El idioma, ya lo he comentado alguna vez, es un asombroso desván que guarda la memoria de los sucesos que dejaron huella en las gentes. Y a veces mucho más, a veces las palabras son flechas lanzadas hacia el futuro, dardos que siguen su camino a la espera de una diana en la que clavarse. No estaría nada mal que ese fuera el caso de la expresión que os traigo hoy, porque está claro que nos hace falta que se arme una gorda que se lleve por delante a tanto hideputa como anda suelto por la política de este país. Pero al grano, digo a la expresión: ¿sabéis de dónde viene eso de «armarse la gorda»?
Published on May 07, 2014 22:54