Cristhian

1%
Flag icon
Al cerrar la década, el “narco” mexicano no sólo seguía existiendo, sino que había trasladado su central de operaciones a la ciudad de Guadalajara y ahora dominaba en el terreno internacional cobrando a las organizaciones colombianas hasta un 50% de las ganancias
Los cárteles no existen: Narcotráfico y cultura en México
Rate this book
Clear rating
Open Preview