NUNCA SE LO HE CONTADO A NADIE
Olivia
Madrid, 20 de marzo de 2020 Cuando abro los ojos, la sala está apenas iluminada por la luz de las farolas. Fuera es de noche y no hay ni una sola bombilla encendida dentro del piso.
Noto el cuello entumecido y tengo muchas ganas de hacer pis, pero no me atrevo a moverme. El leve ronquido de Loren, que se ha quedado atrapado debajo de mí cuando me he echado a llorar, me hace sonreír. Si al final resultará que Conchi tenía razón y es más bueno...
Published on December 11, 2020 00:31