La escasez de mano de obra, combinada con el número relativamente bajo de mujeres negras en las colonias estadounidenses, llevó a algunos plantadores blancos a alentar, persuadir y coaccionar a mujeres blancas inmigrantes para que mantuvieran relaciones sexuales con esclavos negros con el fin de producir mano de obra. En Maryland, en el año 1664, se aprobó la primera ley antimestizaje, cuyo objetivo era restringir las relaciones sexuales entre mujeres blancas y esclavos negros.