Cuando el actor era un pesimista deprimido, los resultados fueron los más evidentes, asegura Felps: «Recuerdo que vi un video de uno de los grupos. Al principio, todos los miembros aparecen erguidos en la silla, animados y entusiasmados por afrontar esa tarea potencialmente compleja. Al final aparecen despatarrados y con la cabeza apoyada en la mesa».