Los amorosos Quotes
Los amorosos: Cartas a Chepita
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Jaime Sabines2,268 ratings, 4.29 average rating, 258 reviews
Los amorosos Quotes
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“Te quiero, sí, te quiero: pero a medida de que te quiero se me van haciendo innecesarias las palabras.”
― Los amorosos: Cartas a Chepita
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“A veces te aborrezco tanto, casi tanto como te quiero.”
― Los amorosos: Cartas a Chepita
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“Vendríamos de la mano, a media calle, solos, y no diríamos nada. Que lo diga la noche. Que digan que te quiero las estrellas, los rumores lejanos, la distancia.”
― Los amorosos: Cartas a Chepita
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“Ojalá te encuentre por aquí, en alguna calle del sueño. Es una gran alegría ésta de aprisionarte con mis párpados al dormir.”
― Los amorosos: Cartas a Chepita
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“Déjame que investigue las últimas células de tu cuerpo, los últimos rincones de tu alma; déjame que vuele tus secretos, que aclare tus misterios, que realice tus milagros; consérvate, presérvate, angústiate; sufre el amor; espérame...”
― Los amorosos: Cartas a Chepita
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“Te quiero a las diez de la mañana, y a las once, y a las doce del día. Te quiero con toda mi alma y con todo mi cuerpo, a veces, en las tardes de lluvia. Pero a las dos de la tarde, o a las tres, cuando me pongo a pensar en nosotros dos, y tú piensas en la comida o en el trabajo diario, o en las diversiones que no tienes, me pongo a odiarte sordamente, con la mitad del odio que guardo para mí.
Luego vuelvo a quererte, cuando nos acostamos y siento que estás hecha para mí, que de algún modo me lo dicen tu rodilla y tu vientre, que mis manos me convencen de ello, y que no hay otro lugar en donde yo me venga, a donde yo vaya, mejor que tu cuerpo. Tú vienes toda entera a mi encuentro, y los dos desaparecemos un instante, nos metemos en la boca de Dios, hasta que yo te digo que tengo hambre o sueño.
Todos los días te quiero y te odio irremediablemente. Y hay días también, hay horas, en que no te conozco, en que me eres ajena como la mujer de otro. Me preocupan los hombres, me preocupo yo, me distraen mis penas. Es probable que no piense en ti durante mucho tiempo.
Ya ves. ¿Quién podría quererte menos que yo, amor mío?”
― Los amorosos: Cartas a Chepita
Luego vuelvo a quererte, cuando nos acostamos y siento que estás hecha para mí, que de algún modo me lo dicen tu rodilla y tu vientre, que mis manos me convencen de ello, y que no hay otro lugar en donde yo me venga, a donde yo vaya, mejor que tu cuerpo. Tú vienes toda entera a mi encuentro, y los dos desaparecemos un instante, nos metemos en la boca de Dios, hasta que yo te digo que tengo hambre o sueño.
Todos los días te quiero y te odio irremediablemente. Y hay días también, hay horas, en que no te conozco, en que me eres ajena como la mujer de otro. Me preocupan los hombres, me preocupo yo, me distraen mis penas. Es probable que no piense en ti durante mucho tiempo.
Ya ves. ¿Quién podría quererte menos que yo, amor mío?”
― Los amorosos: Cartas a Chepita
“Mi problema sigue siendo el Ser, esa cosa difícil, a veces intuida, pero siempre inefable; mi problema sigue siendo Yo, pero no Yo el que habla sino Yo que calla, desligado, independiente, liberado de mí mismo. Sin ti, sin mí, sin ninguno de lo que somos; un Yo inmutable y permanente.”
― Los amorosos: Cartas a Chepita
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“Tienes que oír mi amor con su voz, tocarlo en su carne, aceptarlo como es, desnudo y libre.”
― Los amorosos: Cartas a Chepita
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“Sí los amores de lejos son de... el estarse peleando por carta es el súmmmum de la estupidez.”
― Los amorosos: Cartas a Chepita
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“Yo nunca te he jurado fidelidad sexual; no podría ser; es absurdo; tu misma no la deseas. El que yo ande con otra no quiere decir que deje de andar contigo. Tú estás más allá de todo esto, linda.”
― Los amorosos: Cartas a Chepita
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“No hay lugar para el místico que soy dentro del ateo que represento. Y no es problema de Dios -hace tiempo abandoné a Dios-; es conflicto de identidad, de realidad.”
― Los amorosos: Cartas a Chepita
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“A veces se da uno cuenta, repentinamente, de que la vida es torpe y vacía, y se echa uno a reír”
― Los amorosos: Cartas a Chepita
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“Es aquí en la vida en donde tengo que encontrar remedio de la vida. Y una buena receta es el amor y el saber mirar por encima de mi hombro mis propias penas.”
― Los amorosos: Cartas a Chepita
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“Necesito una realidad, una vigencia, a ti, presente, cercana, para decir te quiero. Mi corazón se nutre de mis ojos, de mis manos, de todo lo que miro y toco. La ausencia es un engaño”
― Los amorosos: Cartas a Chepita
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“Uno es un grupo de contradicciones, intelectuales y emotivas. Solamente tú no eres una contradicción: siempre te quiero”
― Los amorosos: Cartas a Chepita
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“Guarda tus ojos; ámame; guarda tu corazón; entiérrame en él”
― Los amorosos: Cartas a Chepita
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“Me acuerdo de ti a cada instante, pero tú eres imposible y no estoy triste”
― Los amorosos: Cartas a Chepita
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“Los que se quieren más son los que no han acabado de descubrirse, los que nunca acabarán”
― Los amorosos: Cartas a Chepita
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“Acaso es triste el irse... pero sin el irse no hay volver”
― Los amorosos: Cartas a Chepita
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“¿Por qué eres tan hermosa? ¿Te acunaron en versos? ¿Leche de flor bebiste? ¿Quién te modeló sobre mi corazón, quién te tatuó sobre mis ojos?”
― Los amorosos: Cartas a Chepita
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“¿Quién te modeló sobre mi corazón, quién te tatuó sobre mis ojos?”
― Los amorosos: Cartas a Chepita
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“¿Es posible que, a estas alturas, no creas en mí? ¿O te sientas débil ante la distancia y el tiempo? Yo nunca te he jurado fidelidad sexual; no podría ser; es absurdo; tú misma no la deseas. El que yo ande con otra no quiere decir que deje de andar contigo. Tú estás más allá de todo esto, linda. Sería hacerte pequeña introducirte en estas pequeñeces. Tú no eres circunstancia ni accidente -te lo he dicho-, tú eres intimidad, esencia.”
― Los amorosos: Cartas a Chepita
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“Estar solo da sed de soledad”
― Los amorosos: Cartas a Chepita
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“La lluvia me empujó al correo. ¡Está lloviendo a cántaros! Y sobre mi corazón, a cántaros, tú.”
― Los amorosos: Cartas a Chepita
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“Perdoname también el que te quiera como a mí mismo; porque me soy infiel, porque me engaño".”
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