Para cuando leas esto estarás muerta.
Me imagino en este momento tu risa nerviosa y tu mirada de animal asustado, buscando a tu alrededor alguna respuesta, algo que te libere de la opresión que ahora sientes en el pecho. Claro, si estás leyendo esto es imposible que estés muerta, ¿no? Tiene que ser una broma —una de esas atrozmente pesadas— pero de las que uno se ríe largamente cuando las descubre.
Lamentablemente, el único que reirá acá soy yo… Y...
Published on October 16, 2013 05:00