París puede esperar Quotes

“A veces la vida te hace regalos inesperados. Aquellos días en Praga fueron uno de ellos.”
― Marisa Sicilia, París puede esperar

“A veces la vida te hace regalos inesperados.”
― Marisa Sicilia, París puede esperar

“el azar es así y a veces trae consigo consecuencias inesperadas. Inesperadas y muy afortunadas.”
― Marisa Sicilia, París puede esperar

“Cuando las madres les cuentan lo agobiadas que se sienten con la crianza de los peques, los llantos a media noche de los bebés, las rabietas de los dos años, la desesperación cuando dicen que no comen y no comen, Carmen siempre replica que eso no es nada, que se preparen para cuando sean adolescentes. Las madres se ríen —hay que reírse con Carmen—, pero ella lo dice completamente en serio.”
― Marisa Sicilia, París puede esperar

“—Feliz aniversario —dice estrechándola desde la espalda. —Felicidades también para ti. —Veinticinco años ya, Ali. Veintiocho si contamos desde que nos conocimos en aquel bar. —Media vida. —Solo media. Yo quiero una entera. —Y yo. Quiero más. Mucho más, Manu.”
― Marisa Sicilia, París puede esperar

“—Es que para qué vas a acordarte de lo malo cuando hay tanto bueno.”
― Marisa Sicilia, París puede esperar

“Y así con todo. Perdías unas cosas, ganabas otras.”
― Marisa Sicilia, París puede esperar

“Están juntos, ¿no? En esto y en todo.”
― Marisa Sicilia, París puede esperar

“Y, por primera vez después de dos semanas de confinamiento —dos semanas con la libido al mismo nivel que el IBEX o el índice Dow Jones, es decir, bajo mínimos—, se buscan el uno al otro y, cómo no, se encuentran.”
― Marisa Sicilia, París puede esperar

“Y así regresaron, sin maletas, sin viaje y cojeando. Y sin París. Pero juntos.”
― Marisa Sicilia, París puede esperar

“La imaginación los llevó a muchos sitios, esa noche y otras, pero no a París.”
― Marisa Sicilia, París puede esperar

“—Media vida. —Solo media. Yo quiero una entera. —Y yo. Quiero más. Mucho más,”
― Marisa Sicilia, París puede esperar

“el mundo ya nunca volverá a ser el de antes.”
― Marisa Sicilia, París puede esperar

“pero es que el azar es así y a veces trae consigo consecuencias inesperadas. Inesperadas y muy afortunadas.”
― Marisa Sicilia, París puede esperar

“El gato de Schrödinger.”
― Marisa Sicilia, París puede esperar

“Manuel coge un pulverizador y empieza a rociar con agua clorada los envases de los productos que ha dejado sobre la encimera. Sí, parece de locos y es lo que pensó Alicia la primera vez que lo vio, pero ya no le parece tanta locura, y hasta se queda más tranquila por que sea tan puntilloso, incluso un punto obsesivo para sus cosas.”
― Marisa Sicilia, París puede esperar

“—Con dos zanahorias, un yogur y media barra de salchichón. Mira, Alicia, yo así no puedo vivir. Si ya no quedaba chocolate y estaban a punto de acabarse las galletas.”
― Marisa Sicilia, París puede esperar

“Y no dejar de hacer planes. De las sorpresas ya se encargará la vida.”
― Marisa Sicilia, París puede esperar

“—Pero ¿y si llega la fecha y aún no se puede viajar? Están diciendo que esto puede durar meses, mientras no den con una vacuna…”
― Marisa Sicilia, París puede esperar

“Es que para qué vas a acordarte de lo malo cuando hay tanto bueno.”
― Marisa Sicilia, París puede esperar

“¿Y por qué yo y no tú? Tú eres el que domina las matemáticas. Seguro que hay alguna ecuación que lo explica: la teoría del caos o el experimento ese del gato, ¿cómo se llama? —El gato de Schrödinger. —Eso. A lo mejor estamos y no estamos en París y, como no somos los que estamos, no nos damos cuenta.”
― Marisa Sicilia, París puede esperar