More on this book
Community
Kindle Notes & Highlights
somos demasiado pasivos y no perseveramos. Estamos jugueteando con todo y con todos. Pero en cuanto a nuestro futuro, deberíamos asumir nuestra responsabilidad, tomar una decisión y sencillamente hacer algo.
Dios es soberano, pero no es el autor del pecado. Estamos bajo Su soberanía, pero seguimos siendo responsables por nuestras acciones.
Vive para Dios. Obedece las Escrituras. Piensa en los demás antes que en ti mismo. Sé santo. Ama a Jesús. Y mientras hagas estas cosas, haz lo que quieras, con quien quieras, donde quieras, y estarás haciendo la voluntad de Dios.