LuisaTDH

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Iniciativa y audacia, hubiera dicho Csevet. Cuando Gormened se detuvo a los pies del estrado, Maia pudo ver que era un individuo joven, bajo y fornido como el típico goblin, con una cicatriz de duelo en un pómulo. Se preguntó si ser el embajador en las Ethuveraz era un puesto de prestigio o un castigo.
El emperador goblin
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