Los restos de la revolución Quotes

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Los restos de la revolución: Crónica desde las entrañas de una Venezuela herida Los restos de la revolución: Crónica desde las entrañas de una Venezuela herida by Catalina Lobo-Guerrero
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Los restos de la revolución Quotes Showing 1-3 of 3
“Leí varios de los propios escritos y discursos de Simón Bolívar, compilados en el Ideario político y la biografía sobre el prócer Simón Bolívar: A life, del escritor John Lynch. También leí libros y artículos de los historiadores venezolanos Germán Carrera Damas, El culto a Bolívar, Elías Pino Iturrieta, El Divino Bolívar e Inés Quintero, El Bolívar de Marx. Me ayudaron también entrevistas y conversaciones posteriores con Pino, Quintero y el historiador Rafael Arráiz Lucca. Revisé los artículos académicos de Frédérique Langue sobre la reinvención del Libertador y el paradigma heroico. Y fue fundamental una entrevista con la escritora Ana Teresa Torres y su libro La herencia de la tribu. Tanto Torres como Ascencio también aparecen en entrevistas claves en el libro de Maye Primera, La República alucinada.”
Catalina Lobo-Guerrero, Los restos de la revolución: Crónica desde las entrañas de una Venezuela herida
“Twitterzuela, la versión 2.0 del mensaje sin destino, era tierra de nadie, el drenadero nacional donde no se asumía ningún tipo de responsabilidad por lo que circulaba. En vez de ayudar a construir algún sentido compartido y fidedigno de la realidad, un mínimo de certeza sobre los hechos, era un laboratorio colectivo de mentiras que se mezclaban al mismo tiempo con cosas muy graves y muy ciertas de manera anárquica. Quizás era el mejor ejemplo de ese término que apuntaba ya hacia un futuro informativo distinto y no necesariamente mejor, donde abundaban la ansiedad y el desconcierto: la posverdad.”
Catalina Lobo-Guerrero, Los restos de la revolución: Crónica desde las entrañas de una Venezuela herida
“Diez años después de la muerte de Gómez, llegarían al poder de la única manera en que se lograba acceder a él en Venezuela: conspirando de la mano de los militares y a través de un golpe de Estado. Sucedió el 18 de octubre de 1945 y lo llamaron la “Gloriosa Revolución de Octubre”.”
Catalina Lobo-Guerrero, Los restos de la revolución: Crónica desde las entrañas de una Venezuela herida