deberíamos llamarnos a nosotros mismos “cultivadores de sol”. La hierba no es más que el medio que utilizamos para atrapar la energía solar.» Uno de los principios del cultivo de hierba moderno es que los granjeros deben apoyarse al máximo en la energía obtenida del sol en el presente, capturada a diario a través de la fotosíntesis, y no en la energía solar fosilizada que encierra el petróleo.