Escarbé en mi interior, buscando la rabia, el orgullo herido, el dolor por la traición y la ruptura. Y no encontré esas emociones por ninguna parte. Y me aterraba, porque ¿qué decía eso de mí? De él. De nosotros. ¿Hubo un nosotros?
REF- Es normal el poder y merecerse "respirar" después de terminar una relación con alguien al ue realmente no se amó con todas las fuerzas.
Por mucho tiempo, me peguntaba por qué me sentía bien después de terminar relaciones duraderas y "significativas". Muy probablemente, me cansaba.
Siento que era que siempe sentía que faltaba algo; que no alcanzaba niveles de felicidad, ni de satisfacción. El tiempo en esas relaciones nos muestra que, al final de cuentas, no eran relaciones que queríamos - solo las iniciábamos por ser unos conformistas de migajas, y por no amarnos a nosotros mismos lo suficiente como para saber lo que realmente queremos, lo que aceptamos, lo que no, y lo que podemos negociar; a pesar detantas red flags que nos muestran desde el principio.
Una vez que por fin nos llegamos a conoer y a querer tanto, solo podemos buscar lo mejor para nosotros; lo que nos hace bien, nos da felicidad, y lo que amamos con todo nuestro ser. Lo que nos decimos que nunca podríamos dejar ir, pero esta vez de una forma mucho más sana para nosotros. <3

