Enchantment Quotes

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Enchantment: The Art of Changing Hearts, Minds, and Actions Enchantment: The Art of Changing Hearts, Minds, and Actions by Guy Kawasaki
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Enchantment Quotes Showing 1-30 of 74
“If you don't toot your own horn, don't complain that there's no music.”
Guy Kawasaki, Enchantment: The Art of Changing Hearts, Minds, and Actions
“• People deserve a break. The stressed and unorganized person who doesn’t have the same priorities as you may be dealing with an autistic child, abusive spouse, fading parents, or cancer. Don’t judge people until you’ve walked a mile in their shoes. Give them a break instead.”
Guy Kawasaki, Enchantment: The Art of Changing Hearts, Minds, and Actions
“While we're living, we need to get over ourselves and accept others if we want to enchant people.”
Guy Kawasaki, Enchantment: The Art of Changing Hearts, Minds, and Actions
“Let yourself be enchanted in small ways.”
Guy Kawasaki, Enchantment: The Art of Changing Hearts, Minds, and Actions
“Remember that nobodies are the new somebodies.”
Guy Kawasaki, Enchantment: The Art of Changing Hearts, Minds, and Actions
tags: people
“Want to change the world? Upset the status quo? This takes more than run-of-the-mill relationships. You need to make people dream the same dream that you do.”
Guy Kawasaki, Enchantment: The Art of Changing Hearts, Minds, and Actions
“Create like a god. Command like a king. Work like a slave. —Constantine Brancusi”
Guy Kawasaki, Enchantment: The Art of Changing Hearts, Minds, and Actions
“Inertia. Guy’s law of enchantment: “People at rest will remain at rest, and people in motion will keep moving in the same direction unless an outside enchanter acts upon them.”
Guy Kawasaki, Enchantment: The Art of Changing Hearts, Minds, and Actions
“Knowledge is great. Competence is great. But the combination of both encourages people to trust you and increases your powers of enchantment. And in this world, the combination is a breath of fresh air.”
Guy Kawasaki, Enchantment: The Art of Changing Hearts, Minds, and Actions
“We should give as we would receive, cheerfully, quickly, and without hesitation; for there is no grace in a benefit that sticks to the fingers.   —Seneca”
Guy Kawasaki, Enchantment: The Art of Changing Hearts, Minds, and Actions
“La gente confía en ti cuando estás informado, eres competente, piensas en grande y creas situaciones de valor seguro.”
Guy Kawasaki, El arte de cautivar: Cómo se cambian los corazones, las mentes y las acciones
“En el mundo hay dos tipos de personas y de organizaciones: los que comen y los que dan de comer. Los que comen quieren un trozo más grande del pastel; los que dan de comer quieren hacer un pastel más grande. Los que comen piensan que si ellos ganan, tú pierdes, y que si tú ganas, ellos pierden. Los que dan de comer creen que con un pastel más grande todo el mundo podría salir ganando.”
Guy Kawasaki, El arte de cautivar: Cómo se cambian los corazones, las mentes y las acciones
“¿Estás diciendo «mentiras nobles»? El camino se vuelve resbaladizo cuando el panorama general o el bien de todos parecen justificar los medios. Sin embargo, la «mentira noble» no existe. Hay verdades y hay mentiras..., y no hay medias tintas. ¿Estás cautivando a personas ingenuas? Cautivar a los ingenuos, a personas que no tienen la capacidad de distinguir la verdad o lo que más les conviene, es inmoral. Engañar a los muy crédulos es fácil y ocurre cada día, pero no hay que confundirlo con el éxito. Además, cautivar a los ingenuos no mejora tus habilidades..., aunque te dará una falsa sensación de competencia y tal vez te convierta en un ser corrupto.”
Guy Kawasaki, El arte de cautivar: Cómo se cambian los corazones, las mentes y las acciones
“Wildfireapp.com es una buena opción para introducir concursos en Facebook.”
Guy Kawasaki, El arte de cautivar: Cómo se cambian los corazones, las mentes y las acciones
“Mari Smith es coautora de Facebook Marketing: An Hour A Day y la autora principal de The Relationship Age. Fast Company la bautizó como «La Flautista de Hamelín de Facebook». No soy experto en el uso de Facebook (al menos sé lo que no sé), de modo que le pedí que me explicara cómo se puede utilizar Facebook para cautivar a la gente. Éstas son sus técnicas preferidas: Añade una «ficha de llegada» a tu página de fans. Una ficha de llegada es una sencilla nota de bienvenida con gráficos customizados y, de manera opcional, un mensaje en forma de vídeo. El objetivo de esta ficha es incitar a los visitantes a unirse («Me gusta») a tu página de seguidores. Para los que te visitan por primera vez es un lugar para entender tu presencia en Facebook y orientarse. Cambiado a la página de FB de Enchantment. Utiliza la lista de amigos. Para gestionar mejor los amigos que tienes, crea listas de gente importante. Así podrás ver más con más facilidad tu «Canal de noticias» a diario, y con rapidez seleccionar «Me gusta» y «Comenta» para seguir alimentando estas importantes relaciones.”
Guy Kawasaki, El arte de cautivar: Cómo se cambian los corazones, las mentes y las acciones
“No más de seis frases. De los cientos de miles de correos que la gente me ha enviado, no soy capaz de recordar ninguno que fuera demasiado breve. Por el contrario, el 95 % son demasiado largos. La extensión ideal son seis frases o menos, y no debe contener nada más que la siguiente información: 1) por qué te pones en contacto (véase «peloteo» en el párrafo siguiente); 2) quién eres; 3) cuál es tu causa; 4) qué quieres; 5) por qué debería ayudarte el receptor; y 6) cuál es el paso siguiente. Peloteo. Una manera políticamente más correcta de decirlo sería «Haz los deberes», pero el resultado es el mismo. Tu primera frase debe indicar que te pones en contacto con el receptor por una buena razón y que sabes algo de esa persona. Por ejemplo, «Te sigo en Twitter y me he fijado en que a menudo cuelgas tweets sobre fotografía. Mi empresa ha desarrollado una nueva manera para ayudar a los principiantes a tomar mejores fotografías».”
Guy Kawasaki, El arte de cautivar: Cómo se cambian los corazones, las mentes y las acciones
“No aceptes cualquier tontería. Si das a la gente el beneficio de la duda y te ofenden, no lo toleres. Mi teoría es que si piensas que alguien es un cretino, la mayoría de la gente que observa en silencio la situación piensa como tú. Es lo que llamo «La teoría de Guy sobre el perfecto conocimiento de los cretinos». Si no aceptas las imbecilidades, cautivarás a los observadores silenciosos a los que les gusta que tengas el coraje de negarte. Sencillamente, no lleves tu reacción al terreno personal; critica la opinión, la idea o el punto de vista, pero no a la persona. Limita la promoción. Limita la cantidad de promoción que haces. Al contrario de lo que opinan los fascistas de los medios sociales, hay límites. Si no más de un 5 % de tus tweets, posts y actualizaciones son promocionales, todo va bien. Pero si nadie se queja, es que no estás promocionando lo suficiente. Como norma, cuanto más valor ofrezcas, más promoción puedes permitirte hacer de tu causa. Desvela tus conflictos. Lo menciono en el capítulo 3, «Cómo ganarte su confianza», pero es lo bastante importante como para repetirlo: desvela tus conflictos. Hay dos motivos para hacerlo: primero, es lo más honesto. Segundo, si has cautivado a la gente, las causas que apoyes le interesarán. Así, desvelar tus conflictos es una buena forma de marketing.”
Guy Kawasaki, El arte de cautivar: Cómo se cambian los corazones, las mentes y las acciones
“No aceptes cualquier tontería. Si das a la gente el beneficio de la duda y te ofenden, no lo toleres. Mi teoría es que si piensas que alguien es un cretino, la mayoría de la gente que observa en silencio la situación piensa como tú. Es lo que llamo «La teoría de Guy sobre el perfecto conocimiento de los cretinos». Si no aceptas las imbecilidades, cautivarás a los observadores silenciosos a los que les gusta que tengas el coraje de negarte. Sencillamente, no lleves tu reacción al terreno personal; critica la opinión, la idea o el punto de vista, pero no a la persona. Limita la”
Guy Kawasaki, El arte de cautivar: Cómo se cambian los corazones, las mentes y las acciones
“Involúcrate rápido. Cuando la gente te llama, responde con rapidez. Rapidez, en 2011, significa en menos de un día. Hay poca gente que responda rápido, y eso significa que no utilizan la tecnología como una eficaz herramienta para cautivar. Por suerte para ti, eso significa que el que responde rápido es poco común y, por lo tanto, más encantador. Atrae a muchos. No te centres en los ricos, famosos y la gente que tradicionalmente ha resultado ser influyente. Trata a todo el mundo por igual y responde a tantos como puedas. No sabes nunca quién puede convertirse en tu más valioso seguidor y amigo. Recuerda: los «don nadie» son los nuevos «alguien» en un mundo en el que las comunicaciones están abiertas de par en par.”
Guy Kawasaki, El arte de cautivar: Cómo se cambian los corazones, las mentes y las acciones
“Mientras esperábamos, le contamos a Sarah, la responsable de turno del restaurante, lo que nos había sucedido. Ella nos pidió que aguardáramos y desapareció por una puerta de personal. Al volver, llevaba unas llaves de hotel y nos dijo: «Cancelad la habitación de ese hotel. Os podéis quedar aquí, en el Animal Kingdom Lodge y os igualaremos el precio. Lo que os han hecho es inaceptable». Nuestra luna de miel podía haber quedado arruinada por culpa del miembro del personal del hotel, pero, en cambio, Sarah, en representación de Walt Disney World, la convirtió en algo asombroso. No lo hemos olvidado, y nunca nos alojamos en otro lugar.”
Guy Kawasaki, El arte de cautivar: Cómo se cambian los corazones, las mentes y las acciones
“Utiliza métodos intrínsecos «Estoy harto de oír hablar de dinero, dinero, siempre dinero. Yo sólo quiero jugar, tomar Pepsi, llevar Reebok.» Shaquille O’Neal”
Guy Kawasaki, El arte de cautivar: Cómo se cambian los corazones, las mentes y las acciones
“Tercero, acorrálala –imagina a todos los rivales que puedas arrinconados a base de alabanzas condenatorias que queden grabadas en la cabeza de los consumidores–. Por ejemplo, en 2010, Steve Jobs acorraló a Google cuando la gente se quejaba de que Apple controlaba en exceso las aplicaciones compatibles con el iPhone, comparándolo con lo abierto que era el sistema operativo del Android de Google. Lo que dijo fue: «La gente que quiera porno puede comprarse un Android». Dicho de otro modo, acorraló los teléfonos Android identificándolos como el dispositivo para la gente que quiere mirar porno. El iPhone de Apple, en cambio, era un dispositivo limpio y controlado para personas que no son pervertidas.”
Guy Kawasaki, El arte de cautivar: Cómo se cambian los corazones, las mentes y las acciones
“Sin embargo, no me planteé obtener su favor mostrándole mis serviles respetos, sino que, al cabo de un tiempo empleé este otro método. Me enteré de que en su biblioteca tenía un libro muy raro y muy curioso y le mandé una nota en la que expresaba mi deseo de examinarlo, y pidiéndole el favor de tomarlo prestado unos cuantos días. Me lo mandó de inmediato, y se lo devolví al cabo de una semana agradeciéndole con vehemencia aquel gran favor. La siguiente ocasión en que nos encontramos en la Asamblea, se dirigió a mí (algo que antes nunca había hecho) y con gran cortesía; y a partir de entonces me manifestó su disposición a servirme en cualquier ocasión, de modo que nos hicimos grandes amigos y nuestra amistad perduró hasta su muerte.[30] Según Franklin, esto ilustra una vieja máxima: «Aquel que ya te ha hecho un favor estará más dispuesto a hacerte otro que aquel al que tú mismo has complacido». Hay dos motivos que lo explican: el primero, cuando una persona te ha ayudado ya una vez, es más probable que esté dispuesto a hacerlo una segunda porque no hacerlo significaría que la primera vez se equivocó. En el supuesto de que la primera experiencia haya sido positiva, no seguir ayudándote sería admitir un error de criterio. El segundo es que el contacto anterior puede haber provocado una mejora de la relación. Así, hacer algo por ti otra vez se ha convertido en algo natural. Por supuesto, tú deberías corresponder, de modo que pueda generarse un vínculo creciente y mutuamente beneficioso. Por lo tanto, la idea de que a la gente no le gusta que le pidan favores puede ser errónea. En cualquier caso, ¿quiénes somos nosotros para llevarle la contraria a Benjamin Franklin?”
Guy Kawasaki, El arte de cautivar: Cómo se cambian los corazones, las mentes y las acciones
“Cambia las mentes a través de los datos Cuando se trata de presentaciones, Hans Rosling es el activista social, académico y versión sueca de Steve Jobs. Rosling es profesor de Salud Internacional en el Karolinska Institutet y director de la Gapminder Foundation. La Gapminder Foundation produce el Trendalyzer, una aplicación informática y una página web que transforman las estadísticas en espectaculares gráficos interactivos. El Trendalyzer ilustra el poder de usar datos para cambiar la mentalidad de las personas. (Hazte un favor y mira sus presentaciones TED –simplemente, busca «Hans Rosling» en internet.)”
Guy Kawasaki, El arte de cautivar: Cómo se cambian los corazones, las mentes y las acciones
“Atribución: Conocéis bien el material. Trabajáis realmente duro. Os estáis esforzando mucho. Seguid así. Persuasión: Debéis hacerlo bien. Debéis hacerlo mejor. Refuerzo: Yo (el profesor) estoy orgulloso de vuestro trabajo. Estoy contento del progreso que habéis hecho. Estáis haciendo un trabajo excelente. El grupo de la persuasión fue el que sacó peores resultados: ¡fue el menos convencido de los tres! El grupo reforzado fue el segundo. El de la atribución –o sea, los chicos que fueron etiquetados como eruditos y trabajadores– fue el mejor. Cambiar de marcha: la cerveza Molson hizo una campaña de anuncios por televisión titulada «Soy canadiense», en la que aparecía un joven canadiense vestido con camisa de algodón y vaqueros hablando de las excelencias de vivir en Canadá –lo típico: el hockey, los castores y los gorros de lana–. El anuncio se cerraba con un «Me llamo Joe y soy canadiense». El razonamiento de la etiqueta era: si eres canadiense tomarás cerveza Molson.”
Guy Kawasaki, El arte de cautivar: Cómo se cambian los corazones, las mentes y las acciones
“Asigna una etiqueta «Para resumir un argumento complejo en pocas palabras: no son los motivos perversos los que llevan a una conducta perversa, sino todo lo contrario: la conducta perversa, con el tiempo, genera motivaciones perversas.» Howard S. Becker”
Guy Kawasaki, El arte de cautivar: Cómo se cambian los corazones, las mentes y las acciones
“Busca el acuerdo «La diplomacia es el arte de permitir a alguien hacer la tuya.» Daniele Varè”
Guy Kawasaki, El arte de cautivar: Cómo se cambian los corazones, las mentes y las acciones
“Ilustra las cifras. En 1994, seguidores del control de armas pusieron 40.000 pares de zapatos alrededor de la Piscina Reflectante de Washington, D. C. Los zapatos representaban el número anual de víctimas por arma de fuego en Estados Unidos. En aquel momento, el Congreso de Estados Unidos se estaba planteando aprobar una ley para controlar el uso y la tenencia de armas, y los montones de zapatos fueron una manera potente y estremecedora de ilustrar el impacto de las armas en el país.[25] Cuenta historias. Los relatos de primera mano, como el Diario de Ana Frank o el libro La noche, de Elie Wiesel, transmiten el verdadero impacto y significado de los seis millones de judíos masacrados durante el Holocausto. Las historias personales son maneras potentes de hacer que los acontecimientos importantes se conviertan en reales y emotivos.”
Guy Kawasaki, El arte de cautivar: Cómo se cambian los corazones, las mentes y las acciones
“Inercia. Ley de la cautivación de Guy: «Las personas inactivas permanecerán inactivas, las personas en movimiento seguirán moviéndose en la misma dirección a menos que un cautivador externo actúe sobre ellos». Las relaciones existentes, la satisfacción con el statu quo, la pereza y el estar ocupado dificultan el cambio. Vacilación a la hora de reducir opciones. A la gente le gusta, o al menos cree que le gusta, tener la posibilidad de tomar decisiones libres y contar con la disponibilidad de un amplio abanico de opciones (excepto, quizá, cuando se trata de mermelada). En cambio, tomar una decisión tiene como resultado una reducción de las opciones, y la perspectiva de este resultado asusta a las personas. Miedo a equivocarse. La gente puede pensar que, mientras no ha elegido, todavía no se ha equivocado. Una vez ha elegido, lo ha hecho correcta o equivocadamente. El miedo a saber el resultado puede hacerlos reticentes a elegir..., aunque no elegir es, en sí mismo, una elección. Falta de modelos que seguir. Si no tenemos modelos, no tenemos una conducta para imitar, con lo que vacilamos en probar una causa nueva. Es por esto que los primeros seguidores son tan importantes, como ilustraba Derek Sivers con su vídeo de gente bailando en un campo. ¡Tu causa apesta! No hay otra manera de decirlo: puede que tú o tu causa seáis un desastre. Entonces la gente tiene razón de mostrarse reticente. Dios quiera que no sea así, pero es algo que pasa a menudo.”
Guy Kawasaki, El arte de cautivar: Cómo se cambian los corazones, las mentes y las acciones
“Presenta primero la opción grande, luego la pequeña Mi hija de ocho años me cautiva constantemente. Una de sus tácticas favoritas es pedirme que la lleve a una juguetería del barrio llamada Cheeky Monkey. El propietario de la tienda tiene productos para los padres «helicóptero» (llamados así porque dan vueltas alrededor de sus críos) que no reparan en gastos para sus pequeños tesoros. Por tanto, salir de Cheeky Monkey sin haber gastado como mínimo 20 dólares (un par de peluches pequeños) es algo así como «Misión Imposible». Cuando me niego a ir a Cheeky Monkey, mi hija vuelve a la carga con un: «Pues entonces, ¿podemos ir a la tienda de chuches a comprar caramelos?». Y yo rara vez le niego nada. (Sinceramente, no preveo decirle «No» hasta que se case... y, tal vez, ni siquiera entonces. Y, por supuesto, nunca le negaré nada si me da nietos.) En retrospectiva, no debería haber usado nunca el libro de Robert Cialdini como fuente de cuentos para acostarla, porque ahora domina como nadie lo que ella llama «el principio del contraste». Significa que después de una petición grande, como ir a comprar un juguete a Cheeky Monkey Toys, su petición de caramelos, por contraste, parece insignificante, por lo que no puedo negarme a ella. Pero, como dicen en publicidad: «¡Espere, hay más!». Si ahora puedes conseguir que la gente te conceda pequeños favores, es más posible que accedan a hacerte favores más grandes en el futuro. En 1966, J. L. Freedman y S. C. Fraser hicieron un experimento en el que pedían permiso a los participantes para entrar en sus casas a catalogar los productos caseros que usaban. Sólo accedió el 28 % de ellos. Cuando les pidieron a los participantes que respondieran a unas cuantas preguntas de una encuesta y luego volvían a llamarlos al cabo de tres días, para pedirles poder entrar en sus casas, el 53 % accedió. Poniendo «un pie en la puerta» mediante la pequeña petición de responder a la encuesta, los investigadores duplicaron su tasa de éxito.[20] Alguien debería hacer un estudio que combine ambas técnicas: una opción grande, luego una pequeña para poner el pie en la puerta y después una grande una vez dentro de la casa. Es decir, primero los investigadores les pedían a los participantes un favor grande, como entrar en sus casas. Segundo, cuando la mayoría se negaba, les pedían un pequeño favor: «¿Y si sólo le pido que conteste a unas cuantas preguntas de una encuesta?». Finalmente, al cabo de tres días y teniendo ya el pie en la puerta, les volvían a pedir a los que habían respondido a la encuesta si podían entrar en sus casas. Sólo espero que mi hija no aprenda nunca el matiz de poner el pie en la puerta.”
Guy Kawasaki, El arte de cautivar: Cómo se cambian los corazones, las mentes y las acciones

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