PRESENTACIÓN DE LA MIRADA HÍBRIDA
Presentando el poemario bilingüe «La mirada híbrida» en Cervià de les Garrigues con motivo de los actos celebrados durante el día del libro.
He querido volcar en este poemario todas las reflexiones, todos los pensamientos y las emociones que me han ido invadiendo en los últimos tiempos. Cierto que contiene algunos poemas escritos hace ya mucho tiempo, aunque no he fechado ninguno, porque no son precisamente las fechas lo que me interesa ahora mismo. Lo importante son los instantes, los momentos y por eso mismo, aparece bajo el título de “Instantes” la primera parte de “La mirada híbrida”. Mientras que la segunda parte la he titulado “Camino” y contiene un conjunto de poemas inspirados en el camino de los siete sentidos de la escultora Marta Pruna, un camino visitable, situado en la población catalana de Cervià de Les Garrigues. Un camino que yo recorro casi diariamente. De aquí también la elección de la fotografía de la portada, una escultura de Marta Pruna, que ella daba por fallida. Se le rompió la piedra mientras trabajaba en ella, en su taller. Estas cosas pasan en el transcurso de la creación, y con todo, cuando la vi, pensé que esa escultura conseguía expresar exactamente, en una sola imagen, todo lo que yo estaba intentando abocar en mis versos, el interior y el exterior, los contrastes, la mixtura de la vida misma, las diferencias y las similitudes, esa mirada híbrida que busca asimilarlo todo, entenderlo todo.
Hay muchas miradas en los versos que componen este poemario prologado por el poeta Jesús María Villafranca, miradas que buscan más allá del género, de las diferencias, de la lengua… Por eso mismo es un poemario bilingüe, escrito en castellano y en catalán. Algunos poemas los pensé primero en castellano y después los traduje al catalán. Y al revés. De hecho, solo hay un poema donde aparece un auténtico intento de mezclar una lengua con otra. El primero. Es muy sencillo. Quizá tendría que haberme atrevido más a realizar una verdadera mezcla de una y otra lengua…
Volviendo a las miradas. Hay tantas miradas como palabras en este poemario, palabras que intentan sobrepasar todas las fronteras, aquellas fronteras que intentan limitarnos, controlarnos. Fronteras que hemos de intentar superar, destruirlas, con nuestras miradas y palabras híbridas, enriquecidas a lo largo de los siglos por las diferentes culturas que habitan el mundo.
Hay mucha reivindicación en mis versos. Hay reivindicación feminista, hay algo de erotismo, crítica social, inquietudes medio ambientales… Yo siempre escribo sobre aquello que me inquieta mucho.
Hablo sobre todo, en el poemario, de miradas, de palabras o pensamientos, como también hablo de emociones que intento esconder entre metáforas, dado mi carácter introvertido. Realmente es contradictoria la pulsión que puedo llegar a sentir entre la necesidad de evadirme de las miradas de los otros precisamente y al mismo tiempo, la imperiosa necesidad de compartir esa misma mirada, pensamientos que en el fondo están tan envueltos de emociones. Por eso mismo los he de escribir estos pensamientos, estos versos. Y de eso hablo también mucho en este libro, de la pulsión de escribir.
“La mirada híbrida” contiene además, para acabar, un breve relato escrito en prosa titulado “Dialogando con las nubes” que en cierta manera es un panfleto político, partiendo de la base de que lo que pienso ahora no es lo mismo que lo que pensaba ayer o lo que pensaré mañana. El pensamiento es en realidad algo muy volátil. De hecho deberíamos aceptar más a menudo que es así, que ha de ser así el pensamiento, flexible, híbrido, una mezcolanza, como la mezcolanza que intento hacer en este libro entre poesía, prosa y escultura, una mezcolanza la del arte, siempre necesaria para poder continuar soñando y poder sanar todas nuestras heridas interiores.


