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Kindle Notes & Highlights
sobre todo, me consuelo con todo, me río de todo, lo olvido todo, lo deseo todo, lo pruebo todo, lo tomo todo con pasión y lo abandono todo despreocupadamente. Dejemos de lado lo demás.
Solo se puede escribir en presente: «yo escribo»; incluso «yo escribía» se refiere a un tiempo presente pasado el cual aquí trascendemos, «yo escribiré» es un momento transitorio del futuro.
Deseo vivir mi vida en presente.
No sé coquetear con métodos que no sean la admiración, la elevación de mi figura, la exaltación de lo que hago y lo que creo; colocarme siempre, en fin, por encima de aquello que deseo: nada pasa.
Toda guerra empieza siempre como un juego.
los
Más probable me parece que, en un primer momento, ayude tener algo o a alguien que sientas cercano a casa para no caer en la desesperación.
Édouard Louis se da cuenta, leyendo a Didier Eribon, de que las lágrimas tienen una carga política,
Dije que era bi sin creérmelo del todo. Fenomenología queer: me falta sentido de la orientación, diría Sara Ahmed.
Me esfuerzo en la mentira de escribir París en presente, pero esta ciudad es un pretérito perpetuo simple.
Madrid se escribe en pasado porque es incapaz de acordarse de sí misma, porque olvida, porque se olvida, porque se construye en la desmemoria y la amnesia.
presidente de una asociación de cierta importancia en el mundo LGTB:
No tener que volver a depender de nadie nunca más.
para medir la auténtica profundidad del deseo hay que ver a qué sacrificios se accedería tan solo por salvaguardarlo. A qué podrías renunciar.
Me acostumbré, muy joven, a que mis palabras se construyeran en oposición a lo que decía.
disfruto actuando.
y de la mala suerte que he tenido, y de cómo siempre me enamoro de personas complejas o de personas que conceptualizo como más complejas de lo que son para después decepcionarme.
A la mañana siguiente estuvimos dos horas abrazados en su cama. No volvimos a hablar del tema, porque no era necesario; porque para querernos no nos hacía falta querernos así.
repli sur soi
En la vida las cosas no pasan por algo. No lo creo. Detesto justificar a priori los eventos o imponer obediencia a narrativas. No es cuestión de causa y efecto.
Las sabes todas. Hazlo. O te arrepentirás siempre de lo que pudo ser y no fue.
«Toda persona tiene en su vida varios centros de gravedad que ejercen una fuerza al mismo tiempo y sin los cuales caería al vacío. Algunos días se está más cerca que otros de caer. Es cuando empiezan a fallar —a desmoronarse, a perder su tensión, su atracción— cuando nos damos cuenta del peso de la existencia.»