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January 1 - February 8, 2025
El mismo presidente dijo una vez respecto a la ciudadanía: «Tiene mucho de inconsciente todavía y es necesario dirigirla a palos (…) entregar las urnas al rotaje y a la canalla, a las pasiones insanas de los partidos, con el sufragio universal encima, es el suicidio del gobernante, y yo no me suicidaré por una quimera».
«El desequilibrio tendrá que romperse o con una ampliación sustancial de la capacidad productiva y un progreso en la distribución del producto social o por un ataque franco contra las condiciones de la vida democrática»[2].
Además, el gobierno empezó con una política de emisión masiva de circulante. Billetes, en otras palabras. La antigua preocupación por la inflación fue contrastada, en las mentes de los economistas del gobierno, con una teoría: el nuevo dinero, en vez de producir inflación, estimularía la «capacidad ociosa» de las empresas productivas. Esa capacidad redundaría en nuevos bienes y servicios a los que el nuevo dinero iría a parar, en vez de estimular un alza de los precios en reacción a la desvalorización de la moneda[18].
Si la Caravana de la muerte había actuado en contra de la propia legalidad militar, la DINA elevó a categoría de política de Estado las violaciones sistemáticas de los derechos humanos. Las torturas más feroces —que incluían poner electricidad en las partes íntimas del cuerpo humano, violaciones y hasta bestialismo— fueron mezcladas con asesinatos callejeros disfrazados de enfrentamientos o fugas. Militantes o simpatizantes de izquierda eran exterminados a sangre fría o una vez que se entregaban.

