La historia de las peripecias tecnológicas desde la invención de la escritura hasta la informática es, en el fondo, la crónica de los métodos creados para disponer del conocimiento, archivarlo y recuperarlo. La ruta de todos estos avances contra el olvido y la confusión, que empezó en Mesopotamia, alcanzó su apogeo, en la Antigüedad, en el palacio de los libros de Alejandría y serpentea sinuosamente hasta las redes digitales de hoy.

