La edad de la ira Quotes
La edad de la ira
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Fernando J. López1,776 ratings, 3.51 average rating, 269 reviews
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La edad de la ira Quotes
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“Para follármelo furiosamente, con la convicción de que la violencia me daría algo de consuelo. No lo obtuve, pero Iván se quedó sorprendido con mi ímpetu y confundió mi rabia con pasión. Desde entonces, habremos repetido un par de veces. Llego tarde, evitamos todo tipo de conversación y nos desnudamos con una torpeza que
para él son ganas y para mí, ira. Después, como esa noche, nos arrastramos por el sofá, por la alfombra, por la cama, y lo hacemos sin alternar los roles. Él siempre pasivo, siempre víctima, siempre sumiso. En su cama soy yo quien escribe el papel y las posturas, y disfruto acercando su cabeza con una violencia calculada hasta mi sexo, como si intentara ahogarlo con él, atravesar su boca mientras su lengua me rodea voraz. A ratos, como en aquella noche, me pierdo, o me evado, no sé, aunque sienta que él sigue encima de mí, tratando de provocarme con caricias, con besos,
con mordiscos en los lugares apropiados. Así que le permito deslizarse sobre mí y trato de concentrarme otra vez en su cuerpo, en la presión de sus músculos, en la fuerza con la que luchamos —porque eso es lo que hacemos: luchar sin confesárnoslo— hasta situar al otro en la postura que más nos convenga. Al final, cuando me concentro un poco, venzo yo y lo coloco boca abajo dispuesto a penetrarlo, a pagar con él mi rabia en un acto que tiene más de venganza que de sexualidad. Iván no nota el matiz y se deja hacer hasta que nos corremos, hasta que alguien —él— gime y
alguien —yo— se tumba a un lado buscando un cigarrillo.”
― La edad de la ira
para él son ganas y para mí, ira. Después, como esa noche, nos arrastramos por el sofá, por la alfombra, por la cama, y lo hacemos sin alternar los roles. Él siempre pasivo, siempre víctima, siempre sumiso. En su cama soy yo quien escribe el papel y las posturas, y disfruto acercando su cabeza con una violencia calculada hasta mi sexo, como si intentara ahogarlo con él, atravesar su boca mientras su lengua me rodea voraz. A ratos, como en aquella noche, me pierdo, o me evado, no sé, aunque sienta que él sigue encima de mí, tratando de provocarme con caricias, con besos,
con mordiscos en los lugares apropiados. Así que le permito deslizarse sobre mí y trato de concentrarme otra vez en su cuerpo, en la presión de sus músculos, en la fuerza con la que luchamos —porque eso es lo que hacemos: luchar sin confesárnoslo— hasta situar al otro en la postura que más nos convenga. Al final, cuando me concentro un poco, venzo yo y lo coloco boca abajo dispuesto a penetrarlo, a pagar con él mi rabia en un acto que tiene más de venganza que de sexualidad. Iván no nota el matiz y se deja hacer hasta que nos corremos, hasta que alguien —él— gime y
alguien —yo— se tumba a un lado buscando un cigarrillo.”
― La edad de la ira
“Puede que todo esto no sea más que la consecuencia de una sociedad errática que ya no sabe cómo canalizar su furia”
― La edad de la ira
― La edad de la ira
“Es lo malo de tener esta edad, que todo se interpreta a la tremenda, como si no pudiéramos tener ataques de ira o de rabia sin que todo el mundo pensara que vamos a ser unos asociales o unos psicópatas”
― La edad de la ira
― La edad de la ira
“Hablamos cargados de bilis, porque hemos olvidado que entonces nosotros también creíamos que existía ese 4ever, que no había traiciones, ni vacíos, ni mentiras.”
― La edad de la ira
― La edad de la ira
“Un sereno «se arreglará», aunque estuviese hecho polvo y sólo hubiese disfrutado de verdad en los días en que nos escapamos a la playa.”
― La edad de la ira
― La edad de la ira
“[...] no sabe que decía la verdad y que ya sé que suena exagerado y que soy muy joven y todo eso, pero a mí Sandra me parece la mujer de mi vida y tengo todo el derecho a pensarlo si me da la gana, aunque al Rayas le joda.”
― La edad de la ira
― La edad de la ira
“De afrontar cada nueva hora de clase como si jamás hubiera ocurrido nada. Como si se pudiera abrir el libro de texto por la misma página y fingir que la vida está modélicamente dividida en unidades teóricas y prácticas. Sin nada que la interrumpa. Ni que la emborrone.”
― La edad de la ira
― La edad de la ira
“Puede que estés buscando una verdad que ni siquiera existe, porque quizá esa verdad es la que vemos”
― La edad de la ira
― La edad de la ira
“La intuición no es más que eso, un presentimiento irracional, pero en ocasiones hay que escuchar su voz. Y yo no quise hacerlo.”
― La edad de la ira
― La edad de la ira
“Aquí, en el fondo, lo que se necesita no son ni pizarras digitales, ni más ordenadores, ni nada de eso, aquí lo que se necesita son psicólogos por un tubo.”
― La edad de la ira
― La edad de la ira
“Odio tener que drogarme para no pensar que todo es una mierda.”
― La edad de la ira
― La edad de la ira
“Me hace gracia el símil. Pensaba que la ley de la selva había dejado de regir en las aulas.”
― La edad de la ira
― La edad de la ira
“La bronca -gracias a las voces de ambos- es ya monumental. El ruido de las teclas, ensordecedor. Cada letra suena como si fuera una bala. Un disparo. Un maldito disparo con el que me encantaría poder mandarlo todo a la mierda de una vez. Mi padre me da un ultimátum y yo accedo a dejar de escribir. Me trago la bilis y le digo que vale, que se espere un segundo, que sólo me queda cerrar este trabajo con una línea más. Sólo una línea más.
- ¡Que dejes de provocarme, joder!
La bofetada de mi padre me para en seco. Contundente. Brutal. Como a él le gustan. Me aguanto las lágrimas -no pienso dejar que vea llorar- y, mientras me imagino el placer de estallar y devolverle el golpe, pongo el punto y final a este maldito texto.”
― La edad de la ira
- ¡Que dejes de provocarme, joder!
La bofetada de mi padre me para en seco. Contundente. Brutal. Como a él le gustan. Me aguanto las lágrimas -no pienso dejar que vea llorar- y, mientras me imagino el placer de estallar y devolverle el golpe, pongo el punto y final a este maldito texto.”
― La edad de la ira
“[...] es que la infancia es una mierda, no te enteras de nada y luego, de repente, te salta todo a la cara, como con los quince te dieran una entrada gratis para el infierno.”
― La edad de la ira
― La edad de la ira
“Así aprendes a escribir como Dios manda", dice mi padre, que cada vez que pronuncia esa palabra parece que se hubiera comprado a Dios para él solito.”
― La edad de la ira
― La edad de la ira
