Pero hay fórmulas, como «Después de cepillarme los dientes, barreré el garaje», que tienen muy pocas probabilidades de crear un hábito, porque no hay coincidencia de lugar, frecuencia o tema. Si quieres barrer el garaje todos los sábados, busca una rutina que hagas ya en casa los sábados (lo ideal sería en el garaje) y utilízala como amarre.