El profeta pródigo: Jonás y el misterio de la misericordia de Dios (Spanish Edition)

by Timothy J. Keller

si no podían pensar en una buena razón para lo que Dios les había mandado, no podía haber ninguna.

Es un problema teológico, pero es, al mismo tiempo, un problema del corazón.

Dios varía Sus estrategias, y continuamente

extiende Su misericordia hacia nosotros de nuevas maneras, aunque no lo comprendamos ni lo

merez...

ayudar a reducir el poder del pecado en nuestros corazones.

Hay misericordia en el interior de nuestras

tormentas.

Dios se interesa en cómo nosotros los creyentes tratamos a las personas que son profundamente distintas a nosotros.

Mantener su fe escondida no traería ningún beneficio colectivo.

Ser creados a la imagen de Dios significa que debemos vivir para el Dios verdadero o haremos un dios de algo más y nuestras vidas girarán a su alrededor.3

Más bien, su relación con Dios por medio de Cristo no ha ido lo suficientemente profunda en sus corazones. Al igual que en la vida de Jonás, Dios y Su amor no constituyen la capa más importante de su identidad.

Toda identidad basada en tus logros y tu comportamiento es una identidad insegura.

A menudo, el primer paso para tomar conciencia espiritualmente es cuando empezamos a pensar en alguien, cualquier persona, aparte de nosotros.

el más auténtico modelo del amor es substitutivo.

Ese es el modelo del verdadero amor, no el supuesto amor que usa a otros para satisfacer las propias necesidades de realización personal.

Ellos hicieron sus votos después que el peligro había pasado. Eso indica que no estaban buscando a Dios por lo que podía hacer por ellos, sino solo por la grandeza de quién era Él. Ese es el inicio de la verdadera fe.

las lecciones más importantes que hemos aprendido en la vida son el resultado de las grandes misericordias de Dios.

Solo cuando tocas fondo, cuando todo se derrumba, cuando todos tus planes y recursos se han desbaratado y agotado, es que finalmente estás abierto a aprender cómo depender completamente de Dios.

El arrepentimiento es siempre una obra de Dios

Dios ha creado el mundo de manera que la crueldad, la codicia y la explotación tienen consecuencias naturales y desintegradoras que son una manifestación de su ira contra el mal.

Estamos leyendo y usando correctamente la Biblia cuando nos hace humildes, nos examina y nos alienta con el amor y la gracia de Dios pese a nuestras debilidades.

Cristo nos dice que debemos mostrar gracia para con otros porque nosotros mismos hemos recibido gracia.

La doctrina de la gracia de Dios es la que nos pone a los cristianos aparte de las otras fes. Es el mensaje central: el «evangelio». «Este evangelio está dando sus frutos y creciendo en todo el mundo, como también ha sucedido entre ustedes desde el día en que supieron de la gracia y la comprendieron plenamente» (Col. 1:6). Es la comprensión de la gracia lo que hace cristiana a una persona y no solo que sea una persona moral, religiosa o agradable.

La fe es una viva e inconmovible seguridad en la gracia de Dios, tan cierta de Su favor que un hombre moriría mil veces por ella. Y tal seguridad y conocimiento de la gracia divina hace al hombre feliz, alegre y fuerte en su relación con Dios y con todas las criaturas, que es lo que realiza el Espíritu Santo por medio de la fe. Por eso, libremente, de buen grado y con alegría haces el bien, sirves a todos, sufres de todo, por amor y alabanza a Dios que te ha mostrado tal gracia.1 La comprensión de la gracia de Dios