Analistas conservadores como Larry Kudlow, el redactor jefe de economía de National Review, arremetió contra «todos los cabezas de chorlito que esperan que el desplome del precio de la vivienda en Las Vegas o Naples, Florida, hundan al consumidor, al resto de la economía y todo el mercado bursátil».62 Kudlow no tenía de qué preocuparse. Las autoridades no tenían mucha prisa por contener el boom.