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guion?
Cómo se siente cuando Dev le acaricia el pelo, cómo se siente cuando Dev le roza la mano, cómo se siente cada una de las veces en que ese hombre lo toca. Es una sensación que no comprendía porque nunca la había sentido. Ahora la comprende a la perfección, y, Dios… Ojalá pudiera regresar a la ignorancia.
No se permite pensar en qué significa todo eso ni en por qué siente todo eso. Visualiza a Dev a su lado, la mano de Dev en sustitución de la suya, y es justamente esa imagen la que lo lleva hasta el final. Se tapa la boca con la flexura del codo para no emitir ni un solo ruido. Al cabo de una hora, después de haberse duchado, disfruta de una noche de descanso por primera vez en varios días.
Dev intenta irse de nuevo, pero Charlie no se lo permite. Tenía a Dev. Tenía a Dev en las manos y en los brazos en la pista de baile. Tenía a Dev justo ahí, y ha vuelto a alejarse. Charlie le agarra la chaqueta con los puños.
Dev desea atesorar ese momento. Desea guardarlo en el interior de un vinilo y quedarse dormido escuchando la canción repetidamente.
mero
Charlie lo empuja y luego tira de él hacia sí con un poco de reticencia antes de entregarse por completo al beso. A Dev le sobreviene todo lo que no imaginó a las puertas de la discoteca. Besar a Charlie es diferente que besar a cualquier otra persona. Quizá por la novedad o quizá porque es un poco extraño o quizá porque es Charlie, cuyas manos son gigantescas sobre las mejillas de Dev y la nuca al cubrirlo como si fuera una manta.
gimotear,
Sí que pasa. Pasan demasiadas cosas, claro. Ha besado dos veces a la persona a la que debía cuidar, y ahora la estrella del programa está llorando, sin camisa, en una habitación de hotel, el día de su cumpleaños. Pero Dev ha logrado que muchas cosas se materializaran por el simple hecho de desearlas con tenacidad, así que, si sigue diciendo que no pasa nada, al final no habrá pasado nada. No por él, sino por Charlie.
Sí… sí que hay para tanto, Dev. Para mí sí. —¿A qué te refieres? —Dev teme la respuesta… Teme la vergüenza y el arrepentimiento que Charlie está a punto de verbalizar con palabras. —O sea, me gustas. O me gusta besarte. O no sé. —Un precioso sonrojo le asciende por el cuello y se le extiende por las mejillas—. Pero lo entiendo. Tú no quieres besarme, y es inapropiado que yo siga abalanzándome sobre ti. Dev se nota un tanto desconectado de su propio cuerpo. —¿Te… te gusta besarme? —Creía que después de la otra noche había quedado claro.
rozarle
chándal
mandíbula