Todos debemos aceptar que tenemos el potencial de hacer cosas terribles. Forma parte de comprender nuestro lugar en el universo, nuestro acervo y nuestra naturaleza. Pero en esa aceptación yace la fuerza, pues el potencial puede rechazarse. Todo héroe que pudo ser un monstruo es más heroico por las decisiones que tomó para emprender un camino distinto.