«La forma más elevada que puede alcanzar una civilización es convertirse en una red impecable de merecida confianza; una cosa sin demasiados trámites, sólo personas completamente responsables que confían las unas en las otras con una absoluta corrección… En tu propia vida, lo que quieres es una red impecable de merecida confianza. Así que, si tu propuesta de contrato prematrimonial tiene cuarenta y siete páginas, te sugiero que no la firmes.»