabo.
«En individuos particulares, rara vez se aprecia la locura, pero en grupos, partidos políticos, naciones y eras, es la norma»,
El primer paso para pensar con claridad es preguntarnos qué pensamos sobre el pasado.
No deberías saber lo que tu negocio hará en el futuro; la planificación es arrogante e inflexible. En cambio, deberías intentar cosas, «repetir» y tratar el emprendimiento como una experimentación agnóstica.
1. Es mejor arriesgar la audacia que la trivialidad. 2. Un mal plan es mejor que ningún plan. 3. Los mercados competitivos destruyen los beneficios. 4. Las ventas importan en la misma medida que el producto, no más.
si quieres crear y capturar valor perdurable, no crees un negocio indiferenciado de productos básicos.
Los emprendedores siempre están dispuestos a subestimar la magnitud de la competencia; sin embargo, ése es el mayor error que una startup
Los monopolistas, en cambio, disfrazan su monopolio clasificando su mercado como la unión de varios grandes mercados.
beneficios. Imagina que estás dirigiendo uno de esos restaurantes en Mountain View. No eres tan diferente de las decenas de competidores, de modo que tienes que trabajar duro para sobrevivir.
El ecosistema competitivo aboca a la gente a la crueldad o a la muerte.
Un monopolio como Google es diferente. Dado que no tiene que preocuparse por competir con nadie, tiene una libertad más amplia para preocuparse por sus trabajadores, sus productos y su impacto en el mundo.
En los negocios, el dinero o es algo importante o lo es todo.
los clientes estaban felices de tener finalmente la oportunidad de pagar precios altos para comprar un teléfono inteligente que realmente funciona.
Si la tendencia de los negocios monopolistas fuera detener el progreso, serían peligrosos y haríamos bien en oponernos a ellos.
Los monopolios impulsan el progreso porque la promesa de años, e incluso décadas, de beneficios monopolísticos ofrece un poderoso incentivo para innovar.
Si tu industria está en un equilibrio competitivo, la muerte de tu empresa no le importará al resto del mundo;
El monopolio es la condición de todo negocio de éxito.
Monopolio creativo significa nuevos productos que benefician a todo el mundo y beneficios sostenibles para el creador. Competencia significa que no hay beneficios para nadie, que no hay ninguna diferenciación significativa, y una lucha por sobrevivir.
Por encima de todo, la competencia es una ideología —la ideología— que impregna nuestra sociedad y distorsiona nuestro pensamiento.
cuanto más compitamos, menos ganaremos.
En medio de todo el drama humano, la gente pierde de vista lo que importa y se centra en cambio en sus rivales.
Si eres menos sensible a la cuestión social, eres menos propenso a hacer las mismas cosas que hacen los demás.
Ganar es mejor que perder, pero todo el mundo pierde cuando la guerra no merece la pena.
La teoría de Ellison era que es bueno tener un enemigo, siempre y cuando este sea lo suficientemente grande para que parezca amenazador (y por tanto motivador para los empleados), pero no tan grande como para amenazar realmente a tu compañía.
Si no puedes vencer a tu rival, tal vez sea mejor fusionarse.
A veces tienes que luchar. Y si es el caso, debes luchar y ganar. No hay término medio;
Evitar la competencia te proporcionará un monopolio, pero incluso un monopolio es sólo un gran negocio si consigue perdurar en el futuro.
Simple y llanamente, el valor de una empresa hoy es la suma de todo el dinero que generará en el futuro.
La mayor parte del valor de una empresa tecnológica se generará a diez o quince años vista.
Para que una compañía sea valiosa debe crecer y permanecer, pero muchos emprendedores sólo se centran en el crecimiento a corto plazo.
Todos los monopolios son únicos, pero normalmente comparten algún tipo de combinación de las siguientes características: tecnología propia, efectos de red, economías de escala, y una marca.
Una buena regla general es que la tecnología propia debe ser al menos diez veces mejor que la de su competidor más cercano en alguna faceta importante para conseguir una verdadera ventaja monopolística. Cualquier cosa de menor magnitud probablemente sería percibida como una mejora marginal y difícil de vender, especialmente en un mercado ya saturado.
El modo más claro para conseguir una mejora diez veces mayor es inventar algo completamente nuevo.
Los efectos de red hacen del producto un producto más útil a medida que más gente lo utiliza.
los mercados iniciales son tan pequeños que ni siquiera parecen oportunidades de negocio.
Una buena startup debería tener el potencial de la gran escala integrado en su primer diseño.
Twitter ya tiene más de 250 millones de usuarios. No necesita añadir muchas más características personalizadas para conseguir más, y no existe una razón inherente por la que deba dejar de crecer en el futuro.
Pero la gran pregunta es qué productos creará en verdad Yahoo! Cuando Steve Jobs volvió a Apple, no se limitó a hacer de Apple un sitio atractivo en el que trabajar; creó una serie de líneas de producto para centrarse en oportunidades que multiplicaran por diez las mejoras. Ninguna compañía de tecnología puede construirse sólo sobre una marca.
La marca, la escala, los efectos de red y la tecnología combinados de algún modo definen un monopolio; pero para que estos factores funcionen, necesitas elegir cuidadosamente tu mercado y crecer deliberadamente.
Fue mucho más fácil llegar a unos cuantos miles de personas que realmente necesitaban nuestro producto que intentar competir por la atención de millones de individuos desperdigados.
El mercado objetivo perfecto para una startup es un pequeño grupo homogéneo de personas abastecidas por pocos o ningún competidor.
Las compañías más exitosas hacen de la progresión —primero dominar un nicho específico y luego escalar mercados adyacentes— una parte clave de su narrativa fundacional.
Si piensas en ti como un insurgente luchando contra fuerzas oscuras, es fácil que acabes indebidamente obsesionado con los obstáculos del camino.
Pero si realmente quieres hacer algo nuevo, el acto de creación es mucho más importante que el hecho de que a las viejas industrias pueda no gustarles lo que crees.
Cuando diseñes un plan para expandirte a mercados adyacentes, no seas disruptivo: evita la competencia todo lo posible.
Es mucho mejor ser el último; es decir, hacer el último gran desarrollo en un mercado específico y disfrutar años o incluso décadas de los beneficios del monopolio. El modo de hacerlo es dominar un pequeño nicho y expandirte a partir de ahí hacia tu ambiciosa visión a largo plazo.
para tener éxito «debes estudiar la jugada final antes que cualquier otra cosa».
En enero de 2013, Jack Dorsey, fundador de Twitter y Square, tuiteó a dos millones de seguidores: «El éxito nunca es accidental».
«Los hombres frívolos creen en la suerte, creen en las circunstancias. (…) Los hombres fuertes creen en la causa y el efecto».