—Por supuesto que es asunto mío. Están tratando de meterte a mis filas, así que agarra ese enorme par de huevos que pareces tener y dime: ¿Qué carajos hiciste, Tared Miller, que estás tan enojado? ¿A quién le jodiste tanto la vida que tuviste qué abandonar la tuya, maldito animal? Ni siquiera tú fuiste capaz de verlo venir.