Guardando el corazón: El deber de todo creyente (Clásicos Reformados nº 3)
Rate it:
3%
Flag icon
This note or highlight contains a spoiler
El reino y el poder del pecado pueden cohabitar junto con los más excelentes dones naturales bajo el mismo techo. Es decir, en el mismo corazón. Un hombre puede tener la voz de un ángel, y el corazón de un demonio… Los sabios fariseos no eran nada sino sepulcros bien pintados[2]
3%
Flag icon
Si descuidas la instrucción de tus hijos en los caminos de la piedad, ¿acaso también el diablo se descuidará en instruirlos en el camino de la maldad? No. Si no les enseñas a orar, el diablo les enseñara a maldecir, a insultar y a mentir. Si un campo no se cultiva, crecerán cardos y espinos.