Mal de amores Quotes
Mal de amores
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Ángeles Mastretta4,600 ratings, 4.13 average rating, 438 reviews
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Mal de amores Quotes
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“Niña que duermes bajo la mirada de Dios, te deseo que no la pierdas jamás, que vayas por la vida con la paciencia como tu mejor aliada, que conozcas el placer de la generosidad y la paz de los que no esperan nada, que entiendas tus pesares y sepas acompañar los ajenos. Te deseo una mirada limpia, una boca prudente, una nariz comprensiva, unos oídos incapaces de recordar la intriga, unas lágrimas precisas y atemperadas. Te deseo la fe en una vida eterna, y el sosiego que tal fe concede.
Niña, yo te deseo la locura, el valor, los anhelos, la impaciencia. Te deseo la fortuna de los amores y el delirio de la soledad. Te deseo la inteligencia y el ingenio. Te deseo una mirada curiosa, una nariz con memoria, una boca que sonría y maldiga con precisión divina, unas piernas que no envejezcan, un llanto que te devuelva la entereza. Te deseo el sentido del tiempo que tienen las estrellas, el temple de las hormigas, la duda de los templos. Te deseo la fe en los augurios, en la voz de los muertos, en la boca de los aventureros, en la paz de los hombres que olvidan su destino, en la fuerza de tus recuerdos y en el fururo como la promesa, donde cabe todo lo que aún no te sucede.”
― Mal de amores
Niña, yo te deseo la locura, el valor, los anhelos, la impaciencia. Te deseo la fortuna de los amores y el delirio de la soledad. Te deseo la inteligencia y el ingenio. Te deseo una mirada curiosa, una nariz con memoria, una boca que sonría y maldiga con precisión divina, unas piernas que no envejezcan, un llanto que te devuelva la entereza. Te deseo el sentido del tiempo que tienen las estrellas, el temple de las hormigas, la duda de los templos. Te deseo la fe en los augurios, en la voz de los muertos, en la boca de los aventureros, en la paz de los hombres que olvidan su destino, en la fuerza de tus recuerdos y en el fururo como la promesa, donde cabe todo lo que aún no te sucede.”
― Mal de amores
“–Los hombres son así desde que nacen –le comentó a su hija Emilia mientras la acomodaba en su cesta–. Quieren todo, pero no lo saben pedir.”
― Mal de amores
― Mal de amores
“De todos los riesgos que he corrido por usted, el único que no hubiera corrido nunca es el de no haberlos corrido.”
― Mal de amores
― Mal de amores
“-Envidio el modo en que lo extrañas -le dijo Zavalza una noche.
-No lo extraño -dijo Emilia-. Me duele el reconcomio.”
― Mal de amores
-No lo extraño -dijo Emilia-. Me duele el reconcomio.”
― Mal de amores
“-Niña- dijo Milagros con la solemnidad de una sacerdotisa-, yo te deseo la locura, el valor, los anhelos, la impaciencia. Te deseo la fortuna de los amores y el delirio de la soledad. Te deseo el gusto por los cometas, por el agua y los hombres. Te deseo la inteligencia y el ingenio. Te deseo una mirada curiosa, una nariz con memoria, una boca que sonría y maldiga con precisión divina, unas piernas que no envejezcan, un llanto que te devuelva la entereza. Te deseo el sentido del tiempo que tienen las estrellas, el temple de las hormigas, y la duda de los templos. Te deseo la fe en los augurios, en la voz de los muertos, en la boca de los aventureros, en la paz de los hombres que olvidan su destino, en la fuerza de tus recuerdos y el futuro como la promesa donde cabe todo lo que aún no te sucede. Amen.”
― Mal de amores
― Mal de amores
“–Ya cásate conmigo doctor, te estás haciendo viejo –le propuso.
–Tengo un hijo con otra mujer y te llevo veinte años –contestó el doctor Cuenca.
–Ya lo sé –dijo ella–, por eso te estoy apurando.”
― Mal de amores
–Tengo un hijo con otra mujer y te llevo veinte años –contestó el doctor Cuenca.
–Ya lo sé –dijo ella–, por eso te estoy apurando.”
― Mal de amores
“La lógica se negaba a estar con él para explicarle que no la estaba perdiendo para siempre, que las separaciones fortalecen, que antes había podido vivir solo, que no se moriría por más que se sintiera agonizando.”
― Mal de amores
― Mal de amores
“Hacen más por la medicina quienes buscan que quienes concluyen.”
― Mal de amores
― Mal de amores
“Era de los que andaban por la vida seguros de que la felicidad se encuentra, no se busca, de que es algo que llega siempre, inevitable y puntual cuando menos se le espera.”
― Mal de amores
― Mal de amores
“Tenía su libertad como pasión primera, y su arrojo como vicio mejor. Solía desbaratar un argumento con la luz ominosa de su mirada despreciándolo, y era lectora como pocas y erudita como ninguno.”
― Mal de amores
― Mal de amores
“Todo en el mundo de Zavalza se avenía a la sencillez de quienes saben lo que quieren y no ambicionan paraísos perdidos sino espacios de luz en los que perderse. Era de los que andan por la vida seguros de que la felicidad se encuentra, no se busca, de que es algo que llega siempre, inevitable y puntual cuando menos se le espera.”
― Mal de amores
― Mal de amores
“Esta sociedad, que hace cincuenta años soñábamos republicana, democrática, igualitaria, racional, se nos entrega ahora gobernada por minorías, autoritaria, cerrada sobre sí misma, y cosida por sus peores tradicionales coloniales.”
― Mal de amores
― Mal de amores
“Josefa le pidió que repitiera para ella el conjuro que escuchaban desde siempre las mujeres de su familia cuando nacían.
Milagros aceptó rendirse a la tradición familiar para que nada le faltara al rito que la convertiría en madrina. Puso la mano sobre la cabeza de su sobrina y recitó:
—Niña que duermes bajo la mirada de Dios, te deseo que no lo pierdas jamás, que vayas por la vida con la paciencia como tu mejor aliada, que conozcas el placer de la generosidad y la paz de los que no esperan nada, que entiendas tus pesares y sepas acompañar los ajenos. Te deseo una mirada limpia, una boca prudente, una nariz comprensiva, unos oídos incapaces de recordar la intriga, unas lágrimas precisas y atemperadas. Te deseo la fe en una vida eterna, y el sosiego que tal fe concede.”
― Mal de amores
Milagros aceptó rendirse a la tradición familiar para que nada le faltara al rito que la convertiría en madrina. Puso la mano sobre la cabeza de su sobrina y recitó:
—Niña que duermes bajo la mirada de Dios, te deseo que no lo pierdas jamás, que vayas por la vida con la paciencia como tu mejor aliada, que conozcas el placer de la generosidad y la paz de los que no esperan nada, que entiendas tus pesares y sepas acompañar los ajenos. Te deseo una mirada limpia, una boca prudente, una nariz comprensiva, unos oídos incapaces de recordar la intriga, unas lágrimas precisas y atemperadas. Te deseo la fe en una vida eterna, y el sosiego que tal fe concede.”
― Mal de amores
“Antes que seguirlo sin más hasta convertirse en una sombra, había elegido perderlo”
― Mal de amores
― Mal de amores
“Encontraba a Emilia tan perfecta y adorable como el futuro que tanto le gustaba predecir.”
― Mal de amores
― Mal de amores
