Sky's the Limit Quotes

“El escepticismo de Hayman era comprensible. Cuatro años antes, el mítico director deportivo italiano Giancarlo Ferretti había anunciado la firma de un patrocinio con Sony Ericsson y empezó a fichar corredores, para después darse cuenta de que había sido víctima de un engaño (y no precisamente uno muy elaborado: Ferretti había cerrado el acuerdo directamente por e-mail con un ejecutivo de ‘Sony Ericsson’ que usaba la dirección de correo ronwestland-sonyericsson@hotmail.com).”
― Richard Moore, Sky's the Limit. Sky, el límite es el cielo.

“Sólo era una idea mía sin ningún tipo de demostración previa, pero consideraba que tenían que hacer unas 80 ó 90 carreras al año entre pista y ruta. No importaba de qué tipo. Sólo quería tenerles pensando y hablando de carreras. Y volvían a la residencia hablando de esas carreras. En especial Cav: a él le encantaba diseccionarlas. ‘¿Visteis ese ataque? ¿Visteis la caída de aquel tío?’. Para mí, era eso el aprendizaje. El año anterior sólo se habían hecho 22 ó 23 días de competición. Eso eran sólo 22 ó 23 días de aprendizaje. No era suficiente».”
― Richard Moore, Sky's the Limit. Sky, el límite es el cielo.

“En realidad, Ellingworth ya se había encontrado con Cavendish previamente, en el fin de semana de ‘carreras de entrenamiento’ del año anterior. Cavendish estaba allí como parte del equipo nacional junior. «Todo lo que recuerdo de entonces era que parecía un tonel. Tenía hechuras de sprinter, llevaba una bicicleta amarilla, pero su posición era realmente mala. No tenía madera de campeón. Pero lo que sí recuerdo es que después vino hacia mí y me dijo: ‘He disfrutado como nunca sobre la bici. ¿Puedo venir a la próxima?’».”
― Richard Moore, Sky's the Limit. Sky, el límite es el cielo.

“Aun así, Herety también explica que el entrenamiento y la competición sobre pista no podían producir por sí solos un corredor completo. Podían aportar a un ciclista habilidades a gran velocidad, orden mental y disciplina, pero no podían enseñarle la resistencia que aportan cinco o seis horas sobre el sillín bajo todo tipo de condiciones meteorológicas. «Siendo honestos, nuestros chicos también tenían que curtirse. La pista les daba las habilidades y la velocidad necesarias, pero no les hacía tipos duros. Aunque hiciesen tres entrenamientos diarios en el velódromo, todavía necesitaban el fondo de resistencia que sólo se puede conseguir con horas y horas de carretera.”
― Richard Moore, Sky's the Limit. Sky, el límite es el cielo.

“Herety profundiza en su idea del potencial que el trabajo en pista aporta a un gran corredor de ruta: «Hay habilidades que ganas corriendo en pista y que realmente no puedes desarrollar -o no tan fácilmente- en la ruta». Habla del manejo de la bici y del ‘saber estar’ en carrera, o de modo más general, del tipo de habilidades que sólo se perfeccionan en una pista con un peralte empinado dentro de un grupo a gran velocidad, sobre una bici sin frenos ni marchas. Ahí no tienes nada salvo tu propia habilidad, equilibrio y templanza para sostenerte en pie y esquivar los percances. «Si por naturaleza eres un corredor rápido de movimientos, quizás puedes salvar el déficit de habilidades que tendrías al no haber rodado en pista, pero aun así estarías limitado. Por ello, que los corredores que estuviesen con nosotros adquiriesen esas habilidades era importantísimo. Y Rod era muy buen maestro».”
― Richard Moore, Sky's the Limit. Sky, el límite es el cielo.