Zoé Valdés's Blog, page 3099
April 28, 2011
El juicio del pintor Agustín Bejarano será el 18 de julio.
¡Sí, Libia! Por Paquito D'Rivera.
—
Por Paquito D'Rivera
—
Hace años, Willy Chirino puso de moda una guaracha que el estribillo decia: "Si se pone una mini, ¡castígala!, si se pone un bikini ¡castígala!". La canción trataba sobre un tipo billetudo cuya mujer era media ligera de cascos, y el hombre, cada vez que ella hacía de las suyas, la castigaba regalándole una mansión, un coche deportivo último modelo o unas vacaciones con sus amigas en la Bahamas.
Bueno, pues parece que al gobierno americano, o se ha tomado demasiado en serio la parodia de Chirino, o alguien mas los habrá convencido de aplicar tan peculiar concepto disciplinario a los más crueles y peligrosos dictadores de este convulso mundo nuestro. En Febrero del 2008, en un gesto amistoso y conciliador, los gringos mandaron la Filarmónica de Nueva York a un concierto de gala en Corea del Norte. Naturalmente, el despótico Kim Jon-Il ni se molesto en asistir, y a modo de respuesta, se dedicó a incrementar aún más su amenazante arsenal atómico. Dos años más tarde, en Cuba sucedían, entre otras atrocidades, la condena a 25 años de prisión al médico pacifista afrocubano Dr. Oscar Elías Biscet– fiel seguidor de las ideas de Martin Luther King–, la muerte en huelga de hambre de Orlando Zapata Tamayo, los maltratos físicos y mentales a su madre Reyna Luisa y a las abnegadas Damas de Blanco, el encarcelamiento de cientos de disidentes y hasta la detención arbitraria del norteamericano Alan Gross. Acto seguido, tal pareciera como que celebrando tantos horrores, el New York City Ballet, la orquesta de Wynton Marsalis y la de Chico O'Farrill, bajo la direccion de su hijo Arturo, viajan a Cuba cordialmente invitados por el Ministerio de Cultura de la dictadura más antigua (y ridícula) del planeta. –"Nuestra visita no tiene carácter político, sino estrictamente musical"–alegaron ingenuamente los visitantes–, como si en un país totalitario como Cuba, todo, absolutamente todo, no tuviera intenciones marcadamente políticas.
Los ejemplos de "agresiones amistosas" de los norteamericanos contra naciones desgobernadas por interminables tiranías han sido muchas y de colores. Del vergonzoso caso de China es mejor ni hablar, aunque también hay que reconocer que esta masiva escalada represiva por parte de la dictadura de los hermanos Castro, logró por fin que mas y mas naciones se unieran en condenar internacionalmente estas 5 décadas de abusos y arbitrariedades. Mientras tanto, el gobierno del presidente Obama, como siguiendo fielmente el estribillo de Chirino, "castiga" al represor estimulando los viajes e intercambios culturales –unilaterales, claro– entre artistas americanos y sus homónimos en (lo que queda de) la Isla en ruinas. Para el castrismo, esto se traduce básicamente en una considerable entrada extra de divisas, además de auspiciar un enorme festival cubano en la ciudad de los rascacielos que les facilita usar libremente el territorio de los Estados Unidos como una enorme nave de exposiciones donde se exhibe única y exclusivamente lo que ellos decidan. Como es de esperarse, en dicha muestra, titulada ¡Sí Cuba!, no figuran para nada las valiosas contribuciones de Celia Cruz, Cachao, Guillermo Cabrera Infante, Gloria Estefan, Zoé Valdés, Andy García, Gaston Baquero, Olga Guillot, Carlos Alberto Montaner, Bebo Valdés, y tantos otros gigantes de la cultura nacional contrarios al comunismo, y que han sido borrados sistemáticamente de los libros de historia de nuestro sufrido país natal.
De modo que siguiendo los ejemplos anteriores, en este instante en que los libios, apoyados por el mundo civilizado libran una batalla crucial en contra de Mohamar Gadaffi (o como demonios se escriba), yo propondría entonces que a través de la embajada Libia en Washington, le pidiéramos al Ministerio de Cultura del coronel beduino, que nos organizaran un festival "¡Si, Libia!", más o menos como el de Fidel, pero en vez de mambos y rumbitas, con nawbah y takambas que es como llaman a ciertos estilos musicales que practican los libios (los que aun quedan vivos, quiero decir).
Los festejos que sugiero darían inicio con una gran marcha a lomo de camellos y dromedarios, cedidos en calidad de préstamo por todos los parques zoológicos de la nación que tuvieran animales de dicha especie en sus instalaciones. Los camelleros, vestidos a la usanza del desierto, irían portando sables curvos, puñales, granadas de mano, banderas libias y estandartes verdes, pancartas antiyankees, fotos ampliadas del Hermano Líder y Guía de la Revolución, y fusiles AKG que los jinetes dispararían al aire de cuando en cuando. (El posible lanzamiento de las granadas y otros explosivos contra posibles manifestantes opuestos a la marcha, se sometería a votación democráticamente en el seno del comité del gobierno libio organizador del evento).
La cabalgata, precedida por la BPSJ (Banda Palestina de Suicidas Jubilados), y por mujeres cubiertas con velos y burkas, saldría desde Time Square hasta la explanada de la "Zona Cero", donde con la cooperación voluntaria de la Casa de las Americas, los Maceítos, la brigada Venceremos, y las representaciones diplomáticas de Venezuela, Cuba y Nicaragua, se armaría la legendaria tienda beduina del dictador…perdón, del líder. Una vez en el barrio, se haría un rezo en la mezquita que se habló de construir por allí y que tanta controversia causó entre las intolerantes familias de las victimas de aquel incidente de las torres gemelas hace ya demasiado tiempo. Al terminar los rezos, se repartirían gratuitamente pinchos morunos, cuscús con garbanzos y testículos de chivo. Así mismo se leerían pasajes del Corán y se obsequiarán ejemplares del famoso Libro Verde, autografiados por el insigne autor, padre de la revolución.
Un niñó libio, armado de su ametralladora y vistiendo una remerita del Che Guevara, develará una hermosa estatua de Benjamín Netanyahu colgando por el cuello de un olivo, en medio de la histórica plaza que antes ocuparan las torres gemelas, símbolo del capitalismo. Al final de la ceremonia, el alcalde Bloomberg leería una proclama declarando el día oficial de Trípoli en Nueva York, y como prueba de la tolerancia islámica, Louis Fahrakan, acompañado de la Banda Palestina de Suicidas Jubilados, interpretaría la versión en árabe de "Castígala", de Willy Chirino, orquestada especialmente por Robert Mugabe para la ocasión. Y ya, para cerrar con broche de oro, al grito de ¡Síiii Libiaaaa!!!, los 100 miembros de la banda palestina, accionando sus chalecos explosivos, volarían en menudos pedazos, y a nombre de la hermandad eterna entre nuestros pueblos, se quemarían 50 banderas americanas, 49 israelitas y un Cohiba….¡Allah-Akbar!
—
Paquito D'Rivera.
Abril 20-2011
—
(Amabilidad del autor).
Filed under: Arte, Cultura, Humor, Literatura, Música, Política Tagged: Cuba, Estados Unidos, Libia, Paquito D'Rivera








El adoctrinamiento castrista.
Miami City Ballet en el Teatro de Châtelet, próximamente en París. Carlos Guerra como figura principal.
Carlos Guerra tiene una historia sensacional, que me contó su tía Mayra Guerra ahora en Miami, trataré de entrevistarlo.
Cliquear encima del programa para mayor información:
Filed under: Arte, Cultura, Danza, teatro








Foto de encabezado. En el Mediterráneo, Perpignan.
Foto del escritor cubano, exiliado en México, Osvaldo Sánchez, en el Mediterráneo, Perpignan, 1986. Ya aquí estábamos planeando cómo escaparnos. Pero nos llevaban a todas partes acompañados de profesores, la mayoría castristas y comunistas. Con Osvaldo, gran amigo, hombre brillante, me sentí una de las personas más valiente y feliz del mundo. Nos enfrentamos a los que organizaban ese evento, y al embajador de Cuba, así como al Agregado Político. Finalmente todo terminó con el chantaje familiar y el regreso forzado.
Filed under: Arte, Artes Plásticas, Cultura, Política Tagged: Osvaldo Sánchez, Perpignan








Murió Orlando Bosch.
Que en paz descanse. Y el que se tiene que morir no se muere, pero ya le llegará…
En El Nuevo Herald.
Filed under: Política Tagged: Cuba, Miami, Orlando Bosch








April 27, 2011
El exilio histórico. Por Esteban Fernández.
Esteban Fernández
EL EXILIO HISTÓRICO
Yo hablo y escribo sobre el EXILIO HISTÓRICO y he caído en cuenta de que muchísimos confunden ese término. Y la culpa es mía y de los que nos referimos al Exilio Histórico en una forma abstracta, sin aclarar perfectamente lo que conlleva ser y haber sido un desterrado histórico. Mucha gente cree que desde que un cubano puso un pie en el extranjero durante los años 60's ya eso lo convierte de "ipso facto" en parte integral del Exilio Histórico. Tremendo error. Y fue Aldo Rosado el mes pasado quien me señaló: "Chico, tu que siempre mencionas en tus artículos al Exilio Histórico, deberías dedicar uno a aclarar ese concepto". Y por lo tanto allá va eso:
Un compatriota llegó en el año 62 y el Refugio Católico lo relocalizó inmediatamente para el Estado de Wyoming. Allá ha vivido rodeado de nieve y de venados, nunca volvió ni de visita a Miami, dándole de lado o desconociendo a todas las actividades anticastristas cubanas. Puede ser que entre nevada y nevada, entre ciervos y alces, recuerde y añore a Cuba. No lo dudo, pero no es parte del Exilio Histórico.
Es sumamente fácil hacerle un examen- un test se llama aquí- a un cubano que esté en los Estados Unidos o en cualquier otro país, exiliado desde hace medio siglo. Es tan sencillo como preguntarle: "¿Tu sabes quien fue el doctor Orlando Bosch?" Porque es imposible haber sido parte de la lucha y desconocer la labor titánica realizada por este patriótico médico.
El que no sepa quien fue Jorge Mas Canosa ni nunca escuchó uno de sus brillantes discursos, ni se emocionó con las palabras de Gustavo Marín el líder de Abdala, yo les garantizo que nunca fue parte del Exilio Histórico.
Por ejemplo, aquí en Los Ángeles existe el periódico 20 de Mayo, donde yo escribo desde hace más de 40 años. Si usted se encuentra un cubano que ha vivido en esta ciudad desde los inicios del destierro y no tiene ni la más ligera idea de la existencia del 20 de Mayo, yo les aseguro a ustedes que ese compatriota no pertenece al Exilio Histórico.
Y con esto nadie se confunda. No quiere decir que hay que ser un Guillermo Novo o un Luis Crespo. No, no hay que ser un combatiente como él que le tiró un bazucazo a la ONU cuando estaba hablando el Che Guevara, ni haber sido un Mimo Gutiérrez con el MIRR montado en una avioneta quemando cañaverales en la isla. Nada de eso.
Simplemente es necesario haber sido un INTERESADO en la causa cubana, hablar de Cuba, defender públicamente la libertad de la patria, haber leído, haber cooperado económicamente a la lucha.
Todo -y ese TODO incluye a muchos- el que ha vivido de espaldas a la gestión libertadora NO ES, NI HA SIDO NUNCA parte del exilio histórico. Había un cubano llamado Andrés Nazario Sargen, dirigente de Alpha 66, que se pasó tres cuartas partes de su vida recorriendo todos los parajes donde existieran núcleos de la diáspora irradiando esperanzas. Alguien puede decirme que le gustaba o no Nazario, pero el que no sabe quien fue este señor, ESE NO ES UN EXILIADO HISTÓRICO.
Precisamente hace unos días conocí a un cubano en una fiesta particular que, según él, llegó al destierro en el año 63. Enseguida, una mala costumbre mía, llevé la conversación a la causa de Cuba. Y el tipo cuando le mencioné al Plan Torriente, al JURE de Manolo Ray, a los campamentos de Manuel Artime o el desembarco de Vicente Méndez, el hombre me miraba como si estuviera en la Luna de Valencia.
Este escrito está encaminado solamente a lograr que nadie confunda EXILIO HISTÓRICO con antigüedad o señoría en el éxodo. No hablo de una masa beligerante que llegó primero, sino de un grupo selecto de patriotas que contra viento y marea han logrado mantener la antorcha del deseo de libertad encendida por 52 años. Y de muy buena gana acepto que algunos que llegaron después y han batido el cobre contra la tiranía ¡También son parte del EXILIO HISTÓRICO!…
(Amabilidad del autor).
Filed under: Historia, Política Tagged: Castrismo, Ché Guevara, Cuba, Esteban Fernández, Exilio histórico, Gustavo Marín, Jorge Mas Canosa, Manuel Artime, Orlando Bosch








Exilio desafía al gobierno con propuesta binacional.
En Neoclubpress.
Gracias a Ah-gueeeeno.
Filed under: Economía, Política Tagged: Castrismo, Cuba, Isla de Pinos, Isla Nueva








Las pequeñas pesadillas.
LAS PEQUEÑAS PESADILLAS.
Zoé Valdés.
Entrecortadas, aparecieron anoche, mientras volaba desde Miami a París. Varios rostros entrechocaron en esas pequeñas pesadillas, que no llegan a ser las aterradoras y monumentales quimeras de los sueños, ni tampoco los sueños; son solamente breves instantes de terror del inconsciente, donde uno cree que duerme y tal vez esté muriendo, dejándose llevar por una masa gelatinosa hacia situaciones demasiado vistas, demasiado vividas, tormentosas, macabras.
El avión se caía, una mujer me arrancaba un collar, una mano deseaba estrangularme, un viejo perdía los dientes, el cielo se abría, y una ola gigantesca amenazaba con tragarme. Desperté, una de esas niñas francesas, maleducada, repesadísima, intentaba pasar por encima de mí para saltar de fila en fila sin tomar en cuenta que en el avión la mayoría de las persona pretendía dormir. La madre, como si con ella no fuera, como si la niña no fuera suya, cuando más pronunció dos veces el nombre del engendro en una especie de mugido. Vaca, eso sí. Cerré los ojos, tuve otra pesadilla con una vaca, enorme; una vaca de pedigrí me susurraba alguien dentro de la pesadilla.
Por fin pude dormirme nuevamente, entonces fue peor, soñé con un cañaveral, todo quemado, hacía un calor de mil demonios, y yo buscaba entre el herbazal y el marabú humeante a unos amigos que vivían cerca del lugar de la tragedia. Todos murieron, murmuró otra voz dentro del sueño sin que yo pudiera verle el rostro.
Parpadeo, el vecino de asiento despliega un periódico, leo de reojo que se cumplen 25 años de Chernóbyl, y al parecer hemos estado celebrándolo con "el evento" de Fukushima, que hemos estado viendo, sólo ha quedado en eso, en "evento". En evento que el viento se llevará, arrastrando consigo la desgracia, la muerte, la enfermedad. Pero ya Fukushima es el pasado, y el pasado aburre. No tiene swing.
La azafata me ofrece una bebida, le ruego que me de agua y un vaso de leche. O agua o leche, dice. ¡Qué barbaridad! Ya los aviones no son lo que eran antes, y con lo que se paga. Por fin me da un vasito de leche que trago en dos sorbos. La leche me adormila, y vuelvo a ver las calles de Casablanca, y a Roxana, una amiga, con su pelo corto y sus dientes medio botados, aunque, se puede afirmar que es una mujer hermosa, pese al defecto de sus dientes, que lucen más bien graciosos si uno quiere ver la parte buena de la vida.
La niña francesa consigue despertarme otra vez. Me parece que ahora luce unos colmillos enormes y que los ojos le brillan en tonos esmeraldas como los de un marciano. La madre ni se molesta en llamarle la atención. Entonces advierto que la mujer extrae de su bolso una biografía del Ché en edición de bolsillo, ni siquiera puedo leer quién es el autor.
-¿Lee usted acerca del Ché? –Inquiero.
-No, compré el libro exclusivamente para que la gente se me aproxime. De este modo consigo entablar conversación enseguida con las personas, el Ché es un buen tema para ligar.
-Ah, hay veo –dije enceguecida por culpa de un bicho, una candelita que me cayó en el ojo, o sea, una de esas maripositas diminutas de la luz.
También despiertos se sufre de pesadillas en los aviones. Y la niña francesa deberá sufrir como tara toda su vida el que probablemente haya sido concebida en medio de un babardage cuyo tema central haya sido el carnicerito de La Cabaña.
Publicado en El Economista.
Filed under: Política, Viaje Tagged: American Arilines, Ernesto Ché Guevara, Miami








April 26, 2011
Habla el Dr. Oscar Elías Biscet, luego de doce años en las cárceles de Cuba. Por Jay Nordinger.
Habla el Dr. Oscar Biscet, luego de doce años en las cárceles de Cuba.
Por Jay Nordlinger
'Tengo que ir a trabajar, "dice el Dr. Óscar Elías Biscet. ¿Está familiarizado con él? Es, quizás, el activista pro democracia más importante de Cuba, un símbolo de la resistencia popular a la dictadura de Castro. ¿Ha estado descuidando su trabajo? No exactamente. Durante los últimos doce años, ha estado en prisión, sufriendo lo que los prisioneros del régimen siempre han sufrido. George W. Bush le otorgó la Medalla Presidencial de la Libertad en 2007. El destinatario no podía aceptarlo en persona, por supuesto. Pero ahora ha sido liberado de la prisión. El día tan ansiado, por tantos de nosotros, fue el 11 de marzo. Hablé con él después de tres semanas.
Biscet nació en 1961 y tiene una esposa, Elsa Morejón Hernández, y sus dos hijos, Winnie y Yan. Los hijos han estado en los Estados Unidos durante varios años, Elsa, al igual que su marido, se encuentra en Cuba. Biscet obtuvo su título en medicina interna en 1985. Unos años más tarde, comenzó en el activismo por los derechos humanos. En 1994 fue acusado de "peligrosidad", una acusación muy común. Esto significa que la persona en cuestión no se somete dócilmente al régimen dictatorial. En 1997, Biscet creó la Fundación Lawton de Derechos Humanos ("Lawton" es el nombre del barrio de La Habana en el que vivía). La organización, por supuesto, está prohibida. En 1998, se pronunció firmemente en contra del aborto, en particular el aborto en la fase terminal del embarazo. En su trabajo como médico, vio cosas horribles. Las autoridades respondieron con dureza a su protesta.
Después de haber sido detenido en varias ocasiones – 26 veces – Biscet fue arrestado en 1999 y encarcelado durante tres años. Fue puesto en libertad el 31 de octubre de 2002, y estuvo 36 días fuera de la cárcel. Durante este tiempo, trabajó en sus "principios democráticos para Cuba" y un proyecto cívico llamado "El Club de Amigos de los Derechos Humanos." Fue arrestado de nuevo el 6 de diciembre de 2002, y sufrió su calvario hasta el pasado 11 de marzo.
Me pareció algo increíble oír su voz, después de haber leido y escrito sobre él durante muchos años. Su voz era baja, grave y firme. Hablamos por teléfono, Biscet en La Habana, su interlocutor en Nueva York. Quien sirvió como traductor entre nosotros fue Aramís Pérez, del Directorio Democrático Cubano en Miami. Biscet ha sentido "una especie de ambivalencia" en las últimas semanas. Esas son sus palabras: "una especie de ambivalencia." "Estoy feliz de poder volver a casa con mi esposa, pero infeliz de ver a todo un pueblo todavía sin libertad".
En su opinión, Cuba en su conjunto es "la gran prisión", mientras que El Combinado del Este, donde él y tantos otros disidentes han estado encarcelados, es "la prisión pequeña." "Los que vivimos bajo esta dictadura vemos al mar como nuestros barrotes". Biscet también dice: "Esta hermosa isla ha sido convertida por los hermanos Castro en su patrimonio personal."
¿Por qué, en su opinión, el gobierno decide ponerlo en libertad? "Debido a la crisis económica, unida a la crisis social y moral. El gobierno ofrece falsas expectativas de cambio democrático. Lo hacen para que los países libres les den apoyo económico. Mi liberación es parte del esfuerzo por crear falsas expectativas." El objetivo fundamental del gobierno es "ser financiado. Quieren más dinero, y mientras empobrecen al pueblo cubano, con ese dinero, permanecen en el poder."
En las semanas previas a la liberación de Biscet, se estaba construyendo en todo el mundo un movimiento para que se le otorgase el premio Nobel de la Paz. Fue nominado por el primer ministro de Hungría, los congresistas de EE.UU., los miembros del Parlamento Europeo, y otros. ¿Tuvo este movimiento un efecto sobre el gobierno cubano y su toma de decisiones? Una vez fuera de la prisión, es menos probable que Biscet obtenga el premio. No puede decir con seguridad si el premio Nobel jugó algun papel en los cálculos del gobierno. Pero lo que él sí puede decir es lo siguiente: "Fue un error político del régimen encarcelar al Grupo de los 75″, un error que le costó al régimen en el tribunal de la opinión mundial. Los 75 activistas pro democracia son los detenidos en la ola represiva de marzo de 2003, conocida como la "Primavera de Negra." Ahora estos presos han sido liberados.
Casi todos ellos fueron desterrados a España. Esto es lo mismo que el régimen pretendía hacer con Biscet, pero se opuso tenazmente a ese destino. En lugar de ser desterrado, ha sido puesto en una especie de libertad condicional. De hecho, sigue cumpliendo su condena, solo que más allá de la prisión como tal. Que continúe o no en libertad depende de su "buena conducta". ¿Por qué se opuso tanto a ser desterrado? "Porque amo al pueblo de Cuba y quiero su libertad. Quiero que se respeten los derechos humanos fundamentales de modo que los cubanos puedan desarrollar sus talentos plenamente. Necesitan libertad para desarrollarse plenamente." Los hombres y mujeres de la fibra de Biscet siempre resisten el exilio, no importa lo terrible que sean las condiciones en el país. Se debe recordar que Solzhenitsyn no dejó la Unión Soviética voluntariamente, sino que fue expulsado, un destino que él consideraba una tragedia.
Con alguna cautela, pregunto cómo era la cárcel desde dentro. Durante años, hemos escuchado los informes de las torturas que Biscet sufrió. Él me responde muy, muy brevemente (y yo no le presiono): "Mi experiencia fue muy traumática. Me vi obligado a vivir entre criminales", es decir, entre delincuentes comunes y matones, no entre prisioneros de conciencia, como él. Y él fue víctima de tortura – "sobre todo entre 2002 y 2006." De inmediato añade: "También gané mucho en sabiduría, porque estudié mucho y me acerqué más al Dios bíblico." Biscet es un devoto cristiano. Las autoridades le permitieron una Biblia, aunque él no la podía compartir con nadie, o rezar con nadie. De haber ocurrido esto, el otro prisionero habría sido castigado y trasladado a otra celda. Biscet también dice: "Pensé en Beethoven, quien dijo: "No hay mal, por grande que éste sea, que no traiga nada bueno."
Biscet es un firme defensor de la no violencia: una lucha no violenta para el cambio político. Siempre hemos oído que sus modelos son Thoreau, Gandhi, Martin Luther King, y el Dalai Lama. ¿Es así? Sí, dice Biscet, pero hay otros, los que pueden no ser tan "universales", porque vienen de la Biblia, y "no todos aceptan la enseñanza bíblica". Cita a Moisés – "que lideró la primera revolución no violenta." Entonces, menciona a los tres jóvenes hebreos, Sadrac, Mesac y Abed-nego. "Cuando un rey trató de obligarlos a inclinarse ante un ídolo, se negaron. Ellos sabían que Dios les ayudaría -. Y aunque así no habría sido, nunca se inclinarían ante un ídolo." Durante la prisión, "los mantuve cercanos, porque son ejemplos de libertad de expresión y libertad de religión". Y ellos, por supuesto, fueron librados.
Por la Medalla Presidencial de la Libertad, Biscet no asume ningún crédito personal. "Me sentí honrado, pero no era la única persona siendo reconocida con la medalla. El pueblo estadounidense vio en mí el sufrimiento de toda la nación cubana. Y la medalla "ayudó a cambiar la forma en que el mundo pensaba acerca de Cuba." Un día, a Biscet le gustaría encontrarse con Bush y "darle las gracias por todo lo que ha hecho por la libertad de Cuba".
¿Por qué era el aborto tan importante para él, al principio de su disidencia, y por qué es importante ahora? "El deber fundamental de un médico es defender la vida." Y "la vida dura desde la concepción hasta la muerte natural". Biscet sostiene que la ciencia deja claro que un feto es "un ser humano distinto de la madre." Él considera el aborto como "un crimen contra la humanidad." Y lo vincula en un sentido más amplio a los derechos humanos en general.
¿Qué tal con el sistema cubano de salud como propuesta general? Uno de los mitos de la revolución cubana es que ha provisto la salud para todos. Este no es un mito que funciona en Biscet, quien, como médico cubano, sabe muy bien lo que en realidad sucede. ¿Qué hay con otro mito, el concerniente al fin del racismo? ¿El mito de que el régimen comunista ha sido de gran ayuda a los negros? Biscet es negro, al igual que muchos otros líderes de la oposición. Su ridiculización de este mito es inocultable. "Completamente falso", son las palabras que utiliza. "Sabemos que la dictadura cubana es antiamericana, antisemita y anti-negro." Y si a usted le gustaría saber qué piensa la dictadura de los cubanos negros, "sólo tiene que ir a las prisiones cubanas".
Es natural preguntarle a Biscet lo que piensa de un tema polémico en los Estados Unidos: las sanciones duraderas al régimen cubano, conocidas generalmente como "el embargo". Él dice que "el embargo ha ayudado al pueblo cubano, tanto política como moralmente." Desearía "que todos los países libres y civilizados boicoteen al régimen de Cuba, como lo hicieron con la Sudáfrica racista." El mundo hizo de Sudáfrica un estado paria. El embargo estadounidense debe ser levantado, dice Biscet, "cuando el embargo contra los derechos humanos del pueblo cubano", impuesto por la dictadura, "sean levantados." Considera que "los países civilizados" han dado a la dictadura "vida" y "oxígeno" durante los últimos 20 años – en otras palabras, desde el colapso de la Unión Soviética. Cuando dice "los países civilizados", ¿querrá decir Europa Occidental, que ha proporcionado mucho dinero en efectivo al régimen de La Habana? "Me refiero a los países civilizados de Europa, América Latina y América del Norte" (es decir, Canadá y México).
Recientemente, Jimmy Carter estuvo en Cuba para ver a los hermanos Castro y a otros, entre ellos algunos activistas pro democracia, Biscet incluido. Durante su estancia, Carter se refirió a Fidel Castro como un "viejo amigo." Esto, tanto para Biscet como para otros demócratas, es espantoso. "Uno puede tener ideas diferentes, y deben ser respetadas. Pero llamar amigo a un tirano, es verdaderamente horrible." Muchos en el mundo han tratado de hacer un héroe de Castro. Y "no hay que fomentar la creación de héroes falsos".
Por cierto, ¿quién está realmente a cargo de Cuba – Fidel Castro o Raúl, a quien Fidel ha puesto al frente? Biscet dice: "En nuestro país, el Partido Comunista dirige el curso de los acontecimientos y está por encima de la ley, y Fidel Castro es el secretario general del Partido Comunista". Biscet dice esto como si el dominio de Fidel debiera ser la cosa más obvia en el mundo.
Luego está la cuestión del futuro de Biscet: ¿Qué hará? Dice que su tarea inmediata es "recuperarse psíquica y físicamente" de sus doce años en la oscuridad y el infierno. "Espero estar en la mejor condición posible", para hacer el trabajo que le resulta inevitable realizar. ¿Espera ser arrestado de nuevo? "Cualquier cosa es posible", pero que trabajará sin temor. Él cree que los demócratas de la isla están unidos, aunque "vivimos bajo una dictadura totalitaria que usa todos sus recursos para tratar de destruirnos, lo que hace difícil avanzar tan rápido como nos gustaría." Y habla del peligro de modo tan natural, que recapacito en el valor de esta hora que tenemos juntos. El pueblo cubano está "esclavizado", Biscet dice, "pero aquí en Cuba, los esclavos se rebelarán," como lo han hecho en otros lugares. Se menciona a China, Irán y Libia. Y describe un gran desafío para la oposición: moldear una transición hacia la democracia sin una Plaza de Tiananmen. Sin una masacre de mano de los gobernantes, que no renunciarán al poder voluntariamente.
¿Qué espera de Los Estados Unidos de América? Él desea que se sepa lo malvado de la dictadura cubana. Y quiere solidaridad. "El pueblo estadounidense puede ayudar acercándose al pueblo cubano en nuestro sufrimiento. Aquellos que, como ustedes, viven en libertad, tienen la posibilidad de hacerlo." Sobre todo, dice, no proporcionen al régimen el "oxígeno" que necesita para sobrevivir. Él ve cómo la administración de Obama hace concesiones al régimen. Y no comprende por qué "los países civilizados y democráticos" le han de echar una mano a este tipo de personas; por qué dar oxígeno a los que han oprimido a tantos, ahora que los opresores están en la fase final.
Después de colgar con Biscet, hablé un rato con Aramís Pérez, quien había traducido. ¿Cómo le sonó Biscet? "Sereno y sosegado. Habló con tal convicción, que no le era necesario hacer hincapié en sus palabras"- todas eran convincentes. En ocasiones, uno siente que se ha encontrado con un gran hombre. Alguien que con su estatura moral, compensa en cierta medida la maldad e indiferencia humanas. Pérez y yo sentimos eso con relación a Biscet. Así sucederá con muchos otros en todo el mundo, si llegan a conocerlo.
Gracias a Alberto de la Cruz de Babalú blog.
Filed under: Política, Religión Tagged: Castrismo, Cuba, Estados Unidos, Jay Nordinger, Oscar Elías Biscet








Zoé Valdés's Blog
- Zoé Valdés's profile
- 102 followers
