La primera de estas moléculas fue un hallazgo accidental de la ciencia.[1] La dietilamida de ácido lisérgico, comúnmente conocida como LSD, fue sintetizada por Albert Hofmann en 1938, poco antes de que los físicos dividieran un átomo de uranio por primera vez. Hofmann, que trabajaba para la empresa farmacéutica suiza Sandoz, buscaba un medicamento para estimular la circulación, no un compuesto psicoactivo. De hecho, no sería hasta cinco años después, al ingerir de forma accidental una cantidad minúscula de la nueva sustancia química, cuando se dio cuenta de que había creado algo de gran poder,
...more

