Rodrigo Conde's Blog
July 2, 2022
Palabras en la arena
http://rodrigoconde.blogspot.com/2012...
Me generan fascinación las ciudades, con sus cientos de kilómetros de calles, ladrillos y hierro, dispuestos sobre líneas paralelas, como se ubican las palabras sobre los renglones. Hay algo de fantástico en la idea de que dentro de esas cajas blancas enormes haya miles de vidas, mundos cargados de historia y sentimientos. Los edificios son como galaxias encerradas dentro de cajas de cartón, a las que le han hecho agujeros por los que escapa la luz.
Suelo recorrer las calles por las que solía pasear con las mujeres que amé, pero ya no están los negocios a los que solíamos ir, las casas han cambiado y han cerrado los hoteles que alguna vez destrozamos. La ciudad se deshace y rehace, como las olas en la playa. Yo mismo me deshago, como si mi existencia fuera una palabra escrita en la arena…
Poco a poco mi nombre desaparecerá y vendrá otro, totalmente diferente. No importa cuál sea ese nombre, yo no soy esas letras, soy la arena detrás de las palabras. Nada quedará de nosotros cuando suba la marea, somos arena cambiando constantemente de forma.
Me generan fascinación las ciudades, con sus cientos de kilómetros de calles, ladrillos y hierro, dispuestos sobre líneas paralelas, como se ubican las palabras sobre los renglones. Hay algo de fantástico en la idea de que dentro de esas cajas blancas enormes haya miles de vidas, mundos cargados de historia y sentimientos. Los edificios son como galaxias encerradas dentro de cajas de cartón, a las que le han hecho agujeros por los que escapa la luz.
Suelo recorrer las calles por las que solía pasear con las mujeres que amé, pero ya no están los negocios a los que solíamos ir, las casas han cambiado y han cerrado los hoteles que alguna vez destrozamos. La ciudad se deshace y rehace, como las olas en la playa. Yo mismo me deshago, como si mi existencia fuera una palabra escrita en la arena…
Poco a poco mi nombre desaparecerá y vendrá otro, totalmente diferente. No importa cuál sea ese nombre, yo no soy esas letras, soy la arena detrás de las palabras. Nada quedará de nosotros cuando suba la marea, somos arena cambiando constantemente de forma.
Published on July 02, 2022 03:29
May 21, 2022
Cuerpo celestes
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Nada me sostiene sobre mis pies
Nada me levanta a la mañana o al atardecer
Nada hay, fuera de mí, manteniendo mi alma dentro del cuerpo
Ni mansiones de hierro, ni bólidos hirvientes, ni cuerpos celestes,
soy el único que respira por mí
El sol, las constelaciones, las nebulosas o galaxias
son incapaces de sentir lo que siente un hombre al quedarse sin aire
El dolor es solitario e intransmisible:
los gritos de horror de millones de personas al mismo tiempo
no pueden escucharse del otro lado del océano
Soy el dueño de mi alma,
es la única posesión que tengo y que no puede abandonarme
Mi alma es sólo mía,
que dios no venga a recriminarme lo que haga con ella
después de tanto tiempo que la ha abandonado
Hay cuerpos en llamas girando incansablemente
siglo tras siglo,
navegantes en medio de un mar de materia oscura
rozando planetas, rasgándolos con su estela
sin hallar puerto, sin nunca alcanzarlos
Yo, siempre yo, en el universo:
un fuego que nada incendia
una roca que nada choca
una flecha lanzada al espacio
sin blanco posible
Estoy cansado de ser yo…
yo quiero, yo lucho, yo sueño
ya no quiero ser yo
quiero ser nosotros
Mi alma es sólo mía,
que dios no venga a recriminarme lo que haga con ella
después de tanto tiempo que la ha abandonado
Nada me sostiene sobre mis pies
Nada me levanta a la mañana o al atardecer
Nada hay, fuera de mí, manteniendo mi alma dentro del cuerpo
Ni mansiones de hierro, ni bólidos hirvientes, ni cuerpos celestes,
soy el único que respira por mí
El sol, las constelaciones, las nebulosas o galaxias
son incapaces de sentir lo que siente un hombre al quedarse sin aire
El dolor es solitario e intransmisible:
los gritos de horror de millones de personas al mismo tiempo
no pueden escucharse del otro lado del océano
Soy el dueño de mi alma,
es la única posesión que tengo y que no puede abandonarme
Mi alma es sólo mía,
que dios no venga a recriminarme lo que haga con ella
después de tanto tiempo que la ha abandonado
Hay cuerpos en llamas girando incansablemente
siglo tras siglo,
navegantes en medio de un mar de materia oscura
rozando planetas, rasgándolos con su estela
sin hallar puerto, sin nunca alcanzarlos
Yo, siempre yo, en el universo:
un fuego que nada incendia
una roca que nada choca
una flecha lanzada al espacio
sin blanco posible
Estoy cansado de ser yo…
yo quiero, yo lucho, yo sueño
ya no quiero ser yo
quiero ser nosotros
Mi alma es sólo mía,
que dios no venga a recriminarme lo que haga con ella
después de tanto tiempo que la ha abandonado
Published on May 21, 2022 09:28
April 28, 2022
Los sueños de la serpiente
http://rodrigoconde.blogspot.com/2015...
La poesía es una serpiente antigua, nos descubrió cuando estábamos desnudos, ignorantes del poder que tenían nuestras palabras, hablábamos solo para decir lo que queríamos o lo que sucedía: este es un árbol, este es mi brazo, quiero besarte, hace frío hoy, siento dolor.
Ella nos ofreció la manzana y a cambio de ese tesoro nos mordió. La serpiente reptó por nuestros sueños, explorando el laberinto de nuestros deseos, nos hizo descubrir que queríamos al mismo tiempo la luz y la oscuridad, el ángel y la destrucción. La serpiente nos enseñó que lo que más daño nos hace es lo que más placer nos da.
Se metió en una caverna de nuestros sueños y nunca más salió, no la volvimos a ver. Solo, a veces, cuando alguien nos acaricia la espalda, nos dice: “sentí que algo se movía ahí, en tu interior”.
Tengo en mis venas el veneno de la serpiente, lo atesoro como la lengua de una ostra guarda su perla. Hay quienes quieren robármelo, usan artefactos avanzados que rastrean el veneno en mis sueños, y tratan de robarlo de lo profundo de mí como si fueran empresas petroleras. Pero nunca pueden, porque aprendí a defenderme y muero en cada sueño en que descubro que me están cavando. Acuérdense: si mueren no pueden tenerlos.
Amo el veneno de mi sangre, muchas veces está ausente y no tengo noticias de él, no puedo escribir, no tengo ninguna inspiración, ni ganas de leer tengo. Pero de vez en cuando se despierta, noto su reptar en mis brazos, se hinchan las venas, se endurecen los músculos, mi cabeza se trastoca, no puedo dormir y se me ocurren planes demenciales que diagramo con lujo de detalles. Puedo escribir o amar durante horas, como un caballo desbocado, destrozo el teclado o cuerpo que ante mí se interponga… escribiendo o amando sin parar, escribiendo o amando sin parar, escribiendo o amando sin parar. ¡Que nunca se les olvide lo que nos enseñó la serpiente, ella dijo que tenemos que vivir hasta reventar!, ¡vivir hasta reventar!
La poesía es una serpiente antigua, nos descubrió cuando estábamos desnudos, ignorantes del poder que tenían nuestras palabras, hablábamos solo para decir lo que queríamos o lo que sucedía: este es un árbol, este es mi brazo, quiero besarte, hace frío hoy, siento dolor.
Ella nos ofreció la manzana y a cambio de ese tesoro nos mordió. La serpiente reptó por nuestros sueños, explorando el laberinto de nuestros deseos, nos hizo descubrir que queríamos al mismo tiempo la luz y la oscuridad, el ángel y la destrucción. La serpiente nos enseñó que lo que más daño nos hace es lo que más placer nos da.
Se metió en una caverna de nuestros sueños y nunca más salió, no la volvimos a ver. Solo, a veces, cuando alguien nos acaricia la espalda, nos dice: “sentí que algo se movía ahí, en tu interior”.
Tengo en mis venas el veneno de la serpiente, lo atesoro como la lengua de una ostra guarda su perla. Hay quienes quieren robármelo, usan artefactos avanzados que rastrean el veneno en mis sueños, y tratan de robarlo de lo profundo de mí como si fueran empresas petroleras. Pero nunca pueden, porque aprendí a defenderme y muero en cada sueño en que descubro que me están cavando. Acuérdense: si mueren no pueden tenerlos.
Amo el veneno de mi sangre, muchas veces está ausente y no tengo noticias de él, no puedo escribir, no tengo ninguna inspiración, ni ganas de leer tengo. Pero de vez en cuando se despierta, noto su reptar en mis brazos, se hinchan las venas, se endurecen los músculos, mi cabeza se trastoca, no puedo dormir y se me ocurren planes demenciales que diagramo con lujo de detalles. Puedo escribir o amar durante horas, como un caballo desbocado, destrozo el teclado o cuerpo que ante mí se interponga… escribiendo o amando sin parar, escribiendo o amando sin parar, escribiendo o amando sin parar. ¡Que nunca se les olvide lo que nos enseñó la serpiente, ella dijo que tenemos que vivir hasta reventar!, ¡vivir hasta reventar!
Published on April 28, 2022 18:57


