Mildred Niño's Blog, page 2

October 28, 2022

La señora Torres

La señora Torres corrió el cerrojo de la puerta, la abrió con sigilo y descubrió a un mocoso, lleno de barro, hablaba tan rápido que lo único que le entendió fue: jugando, tiro libre. Sí, era yo, en ese entonces tendría ocho o nueve años, no lo recuerdo bien. Fui a reclamar mi pelota de fútbol, que había caído en su jardín minutos antes. No puedo dejarte entrar, si lo hago podrías descubrir el secreto que guardan mis flores, había respondido la señora Torres.

Entré en la casa, parecía suspendida en el tiempo, era como estar en el siglo XIX; eso sí, todo estaba limpio y ordenado, olía a una mezcla de pino y algún cítrico.

—¿Bueno y cuál es el secreto de sus flores? —dije sin rodeos.

—Si te lo digo, no podrás salir de esta casa nunca más.

Mi cuerpo se empezó a mover de un lado a otro, como si fuera un péndulo. Miré a todos lados, esperando ver algún monstruo salir de un closet, o quizás algo peor.

—Yo solo quiero mi pelota, me la puede dar por favor —dije.

—Sí claro, la pelota. Acompáñame.

Al llegar al jardín, lucía diferente a como yo lo veía desde casa. Parecía más amplio, el césped era más verde que todos los que había visto en mi vida y reflectaba la luz del sol, podría llegar a decir que parecía hecho de minúsculas esmeraldas. Las flores aparentaban ser más gruesas de lo normal y el polen en ellas también brillaba.

Seguro era el sol que me estaba dando de lleno en los ojos, creando una especie de ilusión óptica. A punto estuve de salir corriendo, cuando vi la pelota. Me apresuré a recogerla, pero no lograba alcanzarla, era como si estuviera moviéndose por sí sola.

—No me has dicho tu nombre —dijo la señora Torres.

—Tomás.

—Encantada, Tomás. Ven a tomar leche con galletas, mientras se deciden a entregarte el balón.

—¿Quiénes? —respondí confundido.

—No importa. Vamos.

Al despedirme de mi vecina, me entregó la pelota y me dijo que volviera cuando quisiera. Vivía sola y no tenía familia.

La noche de Halloween me presenté en la puerta de la señora Torres, esperando obtener algunas de sus galletas, eran las mejores que había probado. Timbré una, dos y tres veces. Me iba a ir cuando la puerta se abrió. Mi vecina no se avistaba por ninguna parte. Algo me decía que no entrara, mi curiosidad pudo más.

Atravesé la sala, llamando a la señora Torres. Ninguna respuesta. En la cocina se veía una luz encendida, me dirigí hacia allá a paso lento, no había nadie. Escuché unas risas que provenían del jardín, me quedé quieto, las volví a oír.

Me encaminé hacia el jardín, de pronto me vi envuelto por una niebla densa. No podía ver nítidamente, entonces sentí que algo rozó mi pierna. Traté de caminar y tropecé, caí en el césped.

Desde donde estaba las flores se veían tan altas como palmeras, una libélula del tamaño de una garza sobrevoló sobre mí y alcancé a divisar en una esquina dos hombrecillos que cargaban mi pelota de fútbol.

Me levanté raudo, restregué mis ojos. La niebla había desaparecido, las flores tenían su tamaño normal y los hombrecillos habían desaparecido. Por el contrario, la pelota sí estaba en el lugar donde la había visto. Sin embargo, no recordaba haberla lanzado de nuevo hacia esta casa. La agarré y salí casi corriendo.

Al pasar por el comedor vi las galletas, estaban encima de una mesa ovalada cubierta con un delicado mantel. Alargué el brazo para asir una. Me detuvo un golpe seco en la canilla. Bajé la mirada, no había nada. Al tratar de agarrarlas noté que estaban más lejos, solté el balón. De pronto, me pareció que las galletas estaban muy cerca. Miré para todos lados, quería confirmar que estaba solo.

Mientras llenaba los bolsillos del pantalón con esas delicias, oí cómo la pelota rodaba de forma lenta y de pronto se detuvo. La busqué sin resultado. Se me estaba haciendo tarde para ir a pedir los dulces, así que me olvidé de ella.

Al levantarme al día siguiente, continuaba en la casa de la señora Torres. El timbre sonó, bajé desde el segundo piso, no había rastro de la mujer. Abrí la puerta, era un niño de ocho años, untado de barro, preguntando por su pelota de fútbol.

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Published on October 28, 2022 06:00

October 21, 2022

La Casa de los Espíritus por Isabel Allende

Agosto 2 de 1942

«Escribir es como hacer el amor. No te preocupes por el orgasmo, preocúpate del proceso»

Isabel Allende

La Casa de los Espíritus es una novela de la escritora chilena Isabel Allende, publicada en Barcelona en 1982. Fue un bestseller internacional, traducida a numerosos idiomas y llevada al cine con el mismo nombre por Bille August; estrenada en 1993, fue protagonizada por Jeremy Irons, Meryl Streep, Glenn Close, Winona Ryder y Antonio Banderas.

Allende cuenta la historia de tres generaciones de mujeres en una familia, desde principios del siglo XX hasta los años setenta. El libro está ambientado en Chile, pero también viaja a Europa y América del Norte, haciendo un viaje en el tiempo y el espacio.

La protagonista es Clara, crece en el seno de una familia acomodada con reglas estrictas sobre el comportamiento de las mujeres. Clara se rebela contra esto enamorándose de un hombre de una familia enemiga y huyendo con él. Pronto se da cuenta de que el matrimonio no es todo lo que parece cuando su marido empieza a golpearla y a engañarla con otras mujeres.

Pero aquí hay más que la historia de una sola mujer: también la de su hija Blanca y su nieta Alba. Cada generación tiene sus propios retos y triunfos mientras intentan abrirse paso en la vida en circunstancias difíciles.

La Casa de los Espíritus esta dividida en catorce (14) capítulos:

Capítulo 1, La Casa de los espíritus.

Capítulo 2, Las Tres Marías.

Capítulo 3, Clara, clarividente.

Capítulo 4, El tiempo de los espíritus.

Capítulo 5, Los amantes.

Capítulo 6, La venganza.

Capítulo 7, Los hermanos.

Capítulo 8, El conde.

Capítulo 9, La niña Alba.

Capítulo 10, La época del estropicio.

Capítulo 11, El despertar.

Capítulo 12, La conspiración.

Capítulo 13, El terror.

Capítulo 14, La hora de la verdad.

Isabel Allende nació en Lima, Perú, en 1942. Su tío, Salvador Allende, fue presidente de Chile. Cuando fue derrocado por un golpe militar en 1973, Allende y su familia se exiliaron en Venezuela. Tras la publicación de su novela, La casa de los espíritus, se han vendido más de 15 millones de ejemplares, además le fue otorgado el Premio Rómulo Gallegos a la mejor novela de un autor latinoamericano.

Esta autora es considerada un verdadero fenómeno, ha escrito más de 30 novelas, de las que se han vendido más de 70 millones de ejemplares, y ha escrito numerosos artículos. Ha sido traducida a más de 30 idiomas sin ser traductora activa de otros.Con humor, ironía y un profundo sentido estético cuenta historias sobre países en crisis, desigualdades sociales y el impacto que el desplazamiento cultural tiene en la identidad.

En el plano literario, Allende usa un estilo peculiar. Para contar una historia, suele empezar por crear el lugar y el tiempo en el que viven sus personajes. No elige de antemano el tema que le interesa. En cambio, crea un espacio para que se desarrolle la acción. Aunque le resulta difícil elaborar planes cuando escribe, confiesa que la mayoría de libros que ha escrito lo ha hecho sin ninguna idea previa de cómo iba a terminar. Pero encuentra el placer de escribir a través del descubrimiento.

Allende cruza un relato realista sobre la historia contemporánea chilena con elementos mágicos y maravillosos. En los aspectos no literarios, Allende despierta la polémica tanto por sus propias convicciones políticas, como por sus nexos familiares con Salvador Allende.

La casa de los espíritus es una novela que es narrada por dos personajes. El hilo principal lo lleva Alba, quien reconstruye la historia familiar a través de los escritos por su abuela Clara. La mayoría de las veces, Alba asume la voz de un narrador omnisciente, excepto por el epílogo y otros fragmentos, donde narra con voz propia.

Las narraciones de Alba son interceptadas y complementadas cada cierto tiempo por el testimonio de Esteban Trueba, quien escribe en primera persona. A través del testimonio de Trueba, podemos conocer aquellos aspectos que Clara no podría haber anotado en sus cuadernos.

Capítulo 1 La Casa de los espíritus y Capítulo 2 Las Tres Marías

https://youtu.be/v8rM9YikHAg

Capítulo 3 Clara, clarividente y Capítulo 4 El tiempo de los espíritus

https://youtu.be/C5pLDvSL_ts

Capítulo 5 Los amantes y Capítulo 6 La venganza

https://youtu.be/PqdeIBwuLWA

Capítulo 7 Los hermanos y Capítulo 8 El conde

https://youtu.be/Byln-5fO6oU

Capítulo 9 La niña Alba y Capítulo 10 La época del estropicio

https://youtu.be/HvstFin0G6o

Capítulo 11 El despertar y Capítulo 12 La conspiración

https://youtu.be/Lo4DIk9u238

Capítulo 13 El terror y Capítulo 14 La hora de la verdad

https://youtu.be/yAvEHNOkJiw

Espero hayas disfrutado de este audio libro, una obra literaria que sin duda nos deja mucho por aprender. Sigue conectado con El Blog de Mildred, continuamos con nuestro deseo de entretener y fomentar la lectura y la escritura a través de diversos medios visuales y auditivos.

Cualquier pregunta o inquietud, pueden escribir a info@elblogdemildred.com

Sin intenciones de infringir los derechos de autor, solo promover la lectura por medio de audiolibros e incentivar a la curiosidad de leer un libro.Todos los derechos pertenecen a sus respectivos autores y/o editoriales. Si alguno de los propietarios del audiolibro utilizado en estos videos, no está de acuerdo con su uso, por favor contácteme a www.elblogdemildred.com/contactoGracias por ver los videos, si te gustó no te olvides de regalarme un “me gusta”, comentar, compartir y suscribirse a mi canal de YouTube
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Published on October 21, 2022 15:50

October 19, 2022

Nuevo Cambio de Look

Estoy muy emocionada de anunciar que El Blog de Mildred está recibiendo un cambio de imagen. He estado trabajando en algunos contenidos nuevos y emocionantes y no puedo esperar a compartirlos con todos ustedes, especialmente para todos mis suscriptores.

Una idea que nace desde la pandemia y que se convirtió en una manera de vivir para mí y mi familia. Mis relatos, historias, actividades y contenido multimedia han llegado a muchas personas al rededor del mundo, además, he descubierto nuevas formas de hacer lo que me gusta y transmitirlo a todos ustedes.

Más contenido. Más temas de interés. Más moderno y limpio Nuevas ideas. Un mejor diseño de la vista 100% bilingüe (español e inglés)

¡Así que debes estar atentos y no olvidéis seguirme en ,Facebook, ,Instagram, ,Twitter, ,Tiktok y ,YouTube!

Espero que me acompañes en esta nueva aventura, y no dudes en dejar comentarios y sugerencias.

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Published on October 19, 2022 05:00

New Makeover

I am so excited to announce that El Blog de Mildred is getting a makeover. I've been working on some exciting new content and can't wait...
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Published on October 19, 2022 04:05

October 17, 2022

Alexandra, el sabio y yo

Alexandra y yo corríamos por un pasillo largo, de paredes blancas amarillosas, moho reptando hacia el cielo raso, olor a humedad camuflado con desinfectante. Buscábamos la salida, las luces parpadeaban, no se oía ni el aleteo de una mosca, al fondo unas sombras parecían venir hacia nosotros. Por un momento quisimos devolvernos. Aunque debo remitirme a un poco antes, para ponerlos en contexto.

Nos tenían prisioneros desde hacía varios meses, o quizás solo días, o quizás solo horas. Dormitábamos en una celda de paredes blancas, inundada de un olor a cloro. Éramos tres en la celda, mi hermana Alexandra, un hombre mayor, que según habíamos oído era un sabio conocedor de secretos ancestrales y yo.

Cuando nosotros llegamos a la celda, el hombre, de barba blanca y grandes ojeras, ya se encontraba allí. Estaba muy mal de salud, casi no podía hablar. Lo poco que alcanzaba a expresar era su deseo de salir de allí.

Cada tanto venían una serie de hombres o mujeres a torturarlo, todos llevaban un uniforme gris oscuro. A veces le daban unas pastillas que lo ponían muy mal, vomitaba, decía cosas sin sentido, sudaba. Otras veces le aplicaban inyecciones con unas sustancias color verde radioactivo. En una oportunidad le pusieron un aparato sobre el pecho para sacarle los demonios que lo consumían. Eso decían ellos, pero nosotros sabíamos la verdad. Querían que el viejo sabio confesara secretos de gran valor.

El líder de aquella gente que nos retenía se hacía llamar doctor Hernández, pero nosotros le decíamos doctor peluca, ya se imaginaran por qué. Todos lo idolatraban, era casi un Dios. Alexa no lo podía ver, le infundía mucho temor.

A mí la que no me gustaba ni poquito era una guardiana alta, robusta, con cara de lechuza. Le decíamos el ogro. Ella era la que nos trataba peor, le disgustaba todo lo que hacíamos, no permitía ningún sonido en la celda, nos miraba mal, con ganas de ahorcarnos.

A veces, al ogro la reemplazaba un guardián un poco más simpático, nos daba crucigramas, sopas de letras, algo con que pasar aquellas horas muertas. En contadas ocasiones nos dejaba salir a un patio a recibir un poco de luz.

Una tarde, creímos oír al doctor peluca decirle al ogro que debía deshacerse de nosotros. Fue entonces que decidimos fugarnos, pensamos que una vez afuera podríamos pedir ayuda para sacar al viejo sabio.

Planeamos hacerlo en el turno del vigilante bonachón, pues Alexa se lo tenía ganado, una sonrisa suya y podíamos conseguir muchas cosas. Además, después de cierto tiempo de iniciado su turno, aquel vigilante se quedaba dormido en una silla. Perfecto para robarle las llaves de la celda. Supusimos que los sábados era el día de descanso del doctor peluca, dado que nunca había asomado sus narices en esas jornadas. Entonces, lo haríamos un fin de semana.

Se llegó el día de la huida, nos despedimos del viejo sabio, quien nos miró y nos apretó una mano en señal de consentimiento para irnos. Todo iba según lo proyectado.

Alexandra y yo, pudimos salir de la celda, corríamos por el pasillo de aquel lugar siniestro. De repente la sombra del ogro se apareció frente a nosotros.

—Alexandra, Samuel, por favor no pueden correr en un hospital.

—Pero mamá, nos morimos de aburrimiento —contesté evitando la mirada furiosa del ogro.

—Por favor vayan a despertar a su papá, que otra vez se quedó dormido en la silla de las visitas y ayuden al abuelo a recoger las cosas, que ya lo dieron de alta.

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Published on October 17, 2022 10:09

July 30, 2022

Siguiendo el Trazo

Ayer, luego de catorce años con nosotros, murió mi gato Arrugas. Era alérgico a las mentiras, cada vez que alguien decía una, él estornudaba tres veces seguidas. Tengo un recuerdo muy vívido al respecto.

Cuando tenía cinco años asistí al colegio por primera vez. Estaba muy entusiasmado, me gustaba la maestra, pues era paciente y nos enseñaba cosas increíbles. Todo iba muy bien hasta que llegó la hora de aprender a recortar por la línea.

La actividad me resultaba difícil, no lograba que la tijera se fuera derecho siguiendo el trazo dibujado en el papel y todo me quedaba torcido. “Manolo debes practicar en casa”, me decía la maestra.

Mis padres trabajaban, así que cuando llegaba a casa, mi abuelita era la que me recibía y estaba conmigo el resto de la tarde. Cuando ella me preguntaba si tenía tareas, yo respondía que no y de inmediato Arrugas estornudaba.

Al llegar mis padres me preguntaban cómo me había ido en la escuela, a lo que siempre respondía que bien con una sonrisa en la cara. Arrugas estornudaba.

Los días siguientes transcurrieron entre desgano, tristeza, desesperación y estornudos. Mis dibujos perdieron los colores, mis juegos ya no incluían a Arrugas. Ahora, andaba lento y cabizbajo.

Un día amanecí con dolor de estómago, mi abuela me sobaba la barriga con alcohol, mi madre aseguraba que era algo que había comido la noche anterior y mi padre decía que ojalá no fuera apendicitis. Yo no sabía qué quería decir esa palabra, pero en su forma de pronunciarla parecía algo serio. Entonces, Arrugas estornudó.

Mis padres no me enviaron a la escuela ese día. Estuve en casa comiendo, viendo televisión y dibujé un paisaje lleno de verde y azul.

Los dos días posteriores se repitió la misma historia: dolor de estómago, quedada en casa, estornudo de Arrugas. Al cuarto día, mi abuela se reunió con mis padres en la sala, yo me levanté sigiloso para escuchar algo de la conversación. Fue inútil, tan pronto me hice tras un sofá, Arrugas estornudo y me descubrieron.

En la tarde mis padres aparecieron juntos en mi habitación, no era una buena señal. Habían ido a hablar con mi maestra y se enteraron de mi dificultad con las tijeras. Acordamos que ellos me ayudarían en las noches cuando llegaran de sus trabajos, me explicaron que su deber como padres era ayudarme con mis problemas y que no tenía nada de malo no ser bueno en algo. Me sentí muy aliviado.

Mi abuela entró en mi habitación para darme el beso de buenas noches, entonces aproveche para preguntarle algo que no comprendía.

—Abu, ¿cómo se dieron cuenta mis papás de mi problema al recortar?

—Manolo mío, a una vieja como yo no la puedes engañar. Sino pregúntale a Arrugas como le quite esa alergia que tenía— respondió mi abuela al tiempo que me guiñaba el ojo.

Espero hayas disfrutado de este relato y lo compartas, tal vez puedes leerlo en la noche a tus hijos antes de dormir y pregúntales si les gustó o que entendieron, seguro ellos te sorprenderán.- Mildred Niño -
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Published on July 30, 2022 15:28

July 23, 2022

Fiesta de Cumpleaños

El señorito Carlitos se acercaba a su cumpleaños número cuarenta y su madre, la señora Doris, lo iba a celebrar por todo lo alto. Invitó a media ciudad, no sabía cómo iba a hacer para que la junta del club aceptara la interminable lista de invitados. Yo, como su fiel mayordomo, le sugerí que no había necesidad de invitar a las “damas del sagrado corazón” y menos a las “chicas” del club de croché. No me hizo caso.

El señorito Carlitos, tímido desde su niñez, no deseaba una fiesta. Su máximo anhelo era conocer una buena mujer, con la cual casarse y formar una familia; léase, liberarse de las garras de su madre. Más el señorito, a pesar de sus títulos universitarios y dinero, se paralizaba ante cualquier mujer y no le salían las palabras.

La noche antes de la fiesta, la señora Doris no pudo dormir, la oía caminar en su cuarto, imagino que revisaba mentalmente los pormenores del evento. Por supuesto, yo tampoco pude dormir, estaba haciéndole control de calidad al licor que se serviría.

La señora se levantó, entró como un huracán a la cocina y me encontró degustando un whisky doce años, importado exclusivamente de Escocia para esta ocasión. Me atraganté con el trago que ya estaba en mi boca y por poco se lo escupo en la cara. La señora me fulminó con la mirada, dio dos pasos hacia mí y dijo: “Alfredo, llame a Las seguidoras de María, las del grupo de oración, y dígales que las espero mañana a las siete de la noche con los canapés.”

Doña Doris dio media vuelta y salió, yo me levanté del asiento y llevé mi mano derecha con los dedos juntos hacia mi sien, cuál saludo militar. “Sí, señora” dije en voz alta, pero ella ya había cruzado la puerta de la cocina ¡Gracias a Dios!

Sin demora, abrí un buscador en el celular y tecleé: Las seguidoras de María…

La fiesta empezó puntual y el señorito lucía un esmoquin negro al estilo James Bond. Bueno, no digamos que se veía tan atractivo, pero al menos se veía interesante. Bueno, se veía agradable. Bueno, bueno, dejémoslo en que estaba aceptable. Comía su pastel, de forma lenta y mirando al infinito. No había entablado conversación con ninguna mujer, ya que la mayoría de invitadas eran amigas de su madre. Viudas y contemporáneas a ella. No se podía quejar, al menos sí había solteras.

Como enviadas por Dios o por el diablo, de repente llegaron unas mujeres vestidas con trajes muy reveladores, coloridos y maquilladas en exceso. Rodearon al cumpleañero, danzando a su alrededor de manera concupiscente. La mujer más madurita y con un cabello al estilo Marilyn gritó: “Somos las seguidoras de María… De María Magdalena” y guiñó un ojo.

Espero que hayas disfrutado de este pequeño relato. La edad no es lo que aparenta ser, es lo que somos sin importar lo que otros piensen o sientan. Solo sé feliz y vívela.- Mildred Niño
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Published on July 23, 2022 12:21

June 3, 2022

Contra el destino

Andrea Montaño una mujer de tez trigueña, cabello largo, ojos claros, de mirada esquiva y caminar apresurado, nacida en el pacífico colombiano. Encima de su mesa de noche tiene la foto de un buzo en medio del mar mirando hacia arriba.

A los 16 años estudiaba en una escuela precaria, a la que su tía la obligaba a ir. Entre ecuaciones matemáticas, que no entendía pa’ que le iban a servir, vender el pescado en la plaza de Buenaventura y las lecturas de un señor que se llamaba Gabo, dizque se había ganado un premio muy importante, Andrea conoció el amor. Tan pronto se graduó del colegio, se casó con Onorio Varela, su primer y único novio.

Diez años de matrimonio la dejaron con tres hijos y sin un peso. A su esposo lo mataron una tarde de abril de 1995 en la puerta de su casa. Era profesor y activista social, cuyo pecado fue buscar mejorar las condiciones de la educación en su ciudad. Andrea, más que tristeza, sentía una rabia del carajo con su marido, porque ella se lo advirtió mil veces. Le repetía que no se metiera en esas vainas, que toda la vida el gobierno se había robado la plata de la educación, que eso siempre había sido así, que pa’ qué se ponía a pendejear si eso no se iba a poder cambiar nunca. Llena de cólera y tres bocas que alimentar, agarró un bus para Cali, donde decían que había más trabajo. No quería saber nada de su ciudad natal, a pesar de ser lo único que ella conocía, ya no era igual que antes, ahora olía a muerte en cada esquina.

En Cali llegó a casa de una prima lejana, quedaba al oriente de la ciudad, las calles no estaban pavimentadas y una recua de niños descalzos jugaba al balón en la calle. El trayecto en bus desde el terminal y luego la caminata de quince minutos a pleno mediodía, con los rayos del sol cayendo paralelamente a sus cuerpos le parecieron una eternidad. Al principio le costó trabajo adaptarse a vivir con más gente, a los precios tan caros de la comida, a que todo quedaba muy lejos.

Poco a poco se fue acomodando a su nueva vida, su prima le ayudó a encontrar trabajo en casa de una familia, iba a lavar y planchar dos veces por semana. Lo hacía tan bien, que su patrona la recomendó a sus amigas. Pronto, Andrea ya tenía ocupada toda la semana y los viernes y sábados en la noche sacaba fritanga para la venta en la puerta de la casa. Vendía todo. Los domingos era el único día que tenía libre, entonces lo aprovechaba para lavar la ropa de la semana, limpiar la casa, ayudar a sus hijos con las tareas. Rara vez salían a San Antonio o al parque de la caña. En el primero comían mazorca asada o algodón de azúcar, mientras que en el segundo disfrutaban de la sensación de la ciudad, una piscina con olas.

Los años pasaron tan rápido, Andrea no se dio cuenta a qué hora sus hijos habían crecido tanto. A base de esfuerzo había logrado que terminarán el bachillerato, era momento de que fueran a la universidad. Su padre lo había hecho y era su anhelo que ellos no pasaran penurias como ella. Había logrado arrancar a sus hijos de las garras de la violencia, los había salvado. Todo el cansancio que sentía diariamente, cada privación, era recompensado con cada cumpleaños. A sus hijos no les podía pasar lo mismo que a su esposo. Ella no lo permitiría.

Los tres jóvenes habían resultado inteligentes, y con la disciplina implantada por Andrea, lograron entrar en la Universidad del Valle. El mayor estudió administración de empresas, el segundo se graduó de ingeniero civil y el menor estudió biología marina en la sede de Buenaventura. Al principio, Andrea no quería que su hijo volviera a su ciudad natal, pero ante el entusiasmo del muchacho termino cediendo, era el consentido de la casa.

Una vez en Buenaventura, el hijo menor se aficionó a bucear, aprendió rápido y su nueva habilidad era muy útil a su carrera. El joven había logrado que un compañero le tomase una foto en el fondo del mar con su traje y no dudó en llevársela a Andrea en unas vacaciones de diciembre. No había madre más orgullosa en todo el planeta.

El mismo día que se graduó de biólogo marino, el joven recibió una oferta de trabajo en una prestigiosa universidad de Cartagena para integrar uno de los grupos de investigación. El muchacho llevaba ya varios meses allí, cuando tuvo que realizar una inmersión para monitorear unos equipos que controlaban el nivel de oxígeno en el lecho marino. Fue la última vez que se le vio con vida.

Andrea recibió una llamada, donde le comunicaban que su hijo había sufrido un accidente en el trabajo y lamentablemente había muerto. La mujer no dijo nada, colgó el teléfono. Enseguida las lágrimas brotaron de sus ojos y no pararían en mucho tiempo. Si cuando su esposo murió no derramó ni una sola lágrima, esta vez sí lo hizo copiosamente.

De nuevo, la vida le quitaba a un ser amado. A ella, que había luchado contra el destino, alejando a sus muchachos de las fauces de la violencia, esquivando vicios, malas compañías, prohibiéndoles que se inmiscuyeran en cualquier actividad política. No entendía por qué pasaban estas tragedias. Sería que ella era muy bruta pa’ entender esas cosas, se decía a sí misma cuando estaba sola.

Cuando volvió del entierro, buscó la foto de su hijo, donde aparecía con su traje de buzo, agarró apresuradamente un portarretrato que estaba en la sala, sacó la foto de su difunto marido, se quedó mirándola y le dijo: “Lo siento Onorio, luego te compro otro marco. Sigo sin perdonarte que me hayas dejado, pero cuídame a mi muchacho allá donde estén, y dile a Dios que no se vale las zancadillas que me pone.”

Espero que hayas disfrutado de este pequeño relato. A veces la vida te quita lo que más quieres, pero te enseña más de lo que tú crees.- Mildred Niño
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Published on June 03, 2022 06:02

May 22, 2022

Cien Años de Soledad por Gabriel García Márquez

Marzo 6 de 1927 - Abril 17 de 2014

«Te quiero no por quien eres sino por quien soy cuando estoy contigo»

Gabriel García Márquez

Cien años de soledad (1967) relata la historia de una aldea imaginaria, Macondo, y de la estirpe de sus fundadores, los Buendía. La novela se presenta dividida en veinte secuencias narrativas sin título o numeración asignada.

Secuencia narrativa 1 a 5: Fundación y primeros años de macondo.

Secuencia narrativa 6 a 9: La guerra civil y el coronel Aureliano Buendia.

Secuencia narrativa 10 a 15: La fiebre bananera.

Secuencia narrativa 16 a 20: Decadencia y destrucción de macondo.

Gabriel García Márquez nació en Aracataca el 6 de marzo de 1927, se crio con sus abuelos maternos y sus tías, ya que sus padres se fueron a vivir a sucre cuando él era muy pequeño. Sus abuelos ayudaron a forjar en él, los momentos clave para sus inspiraciones en su posterior desarrollo para la literatura. Su abuelo, Nicolás Márquez, fue coronel veterano de la guerra de los mil días y le contaba a su nieto muchas historias, así era como le enseñaba a amar la cultura y asistían recurrentemente tanto al cine como al teatro. Por otra parte, su abuela dona Tranquilina Iguarán también era la encargada de contarle fábulas e historias familiares basadas en leyendas que alimentaron la parte más supersticiosa de Gabriel. Parte de estos aprendizajes son los que más tarde darán lugar a que su obra forme parte de ese género llamado "Realismo Mágico".

Gabriel García Márquez inicialmente le presento Cien años de soledad a Carlos Barral, quien a mediados de los años 60, dirigía la que en ese entonces era la editorial de vanguardia en lengua castellana, Seix Barral, pero Carlos Barral le dijo a García Márquez: yo creo que esa novela no va a tener éxito, yo creo que esa novela no sirve. Sin embargo, García Márquez no ceso y logro que la editorial sudamericana le editase el libro.

En un comienzo, pensó en titular su novela, la casa, pero se decidió por Cien años de soledad para evitar confusiones con la novela la casa grande, publicada en 1954 por su amigo, el escritor Álvaro Cepeda Samudio. La primera edición de Cien años de soledad fue publicada el 5 de junio de 1967 por la editorial sudamericana de buenos aires, a donde fueron enviados los originales por correo divididos en dos partes, porque debido a las dificultades económicas del escritor no pudieron pagar el primer envío completo.

FUNDACION Y PRIMEROS AÑOS DE MACONDO (Secuencia narrativa 1 a 5 - Etapa 1)

Desde que Úrsula Iguarán se casó con su primo José Arcadio Buendía, teme engendrar un niño con cola de cerdo como consecuencia del parentesco. Por ello, se niega temporalmente a consumar el matrimonio. Esto es causa de que Prudencio Aguilar se burle de José Arcadio Buendía quien, ofendido, lo mata en duelo para salvar su honor. Desde entonces, el fantasma de Aguilar lo persigue y José Arcadio decide irse del pueblo.

Inspirado por un sueño durante su travesía en la selva, José Arcadio Buendía decide quedarse en ese punto del camino y fundar Macondo, pueblo que crece poco a poco.

El pueblo recibe con frecuencia las visitas de los gitanos. Su líder, Melquíades, trae siempre artefactos y objetos que obsesionan a José Arcadio Buendía.

Para entonces, el joven matrimonio ya ha concebido a tres hijos: José Arcadio, Aureliano y Amaranta. Además, adoptan a Rebeca, la hija de unos parientes. El incesto es una preocupación constante en Úrsula, quien con los años observa cómo Receba y su hijo José Arcadio se enamoran y se casan.

A Macondo llega la peste del insomnio, la cual trae consigo la del olvido. Un brebaje de Melquíades pone fin a la peste. El éxito es tal que el gitano se queda a vivir en Macondo, tiempo en el cual escribe unos pergaminos que solo serán descifrados muchos años después.

El patriarca, José Arcadio Buendía, vuelve a encontrarse con el fantasma de Aguilar y enloquece. La familia, entonces, lo amarra a un árbol del patio trasero, donde morirá de un infarto.

https://youtu.be/z7bwCooqVWI

LA GUERRA CIVIL Y EL CORONEL AURELIANO BUENDIA (Secuencia narrativa 6 a 9 - Etapa 2)

Al estallar la guerra civil, Aureliano Buendía lucha contra los conservadores, comandando un grupo de soldados de Macondo. Nombra a su sobrino Arcadio como jefe civil y militar del pueblo.

Arcadio había sido el fruto de una relación de amantes entre José Arcado hijo y Pilar Ternera, regente de un prostíbulo. Fue criado en casa de sus abuelos a condición de que se le ocultara su origen. Creció pensando ser hijo del gran patriarca. Cuando es nombrado jefe de Macondo, Arcadio se vuelve un dictador y tiraniza el pueblo. Muere fusilado por los conservadores.

Durante su actividad como líder de los liberales, el coronel Aureliano Buendía enfrenta un total de 32 batallas, de las cuales sale siempre perdedor. Cansado, pronto el coronel comprende que la lucha armada no tiene sentido.

Con el tiempo, Aureliano firma un tratado de paz, tras el cual intenta suicidarse. Regresa a Macondo, donde pasará el resto de su vida haciendo y rehaciendo pescaditos de oro.

https://youtu.be/HdfFJhR7t4U

LA FIEBRE BANANERA (Secuencia narrativa 10 a 15 - Etapa 3)

Aureliano concibe 17 hijos de madres diferentes. Uno de ellos, llamado Aureliano Triste, promueve el tren a Macondo, lo que activa el comercio y permite la llegada de inventos como el telégrafo y el cine. Esto atrae la inversión de un grupo extranjero en una plantación de bananos.

La plantación genera la ilusión de prosperidad del pueblo, pero una huelga de trabajadores hará que todo esto acabe en una auténtica masacre. Los inversionistas, luego de haber explotado el pueblo, se retiran con su dinero y Macondo vuelve a la pobreza.

A partir de ese momento, el pueblo sufre lluvias constantes por casi cinco años. Úrsula, la matriarca centenaria que ha cuidado de toda la familia, espera el fin de las lluvias para morir y descansar en paz.

Durante los últimos tiempos de Úrsula, nace Aureliano (Babilonia), el último descendiente de los Buendía. Aureliano es hijo natural de Meme y Mauricio Babilonia, un aprendiz de mecánico que siempre es perseguido por un enjambre de mariposas amarillas.

La religiosa y tiránica madre de Meme, Fernanda del Carpio, se opone a la relación, saca a Mauricio del camino, manda a Meme a un convento, le quita al niño y lo cría haciéndole creer que ha sido encontrado en una canastilla.

https://youtu.be/EV6N8f1sioI

DECADENCIA Y DESTRUCCIÓN DE MACONDO (Secuencia narrativa 16 a 20 - Etapa 4)

Pasan los años y poco a poco el pueblo se va vaciando. Aureliano Babilonia, que se caracterizaba por ser sabio, pasa la vida descifrando los pergaminos que había escrito Melquíades.

Entre tanto, regresa de Europa su tía Amaranta Úrsula, casada con Gastón. Sin saber de su parentesco, ambos se enamoran, Gastón se va, pero ella queda embarazada.

Durante el parto, en el que ella muere, da a luz a un niño con cola de cerdo. Aureliano intenta buscar ayuda, pero al no encontrar más que a un cantinero, se emborracha y se queda dormido. Cuando despierta y regresa, el niño ha sido devorado por las hormigas.

Finalmente, Aureliano logrará descifrar los pergaminos de Melquíades: «porque las estirpes condenadas a cien años de soledad no tenían una segunda oportunidad sobre la tierra». Entonces, todo Macondo será arrasado y sepultado por un huracán.

https://youtu.be/MUbPRt1Ur04

Arbol Generacional en Cien años de soledad

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Premio Nobel

Cuando a un escritor le es concedido el Premio Nobel de Literatura, la Academia Sueca redacta una declaración oficial en la que argumenta las razones que motivaron su decisión final. Por lo general, se trata de un documento que menciona los atributos especiales de la obra de un autor, subrayando su originalidad, sus influencias y su impacto cultural.

En el caso de Gabriel García Márquez, a quien le fue otorgado el Premio en 1982, la Academia Sueca destacó la narrativa polifacética del colombiano, cuyos registros iban desde el cuento, la novela y la novela corta, hasta el periodismo político y la crónica. En el informe, los académicos comparan al creador de Macondo con grandes novelistas como William Faulkner y Balzac, haciendo énfasis en el contraste asombroso que García Márquez establece entre su visión trágica de la vida y la vitalidad de su narración.

Llama la atención que en el texto también se reconozcan aspectos del escritor que van más allá de la literatura, como su compromiso social y el impacto de sus libros en el mercado. Al final, lo que más se señala en el trabajo literario de García Márquez es su capacidad para introducir al lector en la realidad latinoamericana y revelarle los pormenores de la condición humana a través de la imaginación

Declaración completa con la que la Academia Sueca dio a conocer los motivos por los cuales García Márquez –y no otro– debía ganar el Premio Nobel de Literatura en 1982

Al conceder el Premio Nobel de Literatura al Novelista Colombiano Gabriel García Márquez, no se puede decir que la Academia Sueca haya descubierto a un Escritor desconocido.
La publicación de su novela “Cien Años de Soledad” en 1967 proporcionó a García Márquez un reconocimiento internacional de desacostumbrada magnitud. La novela se tradujo a un gran número de idiomas y se ha editado en millones de ejemplares. Nuevas generaciones de lectores siguen comprándola y leyéndola con un interés que no disminuye. Un éxito de tal calibre, conseguido con un solo libro, podía haber sido fatal para un escritor que no tuviese los recursos de que dispone García Márquez. En todo caso, él ha ido consolidando paulatinamente su reputación de narrador dotado de talento excepcional, dueño de un material, producto de la fantasía y de la experiencia, que puede parecer inagotable. Su novela “El Otoño del Patriarca” (1975) puede muy bien medirse por su aliente narrativo y su riqueza épica con la obra mencionada. Las novelas cortas “El Coronel No Tiene Quien le Escriba” (1961), “La Mala Hora” (1962), o la publicada el año pasado “Crónica de una muerte anunciada” completan la imagen de un autor que reúne, en su persona, un talento narrativo desbordante, casi abrumador, y la maestría del artista de la lengua consciente de su técnica, disciplinado y poseedor de un amplio bagaje literario. Un buen número de cuentos publicados en diferentes colecciones o en revistas, proporcionan una prueba adicional de la polifacética modulación del talento narrativo de García Márquez. Sus éxitos internacionales han continuado. Cada obra suya nueva es considerada por una crítica y un público expectantes como un acontecimiento de trascendencia internacional, y se traduce y se publica con toda la rapidez posible en numerosos idiomas y grandes tiradas.
Tampoco se puede decir que con el Premio a García Márquez la Academia haya sacado a la luz un continente o región literariamente desconocido. La literatura Latinoamericana muestra desde hace tiempo una vitalidad que apenas se encuentra en otro ámbito literario y tiene conquistada una posición, un rol que se sigue con particular atención en la vida cultural de nuestro tiempo. Es éste un Continente donde se entrecruzan multitud de impulsos y tradiciones. Elementos de cultura popular, por ejemplo la narración oral, reminiscencias de culturas indias altamente desarrolladas, corrientes del barraco español de diferentes épocas, influencias del surrealismo y otras corrientes literarias Europeas, todo ello, mezclado, produce una bebida vivificante y rica en especias de la que García Márquez y otros escritores hispanoamericanos sacan su material e inspiración. Los violentos conflictos políticos, sociales y económicos elevan la temperatura del clima intelectual. Como la mayoría de los escritores más importantes del mundo Latinoamericano, García Márquez está profundamente comprometido políticamente a favor de los pobres y débiles y contra la opresión nacional y la explotación económica extranjera. Además de la producción propiamente literaria, García Márquez ha desarrollado una intensa actividad periodística, labor en la que no se limita a tratar temas políticos, sino que toca gran variedad de asuntos de manera ingeniosa y a menudo provocadora.
Las grandes novelas nos llevan a pensar en William Faulkner. García Márquez ha creado un universo propio – El mundo que rodea a Macondo, el pueblo inventado por él. Desde finales de la década de 1940, sus novelas y cuentos nos arrastran a ese extraño lugar donde se dan cita lo milagroso y lo más puramente real – el espléndido vuelo de la propia fantasía, fabulaciones desmedidas y hechos concretos que surgen del fondo del pueblo, alusiones literarias, gráficas descripciones, palpables y a veces opresivas, realizadas con la precisión de un reportaje.
Como Faulkner, o por qué no un Balzac, los mismo protagonistas y personajes secundarios aparecen en diversas narraciones, son expuestos a la luz de diversas formas – unas veces en situaciones dramáticamente reveladores, otras en peripecias cómicas y grotescas de tal especie, que únicamente pueden ser inventadas por la más arrolladora fantasía o la desvergonzada realidad. Manías y pasiones tiranizan a esos seres. En plena guerra, estrambóticos sucesos hacen que el valor se presente bajo la figura de la locura, la infamia bajo la de la caballerosidad, la astucia bajo la de la insensatez. En el mundo imaginado y descubierto por García Márquez, tal vez sea la muerte el más importante director de escena entre bastidores. Con frecuencia, sus narraciones giran en torno a una muerte – alrededor de alguien que ha muerto, está a punto de morir o tiene que morir. Un sentimiento trágico de la vida impregna los libros de García Márquez – una sensación de la incorruptible fuerza del Destino y del avance inhumano e implacable del acontecer histórico. Pero la conciencia de la muerte y el sentimiento trágico de la vida contrastan con la vitalidad de la narración, esa capacidad de invención aparentemente ilimitada, que a su vez expresa la fuerza vital, a un tiempo aterradora y edificante, de lo vivo y lo real. Lo cómico y lo grotesco en García Márquez puede ser cruel – pero también puede transformarse en algo lleno de un reconciliador sentido del humor.
Con sus narraciones García Márquez ha creado un mundo propio que es un microcosmos. En su tumultuaria, desconcertante y, sin embargo, convincente autenticidad, este microcosmos refleja, con gran claridad, un continente con sus riquezas y miserias humanas. Quizás más aún: Un universo donde las fuerzas unidas del corazón humano y de la historia desbordan una y otra vez los límites del caos – matando y creando.

Espero hayas disfrutado de este audio libro, una obra literaria que sin duda nos deja mucho por aprender. Sigue conectado con El Blog de Mildred, continuamos con nuestro deseo de entretener y fomentar la lectura y la escritura a través de diversos medios visuales y auditivos.

Cualquier pregunta o inquietud, pueden escribir a info@elblogdemildred.com

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Published on May 22, 2022 06:30

April 22, 2022

La Pizza Momia - Cuentos Infantiles

Por Martin Rodriguez N De 6 - 9 años

Un día cualquiera, en una pizzería en Londres, había un chef cocinando una pizza de pepperoni en el horno, después de unos instantes, el horno exploto ¡BOOM!

Salió humo verde, y luego salió una pizza moviéndose. Tres horas después, la pizza tenía papel higiénico envuelto en su cuerpo. Después de poco tiempo, la pizza momia estaba en las alcantarillas comiendo ratones y se estaba haciendo más grande y grande. La pizza momia salió de las alcantarillas y mordió un humano.

Ese humano se transformó en una pizza momia. Dos días después, había cinco pizzas momias luchando contra los humanos. Los humanos ganaron la batalla, pero no sabían que había un bebe pizza que se disfrazó de pizza normal.

Pequeña historia elaborada por

Martin Rodriguez Niño - 8 Años

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Published on April 22, 2022 09:16