More on this book
Community
Kindle Notes & Highlights
Imaginen mi sorpresa —mejor dicho, mi consternación— cuando, sin moverse de su retiro, Bartleby, con una voz particularmente suave pero firme, contestó: «Preferiría no hacerlo».
—Prefiero no hacerlo.
la caridad funciona a menudo como un principio infinitamente sabio y prudente; una garantía grande para el que la posee.
El hombre ha cometido asesinatos por simples celos, por simple ira, por simple odio, por simple egoísmo o por simple orgullo espiritual; pero no hay hombre del que yo haya oído hablar, que haya cometido nunca un perverso homicidio por simple y tierna caridad.
a menudo sucede que el contacto constante con mentes intolerantes agota finalmente las mejores determinaciones de los más generosos.