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Kindle Notes & Highlights
ya que a pesar de no carecer de valor, me falta toda vocación de violencia.
estábamos al borde de un tiempo nuevo y que ese tiempo, comparable a las épocas iniciales del Islam o del Cristianismo, exigía hombres nuevos.
Tilsit
todos los hechos que pueden ocurrirle a un hombre, desde el instante de su nacimiento hasta el de su muerte, han sido prefijados por él.
toda humillación una penitencia,
No hay consuelo más hábil que el pensamiento de que hemos elegido...
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Raskolnikov.
la piedad por el hombre superior es el último pecado de Zarathustra.
Breslau
David Jer...
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Albert Soergel,
Whitman.
Whitman celebra el universo de un modo previo, general, casi indiferente; Jerusalem se alegra de c...
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Tse Yang, pintor de tigres,
Tse Yang, pintor de tigres
Arde Mundo. Qin Shi Huang lo manda. Ardan libros, como
ardieron los hombres en el campo de batalla. La paz es la
muerte. La paz son los buitres y el muro. La paz son los miles,
llevando la roca que levanta la barrera que mantiene lejos al
bárbaro Mongol. Arde mundo, arde. Tse Yang no se preocupa.
En las montañas y la niebla, dedica su vida a su arte único.
Los bosques rayados del bambú albergan al tigre que busca
su ojo y su mano, ese que caza y mata y prolifera sigiloso.
Extiende día tras día un papiro sobre el suelo de una choza y
el pincel traza laberintos de negro y amarillo sobre el fondo blanco.
Los hombres buscan siempre un pensamiento y una obra, y
Tse Yang busca al tigre que dibuja mientras medra el pelo en su
cabeza y el tiempo aja su piel. Puede caerse el muro, pueden
morir a miles los hombres, nada puede acabar con los tigres que
nacen, uno tras otro, para traer la muerte a bestias y a hombres
sobre estas laderas eternas. Nada detiene la concentrada maestría
del pintor de tigres
soliloquio
Shylock.
no hay cosa en el mundo que no sea germen de un Infierno posible;
había transformado en el símbolo de una detestada zona de mi alma.
Yo agonicé con él, yo morí con él, yo de algún modo me he perdido con él; por eso, fui implacable.
desventura
No hay hombre que no aspire a la plenitud, es decir a la suma de experiencias de que un hombre es capaz;
Friedrich
batalla de El Alamein,
satisface la derrota, porque secretamente me sé culpable y sólo puede redimirme el castigo.
Me satisface la derrota, porque es un fin y yo estoy muy cansado.
porque está innumerablemente unida a todos los hechos que son, que fueron, que serán, porque censurar o deplorar un solo he...
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no hay debate de carácter abstracto que no sea un momento de la polémica de Aristóteles y Platón; a
Arminio,
las legiones de Varo,
Christoph zur Linde,
Hitler creyó luchar por un país, pero luchó por todos, aun por aquellos que agredió y detestó. No importa que su yo lo ignorara; lo sabían su sangre, su voluntad. El mundo se moría de judaísmo y de esa enfermedad del judaísmo, que es la fe de Jesús; nosotros le enseñamos la violencia y la fe de la espada.
Muchas cosas hay que destruir para edificar el nuevo orden; ahora sabemos que Alemania era una de esas cosas.
hemos dado la suerte de nuestro querido país. Que otros maldigan y otros lloren; a mí me regocija que nuestro don sea orbicular y perfecto.
Averroes,
Benraist
Ave...
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asceta persa Ghazali,
la divinidad sólo conoce las leyes generales del universo, lo concerniente a las especies, no al individuo.
fresca y honda casa que lo rodeaba.
En el fondo de la siesta se enronquecían amorosas palomas;
Guadalquivir
ulemas
Alcorán
siríaco
libro tercero de la Retórica;
Alejandro de Afrodisia,
nestoriano
Abensida.
almuédano;
salmodiaba
