El que el desarrollo de la producción (incluyendo, por tanto, el mercado interior) se efectúe, fundamentalmente, a base de los medios de producción, parece algo paradójico y envuelve indudablemente una contradicción. Se trata, realmente, de una “producción por la producción misma”, de un aumento de la producción que no va acompañado del correspondiente aumento de consumo. Pero