Las voces del lago Quotes

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Las voces del lago Las voces del lago by Beatriz Esteban
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Las voces del lago Quotes Showing 1-7 of 7
“Mi madre fue la primera en convertirse en una casa encantada. Dentro de ella había amores muertos que aún la habitaban, y ya no sabía cómo dejarlos marchar. A veces ni siquiera quería que se fueran. No era un amor real, pero era bonito. Era cálido.”
Beatriz Esteban, Las voces del lago
“No me había dado cuenta de lo sola que me sentía hasta que necesité a alguien que me escuchara. Sólo pedía eso: unos oídos que me oyeran incluso cuando no gritaba. Unos brazos que me acogieran sin juzgarme.”
Beatriz Esteban, Las voces del lago
“Y de alguna forma sentía que pasar tanto tiempo rodeada de fantasmas me había convertido en uno. Invisible para todo el mundo menos para mí, y tan real como una ciudad en llamas, gritando mientras ardo sin que nadie me oiga porque ya no queda nadie.”
Beatriz Esteban, Las voces del lago
“Hay que mirar al dolor a los ojos para poder darle la espalda.”
Beatriz Esteban, Las voces del lago
“Porque mi padre nunca llegaría a acabarse ese libro, nunca llegaría a empezar o acabar ningún libro más, nunca me vería graduarme de la universidad, nunca conocería al amor de mi vida, nunca me llevaría de la mano al altar, nunca me esperaría con un cigarro en el porche, nunca volvería a teclear sobre su vieja máquina de escribir, no dejaría los zapatos llenos de polvo y hollín en el recibidor, nunca volvería a reírse de mis cactus, nunca más dejaría las tazas de café acumuladas en la pila, nunca volveríamos a compartir esas historias de buenas noches que me contaba cuando era niña en cada viaje en coche, nunca cambiaría la emisora de la radio, nunca volvería a darme un beso demasiado sonoro delante de demasiada gente, nunca volvería a oírle decir «estoy orgulloso de ti», nunca volvería a escuchar mi nombre de de sus labios.
Nunca volvería.
Nunca.”
Beatriz Esteban, Las voces del lago
“Ya no sabía qué fantasma me asustaba más: el que habitaba la casa o el que habitaba nuestra piel.
No sabía cuál nos mataría primero.”
Beatriz Esteban, Las voces del lago
“Solo pedía unos oídos que me oyeran incluso cuando no gritaba.”
Beatriz Esteban, Las voces del lago