French Cancán, una cierta idea del mecenazgo.

FRENCH CANCÁN, UNA CIERTA IDEA DEL MECENAZGO.


Hace poco vi la versión (de una hora y cuarenta) en Blue-Ray que recién ha salido editada y limpiada de French Cancán (1954), una película de Jean Renoir, el hijo del célebre pintor Auguste Renoir, con las actuaciones estelarísimas de Jean Gabin, María Félix, Françoise Arnoul (Nini), Gianni Expósito, y un elenco de primera. La mayoría de ellos repetía con el cineasta, por ejemplo, la madre de Nini, Madame Olympe, fue interpretada por Valentine Tessier, quien había hecho de Madame Bovary, en 1933, bajo la dirección del mismo cineasta. Edith Piaf canta en French Cancán, y un jovencísimo Michel Picouly nos regala varias apariciones chaplinescas.


Jean Gabin llegó a la película propuesto en una segunda opción, lo que no le gustó del todo, ya que la primera alternativa en la que pensó Renoir fue Charles Boyer, con el que Gabin no se llevaba, y le disgustó que sólo se hubiera pensado en él en caso de que Boyer fallara. Fue una suerte que Boyer no aceptara la película, porque aquí nos enfrentamos ante un estupendo Jean Gabin, ¿cuándo dejó de estarlo?, guapísimo, divertido, y haciendo de un personaje muy acorde con su edad, lo que no siempre le sucedía.


María Félix, bellísima, muy cómica, y de una gran allure, resultó ser un primor en todas las escenas en las que apareció, y por muy comedida que intentara desdibujarse su gran belleza se lo impedía. Aunque ella comentaba siempre que le preguntaron por esta película, que "había trabajado en la peor película de Jean Renoir", lo que desde luego no es verdad, y tampoco podríamos imaginar que ella pensara realmente de ese modo. Lo cierto es que sus compañeros, sobre todo Françoise Arnoul, no quedaron muy satisfechos con sus poses de "emperadora", de Doña, porque no sólo se mantenía distante, encerrada en su camerino, además respondía de forma agresiva y hasta Arnoul y ella tuvieron un fuerte altercado físico. María Félix, pese a lo que haya dicho, se esforzó enormemente para esta película, en la que se ve regia, extraordinariamente hermosa, lo mismo vestida que medio desnuda; se cuenta que para conseguir un cuerpo ideal se hizo extraer quirúrgicamente dos costillas, lo que la afinó considerablemente.


French Cancan cuenta la historia de un empresario, Henri Danglard (Jean Gabin), director primero del teatro de varietés Le Paravent Chinois y luego del Moulin Rouge. Y en medio de todo ese ambiente aventurero, es la historia de una crisis personal, en la que el empresario artístico, un auténtico empresario que defiende a los artistas y al arte primero que todo, lo pierde todo, se encuentra de buenas a primeras en la ruina absoluta, y no puede terminar lo que él considera que sería su gran obra: Le Moulin Rouge.


Pero para salvarlo está Nini, la joven lavandera de extracción humilde, que se debate entre el amor egoísta y celoso de su novio panadero, el amor idealizado de un desconocido que resultará ser un príncipe riquísimo, y el amor inestable de un hombre mucho mayor que ella, el que la introduce en el arte, el mismísimo Danglard.


Jean Renoir cuidaba extremadamente cada plano, cada imagen, cada color, siendo el hijo fiel del talento de su padre. En esta película el vestuario es una joya, y el decorado un tesoro. Pero lo que más cuidaba era a los personajes femeninos, y los atendía esmeradamente poniéndolos siempre al borde del abismo, en la incertidumbre, entre tres hombres, formando de este modo una figura geométrica donde la punta decisiva era la de la mujer. De este modo es Nini quien salva a Danglard de la ruina, además de que hace posible que el Moulin Rouge exista. ¿Cómo lo logra? A través de una peripecia romántica con el príncipe, el personaje interpretado por el poeta y actor Gianni Expósito, quien por cierto murió muy joven. Pero antes de esa peripecia romántica, tan beneficiosa desde el punto de vista económico, Nini ha entregado su virginidad a quien –según el guión- mejor la merecía, al obrero, para luego pasar a una etapa de aprendizaje pasional con Jean Gabin, y caer en esa provechosa noche de locuras con el príncipe, y después entregarse definitivamente al arte, al baile.


Sin duda alguna French Cancán es una de las mejores películas del cine mundial, en la que seguramente se inspiraron otros realizadores a la hora de tratar el tema del arte, y de la prosperidad económica que emana del mismo y el mecenazgo que contribuye a ello, todo eso en entero beneficio de la cultura, y de la humanidad.


Zoé Valdés.


Publicado en El Economista.


Dedicado a Miriam Gómez.



Filed under: Arte, Cine, Cultura Tagged: Charles Boyer, Françoise Arnoul, French Cancan, Jean Gabin, Jean Renoir, Madame Bovary, María Félix, Miriam Gómez, Moulin Rouge
 •  0 comments  •  flag
Share on Twitter
Published on August 17, 2011 05:51
No comments have been added yet.


Zoé Valdés's Blog

Zoé Valdés
Zoé Valdés isn't a Goodreads Author (yet), but they do have a blog, so here are some recent posts imported from their feed.
Follow Zoé Valdés's blog with rss.