Así que, cuando construyáis vuestros personajes, os recomiendo que penséis en las limitaciones, los defectos y las desventajas, y os preguntéis cómo utilizarlas para crear una motivación en el personaje. Al igual que ocurre con los sistemas de magia, casi siempre vuestra historia golpeará al personaje en los puntos donde tiene un defecto, una desventaja o una limitación, y gran parte del conflicto en la trama se derivará de estos aspectos de vuestro protagonista.

