Naird

87%
Flag icon
Lamento que no hayamos podido ser amigos —me dijo apretándome la mano. —Aún hay tiempo. La sonrisa con que me respondió fue medio triste y medio irónica. —Dijo ella antes de entrar en batalla contra su mismísimo creador. Yo también le apreté la mano. —Siempre hay tiempo.
La hija de los huesos (El imperio hundido, #1)
Rate this book
Clear rating
Open Preview